Haunted Mansion: Disney sigue maldito

Cada día, o mejor dicho, con cada producción que saca Disney, nos damos cuenta que siguen sin nuevas ideas. Ahora nos traen el remake de “La Mansión embrujada”. Una película que en 2003 pasó sin pena ni gloria y eso que contaba con todo el carisma de Eddie Murphy.

Ahora, sin Eddie, nos vienen a contar más o menos la misma historia, pero adaptada al 2023. Digo, más o menos, porque aunque los personajes son casi los mismo, la trama cambia un poco.

Todo empieza en un bar en Nuevo Orleans donde Ben (LaKeith Stanfield) conoce a Alyssa (Charity Jordan), un astrofísico y una guía de turistas, que hacen tours a lugares embrujados. Al parece comienzan un romance, corte, Ben en otro bar, parece que con problemas de alcohol, y ahora él es un guía de turistas de lugares embrujados, en los que no cree y está muy amargado. A partir de ahí empiezan a contarnos una historia que suena interesante, porque Ben es contactado por el Padre Kent (Owen Wilson) para que vaya a tomar fotos a una casa embrujada. Esta casa es propiedad de Gabbie (Rosario Dawson) y acaba de llegar ahí con su hijo Travis (Chase Dillon) y estos, desde el minuto uno, han sido atormentados por fantasmas que habitan la casa.

Hay que decirlo, la película es muy divertida, tiene buenos gags, sin embargo, esta sostenida por los personajes secundarios. Dentro de la trama necesitan de una médium y contactan a Harriet  Tiffany Haddish) que se roba toda la película. Otro de ellos es Bruce (Danny De Vito), un historiador que conoce la historia de la casa, Madame Leota (Jamie Lee Curtis)   y el villano Crump (Jared Leto), y es que los personajes principales son demasiado predecibles y sosos.

Bueno ¿y el guion? Pues tiene más huecos que un queso gruyere y tratan de rellenarlos con chistes sobre marcas como Amazon, Cotsco o Pay Pal.  Todo va resultando predecible y cuando llegamos al final, ya nada más nos quedamos con las risas.

Ahora, esto está basado en la atracción de La casa Embrujada de Disney (nota personal, siempre ha sido mi favorita en el parque) y en eso sí, adaptan muy bien el recorrido del juego con la trama de la película. Le dan una historia a los cuadros más icónico, como el del duelo, el del cocodrilo y el de la mujer sentada en la tumba del marido. Usan las mismas voces, la música y hasta los mismo colores y ambientación. Cosa que, si bien es cierto, ya habían hecho en la pasada entrega, ahora esta con mejores efectos y más parecido al juego.

Yo recuerdo aquellas épocas cuando veías una película en el cine y al terminar pensabas “me hubiera esperado a que la pusieran en la tele”, y tal parece que este es el caso, mejor hubiera esperado a que saliera en Disney+ o tal vez estrenarla en Octubre y no contra el monstruo taquillero que es el Barbenheimer. Igual y confiaron en su gran elenco o en que la gente que no consiguiera boletos para el Barbenheimer, y decidieran entrar a esta ¡quién sabe!

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