Las 10 Mejores Series Animadas de Cartoon Network
Un 1 de octubre de 1992, Warner Bros decidió lanzar uno de los primeros canales dedicados exclusivamente a series animadas, Cartoon Network, y con ello comenzó un renacer de la animación norteamericana que había sufrido estragos en los años 80’s, alcanzando un nivel de producción y calidad en la televisión impresionante. Con los años, la cadena tuvo altibajos, sin embargo a diferencia de su competencia (Nickelodeon y Disney), pocas veces abandonó sus valores transgresores y originales, conservando su esencia lo que le permitió mantener cierto standard de calidad incluso en la última época.
En los últimos días, con la nueva fusión de Warner y Discovery, han surgido rumores de que Cartoon Network será absorbida por WB Studio, y que próximamente vera su desaparición. Esperando a que no ocurra esto (ya que sería una de los mayores golpes y estúpidas decisiones de la industria de la animación), repasemos las 10 mejores series de la cadena que confirmaron el eslogan que lleva por título: “Reimagina tu mundo “
Bonus – Dexter Laboratory (Genndy Tartakovsky, 1996)
Serie animada que explotó la premisa de un niño genio para tener capítulos con situaciones bizarras, random, y también para explorar subgéneros de la ciencia ficción, e incluso hizo homenaje a varios estilos de animación (incluyendo algunos referentes al anime. A pesar de lo creativa que fue, su mayor problema es que los personajes no tenían tantas capas, por lo que podía volverse repetitiva. Mención especial al antagonista de la serie “Cerebro” (quien tiene los mejores episodios) y para los segmento de Monkey y Los amigos justicieros que rompen un poco lo rutinario de los capítulos.
Bonus – Samurai Jack (Genndy Tartakovsky, 2001)
Serie temática y de estilo más adulto, que toma referencias y arquetipos del subgénero jidaigeki, mezclándola con ciencia ficción. Aunque respeta mucho aspectos básicos de la figura del samurái, tiene un estilo de animación preciosista y detallado, una historia al estilo western sumamente interesante y atrapante; la trama presenta demasiados plotholes (propios de tratar con historias de viajes en el tiempo) y la temporada final termina por ser narrativamente decepcionante, tirando por la borda el desarrollo “camino del guerrero”, elemento básico de la historias de este subgenero y utilizando la clásica conveniencia del “poder del amor” para solucionar todo.
10 – The Grim Adventures of Billy and Mandy (Maxwell Attoms, 2003)
Serie cuya premisa principal son las aventuras de dos niños que se hacen amigos de la muerte. Lo que la hizo especial, fue la mezcla entre los conceptos del terror y ocultismo con la mala leche y humor negro que plasmaban sus personajes, aparte de trasladarlo a una animación PG, que denotaba mucho el ingenio de los creadores. El balance de personalidades funcionaba perfectamente, pues utilizaba la fórmula clásica del idiota (Billy), la oscura (Mandy) y el centrado atormentado (Puro Hueso). Imposible no pensar que la serie bebe mucho de las Casas del Horror de los Simpson. Curiosamente el bajón de calidad vino cuando dejaron de enfocarse en el terror para burlarse de sus patrones (Cartoon Network) y de hacer referencias de la cultura pop. Divertido giro, pero le costó un poco el alma a la animación.
9 – Johnny Bravo (Van Partible, 1995)
Con un estilo algo retro, a pesar de tener una premisa sencilla acerca de un hombre narcisista, mamado y descerebrado intentado conquistar chicas sin éxito, sus creadores aprovecharon esta simpleza para crear una sátira (adelantada a su tiempo) que cuestionaba las relaciones de género modernas y el machismo (con Johnny golpeado el 90% de los casos), pero no solo se limitó a eso, sino que metió a su personaje en situaciones bizarras (ya sea con un científico loco, en una selva, o hasta con Scooby Doo) sumamente cómicas y que lanzaban referencias al por mayor de la cultura pop y del cine haciendo a la serie dinámica. En balance, Johnny fue una animación que hizo más de lo que a simple vista podría ser ¡Bravo!
