Crónicas desde el Bar: Ted Bundy. Durmiendo con el Asesino
La foto principal pertenece a David Yarrow
– Lo tedio abunda, mi estimado Mr. Wolf
– ¿Por qué lo dices Alfred?
– ¿No me diga que no vio la bazofia esa de Ted Bundy? Me paso la vida poniéndole tragos a mis clientes y cuando voy a buscar un rato de desconexión, me toca ver mediocridades de este tipo.
– ¿Cuál sería tu crítica de la película Fred? Así, a grandes rasgos.
– Pues para empezar, me aburrió bastante aunque reconozco que la actuación de Zac Efron está de puta madre, pero sin más, no es necesario que le den premios ni nada. Una palmadita en la espalda y ¡hala!, ¡venga! A mear y a cama. La película se centra en la que fue su pareja, Elizabeth Kloepfer, interpretada por Lily Collins. Un personaje plano y que no aporta mucho a la hora de sostener el hilo argumental y se desvanece hasta casi parecer una trama de desamor (que lo es!) y no enfocarse en las masacres perpetradas por el guapito de Teddy. Y realmente Efron consigue mostrarnos el lado más carismático y entrañable del terrible asesino y hasta yo logré simpatizar con su personalidad. Hasta se ve provocador cuando al principio de la película le está preparando el desayuno a Liz y a su hija, cuchillo en mano o mismo en el cumpleaños de la pequeña. Ahí Berlinger nos está dando pistas que a este metrosexual embacaudor de lomo plateado, le gustan más los cuchillos que al Dr. Dark de Cinescopia golpear herejes. Un aviso para desconocedores de este despojo humano.
– Me quedo con los mejor del film: la ambientación, los colores, la fotografía y la música sí nos trasladan a eso años 70 de una manera bastante fiel. De lo peor, es que Berlinger se “hizo la picha un lío” y al mezclar realidad / documentales y ficción (el libro de la propia Liz, El príncipe fantasma: mi vida con Ted Bundy) no se aclara en los conceptos fundamentales y por eso el resultado se queda a medio camino entre “lo que fue” y “lo que pudo ser”, generando confusión, sobre todo en el espectador ajeno a la historia real de Bundy. Demasiado romanticismo y poco rock and roll. De todos modos Berlinger hace un soberbio trabajo documental en la serie estrenada por Netflix y que sí aconsejo verla.
– Muchas gracias Alfred por tu sinopsis
– No, de qué, ¿no lo irá a publicar en esa web donde escribe, verdad? Si no, ya tendremos que hablar de dinero, jajaa, no se crea!
– ¿Qué te debo Alfred?
– A la primera invito yo Mr. Wolf. Le pongo otra.