Cannes 2016: Verhoeven rejuvenece e Irán entra en la disputa
Último día, últimas horas del prestigioso festival de cine que a la fecha ya nos ha dejado grandes películas pero que aún no tiene esa gran favorita que se pueda llevar la Palma. Toni Erdmann de Maren Ade, Patterson de Jim Jarmusch, Aquarius de Kleber Mendoça Filho, Sieranevada de Cristi Puiu y Graduation de Cristian Mungiu están en las preferencias de la crítica a estas alturas.
Hoy un gran día para el cine ochentero, ya veremos porqué y por enésima vez en los festivales Irán con su cine sencillo pero efectivo se cuela en las favoritas.
Como decía se presentó la cinta Iraní Forushande del director Asghar Farhadi, quien tiene en su haber El oso de oro en el festival de Berlín por la impresionante A separation y presentaría en Cannes 2013 Le passé; Un par de actores no profesionales preparan una obra de teatro, ella es atacada por un desconocido en su propia casa y surge el intento vengativo del esposo. Este hecho llevara la relación a una situación límite, los aplausos se los lleva el director porque logra encausar un debate moral sobre la situación.
El plato fuerte fue el retorno del gran director holandés Paul Verhoeven quien presentó Elle, sí, el mismo director de la increíble Robocop, Basic Instincts, Total Recall, Turkish Delight, entre otras. Lo conocemos y hemos visto que su cine es un cine sin tapujos que claramente va en contravía de esta era de mojigatería PG13 y superhéroes insulsos.
Pues ha sido un soplo de aire fresco; la historia trata de una ejecutiva de una compañía de videojuegos que es violada por un asaltante en su casa, su única idea a partir de ese terrible momento es la búsqueda de venganza. Retorcida, insidiosa, ingeniosa algunos de los calificativos que recibió y lo sitúan a la altura de Hitchcock y Buñuel, palabras mayores.
Mañana la premiación, esperamos que esta vez Cannes no decepcione ni se acomode.