Demon Slayer Temporada 2: Decepcionando al fandom
La larga espera para los fans de Demon Slayer (Kimetsu no Yaiba), finalmente terminó y ha regresado en forma de… ¿la película de Mugen Train (el tren del infinito) dividida en capítulos?
Y es que Demon Slayer, es la franquicia de anime que más ha dejado ganancias (la película de Mugen Train, superó en taquilla a las películas de Studio Ghibli por ejemplo), haciendo que gigantes del entretenimiento como Disney se planteen incursionar al mundo del anime. Es por ello que esta segunda temporada era algo muy esperado por millones de fans alrededor del mundo.
Pero vayamos al punto, desde antes de que se estrenara la nueva temporada de Demon Slayer, había rumores de que la primera parte realmente iba a ser la película de Mugen Train (Demon Slayer: El tren del infinito) dividida en apacibles capítulos de 20 minutos. En un principio hubo un sector del fandom (en el que me incluyo), que tuvimos algunas dudas sobre eso, ya que ¿Para que repetir algo que lo hiciste muy bien en una película?
Total, la temporada finalmente se estrenó en las plataformas de Crunchyroll para Latinoamérica, y nos regalaron un hermoso capítulo enfocado totalmente en el personaje de Kyojuro Rengoku (el pilar de la llama), personaje que en tan solo 2 horas se ganó nuestro corazón y a su vez nos robó un par de lágrimas. El episodio cuenta una historia inédita que no viene en el manga y que sin dudas deja un buen sabor de boca, y que nos muestra un poco más de este carismático personaje. Este episodio sirve como prefacio al inicio del arco del tren infinito, es decir, a todo lo que vimos en la película de Mugen Train.
Me esperé a hacer esta reseña, hasta no cerciorarme de que los rumores que se decían eran ciertos, y es así que cuando puse el capítulo número 2, pues vaya sorpresa, efectivamente lo eran, pues lo que vimos no es otra cosa más que los primeros 20 minutos de la película de Mugen Train (y así el capítulo 3 es igual). Quizás gran parte del fandom no tiene quejas sobre esto, pero hubo otro sector (en los que me incluyo) que está dudoso y hasta cierto punto decepcionadode que esto haya sucedido así.
Y es que la película de Demon Slayer: El tren del infinito, fue un espectáculo que todos disfrutamos, la historia, los efectos especiales, la animación, el soundtrack, los efectos de sonido, inclusive la canción de los créditos (Homura de Lisa), todo fue un cataclismo de sensaciones que cuando dejamos la sala del cine, la mayoría simplemente lo hicimos entre lágrimas y una enorme sonrisa de haber disfrutado algo tan épico (por supuesto que para disfrutar dicha película tienes que ver la primera temporada sí o sí). Y claro, supongo que Ufotable dijo, “si esta película salió tan bien, ¿por qué no revivirles la experiencia a los fans en episodios de 20 minutos?”. Lejos de quererles dar una “nueva experiencia a los fans” de ese arco, es notable como el objetivo es exprimir el limón hasta que quede completamente seco. Cosa que sinceramente no es del agrado de muchos (por que es exactamente como aquel episodio de los Simpsons, donde todos están locos por comprar una stacy malibu que no tiene nada de nuevo e innovador más que un sombrero).
Pues sí, eso ha sido este inicio de segunda temporada, “consuman otra vez este producto aunque no tenga nada nuevo más que un episodio introductorio, y quizás los fans se lleven la ligera sorpresa de alguna que otra escenilla extra.” Una práctica excesiva y comercial que no tenía razón de ser, y que solo crean dudas para el futuro de la franquicia (ya todos sabemos que le pasa a una franquicia cuando empieza a ser muy sobre explotada).
Pero no todo es malo, al menos nos entregaron un nuevo opening (Akeboshi) a cargo de la artista Lisa que nos deleitó con sus canciones anteriores (Gurenge y Homura) que la verdad es que no decepcionó. Pero en fin, sinceramente no creo que vaya a haber muchas noticias de Demon Slayer en lo que acaba esta primera parte de la “segunda temporada” y habrá que esperar a que inicie el arco del distrito rojo, para que regrese de nuevo ese furor por esta saga, con la esperanza de que la animación y lo épico sigan por todo lo alto y no decaiga conforme avanza la historia, como desafortunadamente le suele suceder a los animes.