8 – Regular Show (J.G Quintel, 2010)
El título lo dice todo, las historias de Mordecai y Rigby sirven de excusa para burlarse de todos las historias clichés de la mayoría de las caricaturas americanas, utilizando personajes, humor absurdo y hasta estúpido concluyendo la mayoría de los actos en situaciones hilarantes que provocan una carcajada. Es como de esos chistes con narrativa correctamente estructurado que luego cuentan los comediantes en sus rutinas; al final el alma de la serie es no tener pretensiones, ser sencilla y burlarse de cualquier estereotipo de la cultura pop. El problema de la serie radica que quizás los personajes no tengan tanto desarrollo, por lo que curiosamente su mayor cualidad del programa termina siendo también su limitante.
7 – Foster’s Home for Imaginary Friends (Craig McCraken, 2004)
Caricatura infravalorada con una premisa creativa sobre una mansión que cuida de amigos Imaginarios en un mundo donde son reales y ocupan un rol parecido al de una “mascota”. Lo mejor son los claroscuros de los personajes, quienes en algunos episodios pueden ser antagónicos, irritantes y en otros llegan a ser tiernos y conmovedores (especialmente Bloo), lo cual hace que su carisma sea natural. Tiene un estilo de animación bizarro y pintoresco que da la sensación onírica peculiar. Mención especial a su humor variado que va desde sus diálogos hasta el pastelazo, y sus referencias a la cultura pop. A diferencia de otras series de Cartoon Network, supo terminar a tiempo y se mantuvo constante en calidad.
6 – Space Ghost Coast to Coast (Mike Lazzo, 1994)
Uno de los primeros (y quizás únicos) talk shows animados, conducido por la famosa caricatura de los 60’s “El Fantasma del Espacio”. Tiene gran importancia para el canal, pues fue el que dio hincapié a sus producciones originales (gracias a él existe el bloque “Adult Swim”, que significo un hito cultural). Su fórmula no solo se basó en el nivel de sus invitados (que iban desde Pele, hasta Matt Groening), sino el ingenio de los escritores para que las entrevistas se sintieran naturales (considerando que el presentador era un dibujo), que los segmentos cuajaran entre si, pero sobretodo para que su humor adulto se sintiera franco pero a la vez sutil. No hay duda que por todo esto, este programa marco época (y el que no esté de acuerdo puede pedirle a Motar que baje la palanca).
5 – Ed, Edd and Eddy (Danny Antonucci, 1999)
Serie acerca de tres pubertos que buscan estafar a sus vecinos para comprar drogas…digo, caramelos. Es una caricatura que deconstruye al género “slice of Life”, pues le quita todo los tonos pasteles o coloridos típicos del género, como las moralejas condescendientes, el aprendizaje de los personajes (son unos idiotas y ojetes nunca aprenden ni un carajo), con una comedia en su mayoría física o “slapstick”, y con una animación donde los contornos de los personajes son borrosas y que dista de ser “bonita” o visualmente atractiva, por lo que al final se sintió como una bocanada de “aire fresco” estar ante un producto de este estilo, menos aleccionador y más repulsivo, alocado, y moralmente decadente. El final de la serie con la película es uno de los mejores que ha tenido un producto de esta cadena.
4 – Courage The Cowardly Dog (John R.Dilworth,1996)
Una serie que tenía una dualidad increíble; por un lado maneja bien su suspenso y terror con historias indirectamente perturbadoras, con la creación de una atmósfera inquietante y una mezcla de diferentes texturas en animación (dónde destaca el hiperrealismo). Los monstruos en su mayoría lucen realmente amenazantes, la dinámica de la pasividad de Justo y Muriel con el nerviosismo de Coraje son un elemento que genera más nervio en cada historia. Por otro lado, la caricatura también puede ser sumamente conmovedora, desde los momentos de Muriel y Coraje, hasta el trasfondo de algunos monstruos o visitantes inquietantes e incluso la relación de Coraje con su computadora (humanizar a una máquina no es sencillo). Mención aparte el corto del Pollo Extraterrestre (considerado el episodio piloto de la serie), que fue nominado al Oscar, SITGES y Oso de Oro, lo cual fue una muestra de lo que sería la calidad de la serie. Las cosas que uno hace por amor.
