Las 10 Mejores Películas de Fred Zinnemann
Estamos hablando de uno de los directores clave del cine americano, y en mucha parte artífice narrativo del estilo dramático que perdura hasta nuestros días en cuanto a producciones hollywoodenses se refiere. Fred Zinnemann, polaco de nacimiento y americano por profesión, definiría muchos los recursos o estatutos con lo que las obras fílmicas, al menos en Estados Unidos, serían medidas para registrar o comparar la calidad de un producto, como si de un ISO o certificado de calidad se tratara, principalmente dentro del gusto o las reglas de la Academia (no por nada tuvo en su haber 4 Oscar y el doble de nominaciones).
Comenzaría su carrera como asistente de cámara, para después hacer su primer largometraje en territorio mexicano, una curiosidad llamada “Redes” de 1936, que asomaría un estilo más enfocado a una corriente neorrealista, aún sin nombre y que sería acuñada algunos años después por el cine italiano (no es casualidad que el cine mexicano haya sido otra industria que relevó y desarrolló dicha corriente).
Su segundo largometraje llegaría en 1942, sin embargo no lograría la notoriedad requerida hasta seis años después con “The Search”, sin duda una de sus mejores películas. De aquí a la eternidad, Zinnemann se convertiría en “un hombre para todas las temporadas”, logrando posicionarse como uno de los referentes del cine hollywoodense desde finales de los 40 hasta mediados de los 60, ganando 34 premios que incluyeron además de sus 4 Oscar, 2 BAFTA, un reconocimiento especial de Berlín y Cannes, y dos premios de Venecia
Recordemos al gran Fred Zinnemann con sus Mejores Película
10 – The Member of the Wedding (1952)
Por Edgar del Valle
La vida de una pequeña que vive con su hermano se ve modificada por la boda de éste, ya que se considera desplazada de su cariño, contando solo con el apoyo del ama de llaves que pretende consolarla y enseñarla a madurar. Por su actuación en esta cinta Harris fue nominada al premio Oscar, siendo su debut en la pantalla grande tras una extensa experiencia en teatro y de donde se desprende precisamente esta misma actuación, habiéndola representado más de 400 veces. La adaptación histriónica del telón al cine demostraría su gran capacidad dramática. Una obra menor de Zinnemann, pero aún así muy destacable y solventada por su labor actoral
9 – Act of Violence (1948)
POR EL FETT
Exasperante y formidable thriller que de nuevo acude a aquel sentimiento de culpa y paranoia social tras la Segunda Guerra Mundial, y de donde Zinnemann exprime emociones apremiantes cuando un hombre de perfil bondadoso y humanista, acabe por ser encontrado por su pasado bélico en la forma de un ex compañero, el cual lo ha buscado incansablemente para matarlo. Mientras Robert Ryan consigue otro de sus grandes villanos, Van Heflin hace lo propio deconstruyendo de cierta manera a su arquetipo de hombre recto, lo cual se convierte en la parte angular del desarrollo y trasfondo tanto del film como sus personajes. El constante suspenso impreso por Zinnemann y su final catedrático y adverso la eleva a clásico.
8 – Julia (1977)
Por Edgar del Valle
Relato de la profunda amistad que surge entre dos jóvenes mujeres que se verán obligadas a separarse en plena adolescencia, y que se reencuentran en Europa en pleno apogeo del nazismo. Una película que retrata el sentido más profundo de la amistad de manera sutil y sensible, sin caer en el maniqueísmo. Esta película obtuvo críticas encontradas por parte de los expertos, pero a pesar de ello, recibió la nominación y tres premios Oscar (incluido guion adaptado), demostrando que el director consiguió realizar una gran labor con las actrices protagonistas: Jane Fonda y Vanessa Redgrave (con Oscar incluido). Este fue el penúltimo film y último gran éxito de Zinnemann, que durante los 70 y 80 se mantuvo casi en el anonimato
7 – A Hatful of Rain (1957)
Por El Fett
Con la gran Eva Marie Sant y su más importante papel protagónico, Zinnemann consigue una fastuosa y cruda química con sus actores en este incisivo retrato sobre la drogodependencia, creando junto a sus tres protagonistas uno de los primeros relatos hollywoodenses sobre “la heroína” y de cómo este va degradando física y humanamente una de por sí ya inestable pareja y familia. Un drama adelantado a su época (así como la naturalidad dramática de Saint), Zinnemann se atrevió a destruir el sueño americano y el arquetipo de “la familia perfecta” en una compacta y recia narración que brilla por sus diálogos e interpretaciones.
