El papi de la semana
William Bradley Pitt, más conocido como Brad Pitt, nació un 18 de diciembre de 1963, en el poblado de Shawnee, en Oklahoma. Sus inicios en la actuación fueron apariciones en novelas, sin embargo, el papel que le da la oportunidad de ser conocido es el de cowboy en la película “Thelma y Louise” (1991). Desde aquí arrancó a varias mujeres, el aliento, debido a su aspecto joven, atlético y personalidad cínica pero inocente.
De allí saltó a papeles protagónicos como en “Entrevista con el vampiro” (1994), en donde Pitt menciona, se enseñó realmente actuar. Eran papeles que le exigían más de sí mismo, en donde más de alguna hubiera querido ser mordida por este vampiro de buenos sentimientos y cuestionamientos morales.
Para esta espectadora, uno de los momentos de Pitt, inolvidables en todos los sentidos. En “Leyendas de Pasión” (1994), donde actúa en la compañía de un grande: Anthony Hopkins, como su hijo rebelde y apasionado. Nos encontramos, en este filme, a un Brad físicamente entrando a la madurez, con una complexión atlética mas no artificial. Simplemente indescriptible aquella escena de la cascada… júzguenlo ustedes mismos. Esta actuación le ganó su primera nominación a los premios Globo de Oro.
Brad nos vuelve a sorprender en 1995 obtiene el papel de detective en el filme de suspenso “Seven” del director David Fisher, con el famoso y versátil Morgan Freeman, en donde logra actuar de una forma sobria pero elegante, en una de las películas que, desde mi punto de vista, es insuperable. En ese mismo año Pitt audiciona para el papel protagónico de la gran película “Doce monos” del director Terry Gillian, papel que no obtuvo y que termina coprotagonizando con Bruce Willis, a quien opaca totalmente. Cabe decir que fue este papel el que lo catapulto a la fama, además de ganarse el reconocimiento y respeto del medio. De hecho esta actuación le hizo ganador de un premio Globo de Oro en la categoría de mejor actor de reparto. Pitt actuó, años más tarde, en el filme de culto “El club de la pelea” (1999), trabajo del que muchos piensan fue su último papel importante.
Para el gusto de todos sus fans nos complace de nuevo en el 2004 cuando protagoniza “Troya”, donde de nuevo destaca su físico, ya que es notable que Pitt entrenó para este papel; tenemos la fortuna, además, de que el vestuario es escaso. Quién no fantasea con ser la esclava de este guerrero casi desnudo, amable, cortés y agresivo al seducir.
Una de sus películas más taquilleras pero que terminó siendo un churro en el 2005, hace mancuerna con Angelina Jolie en “Sr. y Sra. Smith”, la gente fue a verla más por el morbo que generó la ruptura de Pitt con Jennifer Aniston, por la supuesta infidelidad con Jolie.
En el 2008 regresa y sorprende con una actuación lacónica en “el curioso caso de Benjamin Button”, en donde vemos a un Brad maduro tanto física, histriónica, como personalmente.
Ahora se estrena “El árbol de la vida”, parece ser retoma la temática anterior: introspectiva, espiritual, sentimental. Algunos iremos a verla solo para tener un recuerdo más de este guapísimo maduro, a quien el tiempo le sienta cada vez mejor.
Para las que quieran mas de este ahora padre de familia, esposo, actor y productor, tenemos una amplia filmografía desde el vaquero inocente, pasando por lo elegante que se ve interpretando a la muerte, un loco desquiciado asesino macho alfa, hasta el guerrero de grandes músculos que es capaz de caer ante los encantos de una mujer y rematando con el sentimental benjamín en el revés cronológico.