Las 10 Mejores Películas de Shelley Winters

Contrario a su vida real (donde se divorció cuatro veces y era conocida por su fogosa y devoradora actividad romántica), Shelley Winters alcanzaría el respeto y la fama gracias a su papel de dama trágica, aquella mujer “usada”, oprimida o plato de segunda mesa, en variadas producciones que independientemente de dicho arquetipo, pudieron explayar un gran talento y registro dramático muy natural e incluso hasta adelantado a su época.

Desempeñándose en el drama, western, romance, aventura y el thriller, Winters aparecería en más de 160 producciones entre el cine y la televisión, haciéndose de dos premios Oscar y trabajando bajo la batuta de varios de los mejores cineastas de su tiempo.

Recordemos a esta gran actriz de singular carisma y extremo talento, con sus mejores películas

 

WINCHESTER 73 (1950) (ANTHONY MANN)

Por EL FETT

Como su título lo indica, el protagonista no es ningún histrión, sino el afamado rifle y su leyenda como la mejor arma del salvaje oeste, que a partir de un concurso entre pistoleros emprenderá una odisea cambiando de manos y de objetivos durante 3 días y 2 noches, en lo que significa un excelso timing y ritmo narrativo de solo 90 minutos. Pistoleros, criminales, indios, soldados, estafadores y damiselas, el rifle es testigo de todos los elementos que conforman no solo el western, sino uno de los pasajes históricos más representativos de los Estados Unidos. Winters será la damisela de extravagantes curvas y cuestionable trabajo, la cual se topará con ese rifle en varios momentos y escaramuzas. Cabe resaltar lo sexy que luce.

 

ALFIE (1966) (LEWIS GILBERT)

Por EDGAR DEL VALLE

En esta película inglesa dirigida por Lewis Gilbert, Michael Caine protagoniza a un chofer de una empresa de coches que es famoso por ser un hombre irresistible y seductor, que cuenta con una larga de conquistas femeninas (entre ellas una carismática y sensual Winters). La primera película en la que Michael Caine era protagonista absoluto y el resultado es sobresaliente; aunque su lucimiento es total, no se debe dejar de lado la química con las bellas mujeres, de todas las formas, curvas, estaturas y personalidades, que desfilan para construir a este cuestionable seductor. Como dato curioso, en el 2004 Jude Law hizo un remake apenas rescatable (con un toque de más comedia y cinismo que no encaja de todo bien) pero nunca al nivel narrativo.

 

BLOODY MAMA (1970) (ROGER CORMAN)

Por EDGAR DEL VALLE

En esta película basada en hechos reales, Winters personifica a Ma Baker, una de las figuras más insólitas en la época de los gánsteres norteamericanos, como la mamá autoritaria de cuatro chicos que se dedicaron a la delincuencia y al crimen, siendo perseguidos por la justicia. Sin duda una de las mejores películas de Roger Corman, con una narrativa de calidad, alejada de su serie b y enfocada, así como los hijos de “Ma Baker”, para endiosar a la figura de una genial Shelley Winters, que encausa una interpretación repleta de demencia, maldad y perversión. Como dato curioso, un muy joven Robert de Niro aparece aquí, siendo una de sus primeras películas

 

HE RAN ALL THE WAY (1951) (JOHN BERRY)

Por EDGAR DEL VALLE

Con un guion de Dalton Trumbo y en compañía del gran actor John Garfield, Winters nos ofrece una actuación convincente en torno de una mujer que se siente despreciada por su falta de belleza y que enamorada de un delincuente de poca monta, se ve expuesta a la huida y rapto de este mismo hacía su persona y su familia. Siguiendo el arquetipo de esta mujer despechada, Winters prevalece en este síndrome de Estocolmo, que guionista y director relatan de una manera ágil y tensa en tan solo 75 minutos. Aunque el tono de thriller resalta, el contexto alrededor del delincuente la convierte también en un clásico del cine negro

 

THE POSEIDON ADVENTURE (1972) (RONALD NEAME)

Por EDGAR DEL VALLE

Cinta sobre un lujoso trasatlántico que navega de Estados Unidos a Europa, y que debido a una fuerte tormenta una enorme ola transforma el placentero viaje en una catástrofe que puede acabar con la vida de todos los pasajeros. Infravalorada aventura que en su tiempo irrumpió tal y como su gigante ola, en un ejemplo de cómo revivir el cine de catástrofes con buena producción, buen ritmo, una duración adecuada y por supuesto el dramatismo actoral necesario para darle credibilidad a la odisea de supervivencia que atraviesa una tripulación. Sobresale la actuación de Winters, como una de las pasajeras en peligro. Su actuación le valió una nominación al premio Oscar y ganar el Globo de oro.

