Editorial Cinescopia: El síndrome de Pagliacci
Por el Arqui Cruz
Con esta atinada escena iniciamos una nueva sección en Cinescopia con un estilo más serio y objetivo donde nosotros sus conocidos autores vertiremos nuestras opiniones y puntos de vista de la manera más directa posible. Este es un tema que se había querido abordar hace tiempo pero con el desafortunado hecho que fue la muerte de un gran y querido histrión como lo fue Robin Williams, creemos que es el momento adecuado para tocar el tema, no de manera morbosa, sino para tratar de comprender esto que le sucede a actores que parecen llevar una vida perfecta y envidiable para después llevarnos la desagradable sorpresa que no todo lo brilla es oro.
Todos en algún punto de nuestras vidas hemos soñado con caminar sobre la alfombra roja, estar al frente de los reflectores ¿y porque no? ganar un Oscar, la idea que nos venden sobre ese mítico lugar llamado Hollywood es muy poderosa en especial en esta época en donde proliferan los reality shows y transforman simples perdedores en todas unas luminarias; pero como todo lo que es demasiado bueno para ser verdad… termina siendo demasiado bueno para serlo.
Esto no es nuevo y tampoco es algo que vaya a dejar de pasar en los años venideros por desgracia, así que antes de azotarnos y desgarrarnos las ropas por la pena que nos embarga cuando suceden estas cosas vamos a tratar de analizar estos incidentes a nuestro nivel, no soy para nada un experto en el tema y obvio que el título fue una completa invención de mi parte por eso primero leamos estas interesantes líneas de nuestro psicólogo de cabecera, es decir el buen Alex Waters, quien me compartió unas interesantes líneas que les paso a continuación:
Historicamente el suicidio ha sido catalogado por los profesionales de la salud (psicólogos y psiquiatras) como un problema derivado de un mal manejo de la depresión o de distintos trastornos del estado del animo.
Más allá de la visión social del suicidio allá por el siglo 19, la muerte autopromovida siempre ha sido tema de debate. Muy pocas posturas culturales, sociales o clinicas han defendido la decisión de morir a mano propia. La muerte asistida ha sido la más comentada y aun así polémica de la decisión de cuando morir debido a un dolor físico. Sin embargo, el dolor emocional nunca ha sido debidamente analizado y justificado para el poder aceptar que una persona sufre de manera poderosa para de manera colectiva, pueda ser aceptada la decisión de quitarse la vida. Lamentablemente muy pocas veces después de la muerte un suicida se buscan las causas fenomenológicas del porque una persona decide cabalmente quitarse la vida y se busca la patología médica o psicológica para “explicar” el deceso.
El suicidio desde un punto de vista personal debe tomarse como una decisión personal con base al libre albedrío en los casos en que no haya existido una alteración psiquiátrica o psicológica previa. Al final de cuentas con el estilo de vida diaria uno toma minuciosas desiciones de como uno muere , de que manera y con malos cálculos hasta de cuando uno morira.
Hace 10 años atrás si una persona decía estar deprimida o bajo mucha presión también conocido como “stress” se le consideraba como una rabieta o un simple estado mental pasajero, como un fuerte dolor de cabeza. Por desgracia en estos diez años hemos visto como el estrés y la depresión han escalado lugares de manera escandalosa en la escalinata de las enfermedades más riesgosas para la humanidad hasta llegar a ser la prioridad en varios países y convertirse en un problema de salud pública en todo el mundo.
El problema radica en que ataca a todos y de manera muy peligrosa, pero esto lejos de ser una novedad en el mundo de Hollywood parece ser parte del contrato cuando se firma con la fama, han de ser como las letras pequeñas y muy escondidas que casi todos ignoramos al momento de pactar con la inmortalidad. Max Linder en los años 20´s se quitó la vida junto con su esposa Jean Peters y su historial era que llevaba una dura batalla contra la depresión, otros fueron víctimas del mal de amores como Mayo Methot quien fuera la tercer ex-esposa de Humprey Bogart y que cayó en un profundo alcoholismo cuando este la dejo por Lauren Bacall quien murió hace unos días por causas naturales; se cree que el abuso de este vicio fue el que acabó con su vida.