6 – The Nun’s Story (1959)
Por Edgar del Valle
Basada en hechos reales, sobre la vida de una monja de origen belga y de familia acomodada, que es enviada al Congo a trabajar como enfermera en una misión religiosa. Dirigida con gran maestría, cuenta con la participación de Audrey Hepburn y Peter Finch en los roles estelares en un drama de alto contenido social y que invita a reflexionar al público sobre su participación en el género humano. El decimoquinto film de Zinnemann cuenta posiblemente una de las mejores actuaciones de Hepburn, contando además con una estupenda fotografía. Recibió 8 nominaciones al Oscar, 5 a los Globos de Oro, y la Concha de oro de San Sebastián.
5 – The Day of the Jackal (1973)
Por El Fett
El mismo nivel de suspenso de High Noon trasladado a un thriller de asesinos y espionaje dio como resultado uno de los más apremiantes ejercicios del género, y en donde Zinnemann, fiel a su tradicional narrativa, hace que el espectador se interese en un resultado ya conocido debido a la creciente progresión de tensión y una estructura fenomenal de sus personajes que se desenvuelven en un complejo juego mental y que va más allá de la típica trama del gato y el ratón. Como dato curioso, se filmaría un remake en 1997 con Bruce Willis y Richard Gere, el cual es un ejercicio anticuado comparado a la maestría de Zinnemann, una cualidad mayor si tomamos en cuenta la diferencia de 25 años
4 – From Here to Eternity (1953)
Por El Fett
La ganadora de 8 Oscar es no solo una de las presentaciones que mayor éxito de taquilla, crítica y público de la historia, sino también un gran clásico romántico – coral – bélico en donde Zinnemann establecería muchos de los estatutos dramáticos con los que la crítica estadounidense mediría las consecuentes súper producciones de esta índole. Dos principales historias cruzadas se ven afectadas por conceptos como el honor, la pasión y el adulterio, pero también por el consecuente ataque a Pearl Harbor. La película está repleta de grandes actuaciones y momentos, pues basta recordar la escena en la playa junto con Kerr y Lancaster, un legendario momento que inmortalizó a este clásico, al cine dramático – bélico y que cimbró todo Hollywood.
3 – A Man for Al Seasons (1966)
Por El Fett
Segundo par de Oscar como mejor película y director para Zinnemann (más otros cuatro premios), el cual logra una de las dos piezas mejores narradas y recordadas sobre la vida pecaminosa y caprichosa de Enrique VIII, el tirano rey de la lujuria que cambiaba las leyes como de esposa. A diferencia de aquella otra soberbia cinta de 1933, que contenía un tono más cínico y cómico, aquí Zinnemann plantea un entorno dramático soberbio vertido en la decisión y dualidad del gran papel de Paul Scofield como Thomas Moro, el humanista que debía seleccionar su traición, ya sea a su rey o a sus más fieles ideales sociales, religiosos y conservadores. Otra gran cinta y quizá una de las más injustos olvidos colectivos alrededor de las ganadoras del Oscar
2 – The Search (1948)
Por Edgar del Valle
Primer gran éxito de Zinnemann, que representaría también el primer papel protagónico de Montgomery Clift. Un niño checo superviviente de Auschwitz, huye del campo en la Alemania de la postguerra, tratando de buscar a su madre. El chico es encontrado por un soldado americano que tratará de ayudar al niño a encontrarla. El trabajo actoral de Clift como el soldado de suaves ademanes y dulce mirada permite que la cinta trascienda de ser un simple melodrama bélico más, a un estudio de entrañable paternalismo. Además, el año de su filmación permite a Zinnemann explorar de manera orgánica los escenarios devastados por la guerra, construyendo una fábula esperanzadora y que incluso toma varios elementos del neorrealismo italiano, que agregan demasiada naturalidad.
1 – High Noon (1952)
Por El Fett
Estamos ante uno de los pocos ejercicios en la historia que desarrolla su relato en tiempo real, virtud que provee al realizador el uso de toda su pericia en el lenguaje para enfatizar durante 84 minutos la espera y consecuente llegada de un tren lleno dela angustia e incertidumbre de un sheriff abandonado por su pueblo, y que debe enfrentar en soledad a sus atacantes cuando todos le han dado la espalda ante la súbita y mortal noticia. Lo increíble del relato es que Zinnemann logra el efecto empático deseado, donde el espectador desea acompañar al asolado héroe en su destino; con esos planos a detalle que desnudan las emociones y rigen el tiempo (el reloj de la estación como elemento visual es fastuoso) la vivencial tensión crea uno de los mejores western