3 – Adventure Time (Pendleton Ward, 2010)
La historia del camino del guerrero de Finn, es quizás la animación más completa de Cartoon Network. No solamente brilló por la creación de un mundo épico y creativo, sino también por sus personajes bidimensionales y de múltiples capas que representaban desde los valores morales más destacables hasta lo más decadente, por tratar temas atípicos en un caricatura pasando por tópicos filosóficos, ecológicos, políticos, sanidad mental hasta existencialistas, por crear arcos e historias atrapantes alrededor de este universo, y que en un 70% eran coherentes en su narrativa, por manejar diferentes estilos de animación y por nunca limitarse en lo bizarro o alucinante. Podría haber sido la mejor caricatura incluso de la historia, pero simplemente se alargó demasiado, y el concepto se notó decadente en la últimas temporadas (incluso se expandió tanto que dejó arcos inconclusos). Aun así, la escuela que dejó (incluso varios creadores de posteriores caricaturas exitosas cómo Clarence o Steve Universe salieron de aquí) la hacen tener un lugar especial en la historia de CN. Posdata, El Rey Helado es el mejor personaje. Vamos a tierras muy lejanas.
2 – Powerpuff Girls (Craig McCraken, 1998)
Azúcar, flores y muchos colores, fueron los ingredientes para crear la historia de 3 superheroinas que combaten el crimen bebiendo mucho del género tokusatsu. Aunque los personajes eran sencillos y la serie manejaba mucho el “Esquema del Enemigo de la Semana”, lo que la destacó fue la manera en como manejó varios temas, desde la igualdad de género, el sentido de la responsabilidad o el lado oscuro de la recompensa, no temía en mostrar a sus personajes en facetas más aversivas, e incluso de vez en cuando rompía sus esquemas poniendo en situaciones donde los villanos eran los protagónicos y los héroes antagónicos. He de considerar que la relación villano principal -héroe está bien construida, pero quizás lo más destacable era la yuxtaposición de la violencia (excesiva que había en la caricatura) con la inocencia y ternura de sus protagonistas (representado en una paleta de colores que llegaba a tener tonos pastel y luego más agresivos). Otro detalle, las referencias culturales que manejaba de forma excelsa (incluyendo un episodio homenaje a los Beatles). Por todo eso, PowerPuff Girls fue el producto más transgresor de su época en todos los sentidos, haciendo que todo estuviera bajo control en la animación en los Años 2000’s
1 – Over The Garden Wall (Patrick McHale y Katie Krentz, 2014)
Miniserie que narra la historia de dos hermanos completamente opuestos en personalidad, buscando el camino a casa después de haberse perdido en un bosque. A diferencia de otros productos de Cartoon Network, Over The Garden Wall prefiere contar su historia desde el terreno de lo onírico y surrealista, convirtiéndola en un rompecabezas el cual espectador con el transcurrir de los episodios resolverá, y sin embargo a pesar de su peculiar forma de contar la historia, la caricatura tienen una lógica narrativa sustentada en sus figuras o simbolismos. Para complementar la escritura, los personajes están tan bien definidos que llegan al punto de tener lecturas psicológicas interesantes, especialmente aquellas que van en referencia con la búsqueda de la identidad y de la aceptación de un grupo. El estilo de animación es bastante particular, caminando entre el barroco europeo y la modernidad del “cartoon americano”. La mezcla de los elementos surreales con una historia con diferentes lecturas, hacen que Over The Garden Wall pueda ser la más linda pesadilla jamás emitida en Cartoon Network, lo cual le concede el título indiscutible de la mejor serie del canal.
1 Comment
Yo habría agredado la animada de Clone Wars, la cual fue producción de LucasFlims y CN.