Gracia para vivir la vida
Una historia con buen ritmo, con personajes divertidos y buenos momentos es la forma corta de resumir la película Any de Gràcia o Año de Gracia, una película hablada en catalán del director Ventura Pons que se encuentra en competencia dentro de la categoría Largometraje Iberoamericano de Ficción en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara.
David deja su hogar disfuncional para tomar clases en una escuela de arte en Barcelona, animado por el deseo de volverse un pintor famoso y disfrutar del ambiente citadino llega a casa de Gracia, una viuda cuyas diversiones son jugar a las cartas y cuidar de su loro. David se topa con que no todo sería como pensara y ello lo obligara a replantear sus metas.
El humor es algo que trasciende fronteras y esta historia se siente muy cercana y podría ser una buena apuesta si llegara a nuestras salas. La historia no se cae y hay risas a lo largo del relato. Sin duda el personaje más entrañable es el de Gracia (Rosa María Sardá) que logra buena química con el joven David (Oriol Plá).
Hay un guiño al trasfondo socioeconómico de la juventud en España, sin embargo Any de Gràcia no se concentra en ello y es más importante para la historia el valor de la amistad, el crecimiento y la madurez. Tampoco se busca dar una especie de sermón, el final de la historia se antoja justo para el género de la película.
Funciones durante el festival: jueves 8 a las 19:15 horas, viernes 9 a las 22:40 hrs. y sábado 10 a las 18 hrs. Todas en Centro Magno
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