Pero no siempre ha sido la depresión, los malos amores o los excesos, un detalle importante como lo comentaba el buen Waters es el dolor físico, casos como el del desafortunado Pedro Armendáriz quien tuvo que ponerle fin a su vida debido al cáncer en los huesos; el director M.S. Van Dyke tuvo un fin similar debido al cáncer y cuando el dolor se volvió insoportable (no tomaba medicamentos debido a sus creencias religiosas) le puso fin a su situación y sus herederos mantuvieron total hermetismo con los detalles de como fue que consumó el acto final.
La lista es larga y las razones por las que estos histriones deciden dejarnos son variadas, pero generalemente tienen unos puntos en común: abuso de sustancias y depresión, el verdadero cóctel de la muerte.
En el caso de Williams los excesos tampoco eran un novedad, aunque había logrado mantener sus adicciones bajo control una nueva problemática se presentó en la vida de este querido actor: Fue diagnosticado con “Parkinson” situación que se supone fue un duro golpe para el estado de ánimo del dramaturgo. Otro detalle que salta a la vista es que su serie de televisión “The Crazy Ones” fue un fracaso y se canceló después de dar por terminada la primera temporada, hecho que también asoló a Robin quien se sintió directamente responsable de lo ocurrido y se dice que cuando acudió a rehabilitación fue por depresión y no por sus vicios como se ha manejado en otras especulaciones. Como último componente a este cóctel se dice que la combinación de medicamentos para combatir la depresión y los del Parkinson alteraban fuertemente su personalidad y pudo haber sido un factor determinante para que el actor tomara la decisión de quitarse la vida repentinamente ya que no había dado señas de alguna tendencia suicida excepto esta, que proviene de una persona que habló con él un día antes: “El estaba triste como comúnmente lo estaba, pero nada fuera de lo normal” …. es aquí donde estalló y me pregunto: ¿Acaso es normal estar triste todo el tiempo?
Otro punto a revisar es cuando dejan notas suicidas, en una forma muy personal creo que es la mayor muestra de desapego a la vida por parte del suicida quien logra desarrollar la voluntad para derribar las defensas naturales que poseemos como especie las cuáles están diseñadas para luchar por la vida a como de lugar y aún así tener la frialdad para planear la forma de morir y darte el tiempo de despedirte como el triste caso del director Tonny Scott.
En conclusión, este tipo de situaciones me recuerdan mucho al mito de Dédalo e Ícaro, en el cual el segundo se acerca demasiado al Sol con sus alas postizas y el calor generado por este derrite la grasa que mantenía las plumas unidas y por ende termina cayendo al suelo. A veces olvidamos que esas personas son de carne y hueso como nosotros o peor aún, ellos mismos parecen olvidarlo con consecuencias catastróficas en especial para lo que los rodean.
Esto es todo de mi parte, esperamos que esta nueva sección sea de su agrado. Gracias por su preferencia.
3 Comments
una interesante aproximacion, quiza sea bueno que lean sobre biopolitica o biopoder, dejo una idea… “quiza tanto estres y depresion abundantes en nuestros dias sean causados por una fuerza aun mayor que la de la cotidianidad y los malos ratos, quiza estamos estresados y deprimidos porque precisamente, por paradojico que se presente, no se nos deja morir, solo pensar que forzosamente debemos vivir hasta una determinada edad para poder obtener una pension y ver realizada la “tranqulidad” de nuestra familia directa (hijos, esposa), la presion de manterce vivo, fuerte, con salud y constante preparacion (academica y practica), precisamente esa idea, no se nos permite morir, debemos seguir aqui “cueste lo que cueste” para poder lograr esas efimeras metas… que horrible a de ser que esa una cosa cierta en la vida, la muerte, se nos sea negada…. pienso en ese sentido, que el buen robin williams quiza vencion “la gran resistencia” y se dejo partir, que buenos ejercicios señores de Cinescopia (y)
Saludos!
Que bueno que le gusto esta nueva sección, a la cual le pusimos mucho empeño y su comentario encierra mucho de verdad ya que hasta el Fett hizo un comentario similar al suyo al decir que Williams sólo pudo escapar de Hollywood de esta manera.
En cuanto a lo del retiro puede que sea muy cierto para muchos casos pero yo soy más de como dijo Bud en Kill Bill, el verdadero asesino es el retiro y la verdad yo espero poder desempeñar algunas de mis labores que hago hoy en mi vejez XD, pero eso ya es cuestión de cada quien.
Muchas gracias, no solo por leer el artículo sino por vertir su opinión, que es lo más importante para nosotros sus autores.
Hasta la próxima