Cell: Zombis para el ciudadano americano promedio
Una película que se suma a la larga lista de las obras del escritor Stephen King que han sido llevadas a la pantalla. Cuarenta películas para cine, seis para televisión y con dos más en producción para el año 2017, el escritor estadounidense se mantiene más vigente que nunca. “Cell” o “Conexión Mortal” como la nombraron en México, es la antesala del muy cuestionado remake de “It”, y de “La torre oscura”, novela a la que él mismo considera su “magnum opus”, y que será protagonizada por Matthew McConaughey e Idris Elba, tentativamente.
Aunque al libro le fue bastante bien, a la película no le auguro ni la sombra del éxito que han tenido otras obras del autor, con todo y que King estuvo a cargo del guion junto con Adam Alleca.
Clayton Riddell (John Cusack) es un escritor de novelas gráficas que se encuentra en el aeropuerto de Boston, esperando un vuelo para regresar a casa. Mientras espera, un extraño, digámosle, virus, se propaga por todas las personas que están hablando por teléfono celular en ese momento, lo cual desata un caos. Al momento de la huida se topa con un conductor del metro (Samuel L. Jackson) y con su vecina (Isabelle Fuhrman).
No he leído el libro, no sé a quién echarle la culpa, si al director Tod Williams (Paranormal Activity 2) o al propio escritor y guionista, casi se las reparto al 50/50. Williams se toma varios minutos para hacernos ver nuestra adicción al celular, desde esa primera escena usted ya está pensando que esas imágenes que mira, nada tienen que ver con la ficción, porque usted mismo es parte de ellas. Sin darnos mucho tiempo de reflexionar sobre ese hecho, Williams desata el infierno antes de que usted esté bien sentado en la butaca.
Aunque oficialmente no es una película de zombis, esto es una película de zombis; que así de entrada se acepta perfecto, porque así nos comportamos frente a nuestros teléfonos, pero más adelante todo perderá el sentido y la historia se irá por caminos que no podremos seguir.
Algunas escenas le hacen honor al escritor, asomando mucho de su esencia y estilo, pero con ese montón de personajes salidos de quién sabe dónde, o relacionados con quién sabe quién, todo se va por el caño. Con “Cell” tenemos la seguridad de dos cosas: la primera es que ellos, desde el escritor, la vecina, el chofer, el niño y el director del colegio, todos son expertos en armamento y en sistemas de comunicación, como todo buen ciudadano americano. Y la segunda es que Cusack viene usando el mismo vestuario desde hace más de 10 películas.
John Cusack y Samuel L. Jackson ya habían trabajado antes en una película adaptada de una novela de King “1408”, en donde tuvieron por mucho una mejor actuación y química entre ambos que en esta cinta. El resto del elenco también está para llorar.
Existe la obvia intención de hacer una crítica a nuestra dependencia y deshumanización, la escena del aeropuerto lo puede hacer encogerse en su lugar y poner cara de espanto, pero no es suficiente para perder 100 minutos de su vida y pagar un boleto de entrada. Así que no se desgaste y mande a “Cell” directo y sin escalas a la lista de las adaptaciones más mediocres de Stephen King.