 

THE NIGHT OF THE HUNTER (1955) (CHARLES LAUGHTON)

Por EL FETT

Un clásico de la cinematografía americana, The Night of the Hunter bien podría definirse como el cuento de horror para los niños por las noches; un cuento real, ajeno a criaturas fantásticas y encarnado solamente por la figura de un monstruo de carne y hueso: El predicador Harry Powell. Si bien las actuaciones adultas pueden parecer caricaturizadas, este elemento propositivo se debe al empalme del mundo y el horror adulto con la inocencia de un niño, los cuales aquí esconden el secreto en cierta muñeca de trapo, que será el objetivo final del cazador. Winters interpreta a la víctima principal, una madre soltera y despechada que será presa fácil del cazador, la cual la usará para llegar al botín. La escena final de su personaje es sencillamente perturbadora.

 

LOLITA (1962) (STANLEY KUBRICK)

Por EL FETT

Kubrick aprovecharía este relato de thriller y hasta agria comedia pederasta para explorar la frialdad y maldad de aquellos hombres sometidos por aquella peligrosa y ruin ninfa. Pero la víctima colateral de este tóxico y enfermizo romance sería Winters, la cual guardaría muchas similitudes con su personaje en “La Noche del Cazador”, al ser el puente y la herramienta por el cual el criminal (en este caso “sexual”) quiere llegar a su objetivo: la hija. El personaje de Winters es tan trágico como lastimoso, una madre de los suburbios que al verse imposibilitada y opcada por la propia belleza de su hija, deberá aguantar los “aceptados” desprecios de la sociedad y de su nuevo marido. Gran papel y de un triste final para su personaje, la escena del enfrentamiento es brutal.

 

A PATCH OF BLUE (1965) (GUY GREEN)

Por EDGAR DEL VALLE

Memorable actuación de Shelley Winters, como la madre vulgar, violenta y de vida ligera e irresponsable, de una joven ciega que se enamora de un hombre negro. Otro de esos arquetipos que Winters dominaba, pero al que también le agregaba matices y elementos según lo dictamine la narrativa, esta “Madre” odiosa vendría a ser una compleja e interesante contraparte a sus otras mamás ingenuas y trágicas en Lolita y La Noche del Cazador, encontrando aquí la emoción y energía necesarias para hacerse de un Oscar como mejor actriz de reparto, dentro de la que quizá sea una de los desempeños más recordados dentro de esa categoría. Una verdadera hija de puta

 

THE DIARY ONF ANNE FRANK (1959) (GEORGE STEVENS)

Por EDGAR DEL VALLE

En esta cinta basada como su título lo indica, en el diario de Ana Frank, narra las vicisitudes de una familia judía que con el objeto de escapar de la persecución nazi se esconde en buhardilla, lo que es plasmado en dicho diario. Por su papel de la señora Van Daan, quien oculta a los perseguidos, la actriz ganó por primera ocasión un premio Oscar como mejor actriz de reparto. Cabe destacar que como una de sus mejores actuaciones, Winters no solo escapa del encasillamiento que venía arrastrando desde principios de los 50, sino que también logra captar con gran sensibilidad las emociones y las grandes tensiones vividas en este trágico periodo contra la humanidad

 

A PLACE IN THE SUN (1951) (GEORGE STEVENS)

Por EDGAR DEL VALLE

En uno de los mejores remakes del cine (la original data de 1931 a cargo de Josef von Stenberg) y contando en elenco con el protagonismo de Montgomery Clift, Elizabeth Taylor y Shelley Winters, la actuación de esta última es sobresaliente, en el papel de una chica que en el triangulo amoroso de la cinta, desempeñará el de la prometida desdichada, cuando el personaje de Clift tenga interés por una sensual aristócrata (Taylor). Sin duda alguna una de las mejores actuaciones de la actriz, lo que le valió una nominación al premio Oscar con mejor actriz de reparto, y el comienzo de su estrellato con personajes dramáticos mucho más complejos.

 

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Edgar Del Valle    


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