Cinegrafías: Maureen O’Hara

El 24 de octubre de 2015 concluía la existencia de una de las más importantes actrices de la época dorada del cine clásico de Hollywood, conocida como la reina del Technicolor, por el esplendor de sus ojos verdes, su hermosa sonrisa y su exuberante cabellera rojiza, me refiero a la irlandesa- estadounidense Maureen FitzSimons, mejor conocida como Maureen O’Hara.

Fue el actor inglés Charles Laughton que, al quedar cautivado con su belleza al verla en una audición, la convenció para que continuara con su carrera de actriz ofreciéndole un contrato de siete años con su productora. Su primera interpretación fue para la película “Jamaica Inn” (La Posada de Jamaica; 1939), dirigida por un incipiente Alfred Hitchcock, con buenos resultados para la actriz.

A solicitud del propio Laughton, participó en la película “El Jorobado de Nostre Dame” como la gitana Esmeralda, papel que la catapulto a la fama.

Con tan solo 19 años se trasladó a Hollywood en donde conoció a John Wayne con quien tuvo una gran amistad y protagonizó varias películas, la mayoría de la mano del director John Ford. Sus actuaciones con un temperamento fuerte y decidido y su notable apariencia de belleza irlandesa resultaban muy atractivas para el público cinéfilo.

En 1946 se le concedió la ciudadanía estadounidense. Siendo la primera mujer irlandesa en obtener la doble nacionalidad americana e irlandesa.

Fue también una de las primeras actrices en opinar abiertamente sobre el machismo en la industria del cine, develando “el acoso y los favores sexuales que se exigían en Hollywood para obtener los papeles.

Dance, Girl Dance; ¡Qué verde era mi valle! y Milagro en la calle 34 son tres de las películas que protagonizó y fueron seleccionadas por el National Film Registry para la preservación de la memoria estadounidense en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos.

En su extensa filmografía encontramos que protagonizó películas con actores como Tyrone Power, Henry Fonda, Douglas Fairbanks Jr. y Errol Flynn, entre otros.

La actuación realizada en “El hombre tranquilo” es considerado como el mejor papel de O’Hara según la crítica y el recuerdo del público. Y el que la actriz considera su mejor trabajo.