Enola Holmes: Mary Sue Victoriana

Un personaje inexplorado en cine, un universo literario consagrado en el gusto mundial, un casting de ensueño, una querida actriz en su primer protagonico de gran calado fuera de la serie que la llevó a la fama…¿Qué podía salir mal? El exceso ideológico por sobre la calidad argumental, para variar.

Enola Holmes nos presenta a la hermana menor de Mycroft y Sherlock Holmes, oculta hasta ahora, lo que pudo abrir muy interesantes posibilidades argumentales para su debut y posibles secuelas, pero todo se ve diluido en un ya cansino discurso ideológico y una trama tristemente predecible para una historia de misterio.

¿De qué va?

Criada por su madre en solitario una vez que sus hermanos Mycroft (Sam Claflin) y Sherlock (Henry Cavill) , famosos político y detective, respectivamente, se alejaron de la familia, Enola Holmes (Millie Bobby Brown) ha desarrollado su innato intelecto en múltiples artes y disciplinas, fuera del mundo exterior. Cuando su madre (Helena Bonham Carter) desaparece y sus hijos varones parecen no tener interés en encontrarla, Enola, quien posee habilidades deductivas al nivel de Sherlock, se embarca en su búsqueda, a la vez que lucha en contra los prejuicios de la estirada sociedad victoriana y por resolver un crimen asociado con la nobleza. Basada en la serie literaria de Nancy Springer

Mary Sue, otra vez

De nuevo nos encontramos ante un personaje femenino poderoso con cualidades prácticamente innatas, lo que desde luego resta fortaleza al personaje y a su narrativa. Al parecer los guionistas han ignorado lo mal que han resultado las películas esterilizadas por una Mary Sue sin defecto.

Si bien en medios británicos se trata de un muy gustado recurso narrativo, la ruptura de la cuarta pared por medio de la cual nos enteramos de las ideas de Enola, a ojos americanos puede resultar casi paródico y ciertamente contribuye a incrementar la naturaleza súper ultra empoderada de la protagonista. Como bien advierte la sinopsis ofrecida por la misma Netflix, los hermanos Holmes están allí sólo para estorbar y afianzar las malignidades del patriarcado. Mycroft es la encarnación del machismo más estereotípico y Sherlock es un mero adorno. Un desperdicio total de talento

En un Londres de fantasía, no podían faltar las cuotas de “diversidad” tan manoseadas en estos días, difícilmente creíbles en el Londres victoriano. Por supuesto, no faltan los discursos velados por la libertad, la democracia, equidad de género y lo muy sucios y cochinos que son los nobles. Nada nuevo bajo el sol.

Pero ¿entretiene?

Se deja ver, pero la trama ofrece muy pocas sorpresas. Ciertamente el mensaje feministoide anti patriarcal es demasiado reiterativo a lo largo de toda la película y francamente resulta agotador y distractor.

Millie Bobby Brown realiza una actuación contenida como la heroína adolescente, recordándonos que es casi una niña y a su vez llevando el peso del protagónico. El resto del casting tiene poco material para trabajar, ciertamente