La Mosca: El gran clásico de horror cárnico cumple 38 años
La Mosca, estrenada en 1986, protagonizada por Jeff Goldblum y Geena Davis está basada libremente en un relato del escritor George Langelan, mismo que fue adaptado a la pantalla grande por primera vez en la década de los cincuenta contando con el mítico actor Vincent Price en el rol principal.
Hay una mosca en mi filme
Como cinéfilo agradezco que un director capte mi atención en los minutos iniciales de la película, dejando a un lado los planteamientos rebuscados, pretenciosos y en ocasiones hasta confusos, a los que con frecuencia se recurre para justificar un supuesto dominio de la ciencia ficción.
La Mosca inicia con un breve diálogo entre el excéntrico, pero tímido científico Seth Brundle y la joven periodista Veronica Quaife. El primero asegura tener en su poder un invento que supera cualquier nivel de comprensión y que, sin duda está destinado a convertirse en el mayor adelanto tecnológico de la historia.
Con escepticismo, pero atraída por el misterioso personaje, Veronica acepta acompañarlo a su casa-laboratorio. La visita confirma que Brundle no es un charlatán sino un genio quien ha creado una cápsula tele transportadora. Asombrada al ver una increíble demostración, Veronica intenta convencerlo de la importancia que significa mostrar su invención al mundo. Pero para Brundle, aún falta un último experimento: Ser él quien viaje a través de la cápsula.
A diferencia del ya citado clásico, en donde la intromisión de una mosca durante la tele transportación trae como consecuencia el intercambio de cabezas entre científico e insecto (inevitable recordar la parodia en Los Simpson), en la nueva versión la fusión de ambos organismos da pie a una metamorfosis que convierte a Brundle en un hombre con agilidad y fuerza sobrehumana. Los nuevos poderes que incluyen trepar por las paredes, son solo el preludio de un fatídico final; el protagonista sufrirá una mutación que literalmente lo hará caerse a pedazos, gracias también al extraordinario maquillaje de Chris Walas y Stephan Dupuis, que les valiera un premio de la Academia.
En La Mosca, Cronenberg aborda los hechos con su particular estilo y teje una historia donde el sexo y la carne tienen una importancia preponderante. Brundle es un nerd, quien vive absorto en sus ideas, con un nivel intelectual envidiable, sin embargo “algo” le falta para dar el paso final en sus investigaciones. Esa idea aparece como una revelación durante uno de sus encuentros sexuales con Veronica.
La Mosca presenta el conflicto entre el intelecto y el instinto. Siendo que cuando el primero se ve superado por el segundo, el hombre pierde la condición que lo hace diferente a los animales. El ahora denominado Brundle-Mosca tiene un apetito sexual insaciable, compite para demostrar que es el más fuerte y así ganarse la admiración de la hembra y hacerla suya. Al descubrir que Veronica tiene en su vientre una criatura engendrada por él, Brundle-Mosca enloquecido hace lo imposible para perpetuar su especie o salvar lo que puede significar lo último que resta de su humanidad.
Gracias al trabajo de solo tres actores (al reparto se suma John Getz como el editor y ex amante de Veronica), una atinada dirección y un sólido guion, La Mosca es uno de los filmes de ciencia ficción y horror más recordados de la segunda mitad del siglo XX.
Especialista en un lenguaje cuyo alfabeto visual está conformado por sangre, huesos y carne, David Cronenberg continúa siendo un director al que no hay que perder la pista… por si las moscas.
2 Comments
Yo pienso que La Mosca es una de las mejores peliculas de terror donde Cronenberg puede abarcar tantos temas de golpe y porrazo… hasta las de las enfermedades que volvian a la gente, figurativamente, unas moscas, como la lepra o el SIDA, una vision hasta kafkiana de la monstruosidad, lastima que ahora quieran hacer remake… por Fett y por Kubrick que se acabe el mundo antes de eso… o nos volvamos todos moscas…