La Estrada de Cinescopia es DVDs: (Te) Voy a Explotar
No voy a mentir, busqué esta película como quien busca el Santo Grial y por fin, el año pasado sale en DVD. No era para menos, de verdad soy fan del director Gerardo Naranjo con sus apenas tres largometrajes; asimismo gusto del trabajo del veterano Diego Luna como actor y director. Hay que decirlo, Abel fluye naturalmente al tiempo que narra una historia por demás peculiar. Sobre Gael García Luna tengo mis reservas, creo que a veces tiene actuaciones muy destacadas y un excelente imitador de acentos, y como director (¿en serio, Déficit?) ya ni hablar.
Con Diego y Gael como productores y Gerardo Naranjo en la dirección era seguro que nada podía salir mal, la gente decía “amarla“, participó los festivales de Venecia, Toronto y Berlín, entonces me pregunto: ¿de verdad mi cuerpo tendrá un gen malinchista? El punto es que Voy a Explotar tuvo la fuerza sí, pero de hacerme dudar sobre mis gustos cinematográficos.
Y es que lo que pudo ser una película entrañable como muchas otras que abordan el tema de la búsqueda de identidad durante la adolescencia (alguien recuerda la ya mítica “El Niño es Nuestro, Manuel Summers 1973) termina siendo algo cercano a un video-home, y si fuera poco de bajo presupuesto así sin más.
Aunque con algunas secuencias interesantes, el gran desacierto de la película se encuentra en sus protagonistas (Juan Pablo de Santiago como Román y Maria Deschamps como Maru) ) quienes más allá de ser desconocidos y ser ésta su primera cinta, la actuación de ambos es tan plana que lo mismo podrían decir “buenos días” que “tengo cáncer” sin la mínima pizca de emoción. Podría argumentarse que los personajes son un par de adolescentes sin motivación y “ensimismados“, víctimas de la cruel sociedad que los empuja a “rebelarse“, incomprendidos y un largo etcétera para disculpar su evidente carencia de talento y habilidad para transmitir apenas nada más que fastidio y un aburrimiento de bostezo (no empiecen con que: “el arte es subjetivo“).
Eso hace que sus diálogos se vuelvan tediosos y demeriten el trabajo de un gigante del cine y el teatro como lo es Daniel Gimenez Cacho y una pasmada (o ¿fastidiada?) Rebecca Jones, cayendo incluso por momentos en un lamentable humor involuntario.
No sé si se trate de la gran película que todos superion captar excepto yo, aunque he visto películas que aunque no haya logrado entender del todo, su belleza o profundidad mueve algo en mí o de verdad a un gran sector de nuestra sociedad mexicana está dispuesto a comprar un producto que aún con el apoyo de tres importantes personajes mexicanos resulta predecible y gris, pero sobre todo pretensioso.
Trabajos de mucho más calidad son “Quemar las Naves“, ópera prima del director Francisco Franco Alba o mejor aún, en un tema distinto “La Última Mirada” también primer trabajo de Patricia Arriaga-Jordán, cintas en las que espero tener la oportunidad de abundar próximamente.
Así “Voy a Explotar“, que en consideración a su precio humildemente sugeriría cambiar el título por “Te voy a explotar“.