Las 20 Mejores Películas de Philip Seymour Hoffman
Hoy cumpliría 57 años uno de los mejores actores de las últimas 3 décadas, acaecido trágica y accidentalmente en 2014 tras sufrir una debacle y posterior sobredosis en su adicción a las drogas.
Nacido en Nueva York en 1967, Philip Seymour Hoffman comenzaría su prolífica carrera en 1989 en la pantalla chica, dando el salto al cine en 1992, año de ensueño para el joven histrión al aparecer en 4 producciones, una de ellas “Perfume de Mujer”, misma que le daría los reflectores necesarios para así comenzar la leyenda de uno de los mejores “secundarios” durante 30 años de historia fílmica. Hoffman pasaría rápidamente a formar parte de las opciones óptimas de reparto para directores como los Coen, Minghella y sobre todo del célebre Paul Thomas Anderson, al que acompañaría como su actor fetiche en casi todas las cintas del director (hasta el momento de su súbita muerte).
No habría personaje o género que se le negara, pues Hoffman era versado tanto en la comedia como en el drama, thriller y hasta como actor de voz; un día podía entregar una poderosísima y catártica actuación dramática, para el otro sorprenderemos a todos de villano de acción o como compinche en una burda comedia; pero quizá el papel que mejor se le prestaba era aquel personaje misterioso, de doble vida, quizá con algunas perversiones, sexualidad no afrontada o de métodos e ideologías cuestionables, una actitud que al parecer trágicamente también llevó a su vida diaria, con una personalidad que se dividía en aquel ser afable, talentoso y humanitario, y aquel ente adicto y depresivo que vería su impactante fin muy, muy pronto.
Los papeles protagónicos se le negarían durante un largo período de tiempo, pero la persverancia confirmaría que de reparto o principal, Hoffman estaba destinado a convertirse en uno de los actores más importantes de la última era, ganando un poco más de 90 premios, entre ellos el Oscar, el Globo de Oro, el BAFTA y la Copa Volpi del Festival de Venecia.
Recordemos al poderoso actor con sus 20 mejores películas y/o actuaciones.
20 – The Big Lebowski (Coen, 1998)
POR EL FETT
El clímax de la desfachatez y proyección actoral de los Coen desembocó en un instantáneo culto. ¿La mejor comedia fílmica en la historia? Para su servidor lo es, y en mucha parte gracias a la naturalidad de sus diálogos y situaciones que te hacen creer que este tipo de personas existen en la realidad ¿lo hacen? Quizá ese cuestionamiento es la respuesta a este tipo de humor accidental donde nada es lo que parece, más que la estupidez humana forjando una realidad alterna que de manera surreal encuentran el equilibrio en este “Dude”. En un papel pequeño, pero inolvidable, Philip Seymour Hoffman interpreta al querido Brandt, mayordomo del Gran Lewbowski, y que intentará aprovecharse junto a su patrón del otro Lebowski
19 – Cold Mountain (Anthony Minghella, 2003)
En lo personal, esta fábula de la Guerra Civil en su combinación con la Odisea de Homero, me parece una cinta que falla dentro de la impresión de ritmo dentro de su arco principal (el retorno del soldado), sin embargo, son sus poderosas interpretaciones repletas de ese aura de cine clásico, con textos teatrales y literarios muy propios de Minghella, lo que dota a esta gran producción de mucho impacto emocional, manteniendo el interés necesario del espectador para quedar hipnotizado por este culebrón bélico. Dentro del viaje “homérico” hay que resaltar la grotesca aparición de Philip Seymour Hoffman, forjando un aquelarre erótico con la bendición de “Dios”.
18 – Red Dragon (Brett Ratner, 2002)
POR EL FETT
Un buen thriller – precuela (de la joya de “The Silence of the Lambs”) que ha ganado respeto conforme el pasar de los años y que incluso supera en todo rubro a la sobrevalorada “Hannibal” de Ridley Scott. Ratner toma los elementos de “aquel silencio” y sigue al pie de la letra el manual en cuanto a la construcción de personajes, usando de nuevo al asesino en cuestión como foco de la tensión y misterio en su doble vida y personalidad. Mientras en una parte transcurre la investigación, en la otra se desenvuelve el andar social del “dragón” y de donde se desprende un planteamiento incluso mejor elaborado y original de parte del director y guionista. Philip Seymour Hoffman tendrá a su cargo una de las mejores secuencias del filme, siendo víctima de aquel siniestro dragón.
17 – 25th Hour (Spike Lee, 2002)
POR JOSE ROBERTO ORTEGA
Monty ha sido condenado a 7 años de cárcel y cuenta con 24 horas antes de ingresar a prisión. En esas horas intentará una reconciliación con las personas cercanas a él: su padre, sus dos mejores amigos y su novia (de quien sospecha lo haya delatado). Recargado en una fotografía envolvente y en una edición propositiva que obliga al espectador a ver distintos ángulos de lo que sucede, Lee escribe una carta de amor y odio a la ciudad de NY, tomando como base el derrumbe de su estructura y su modo de vida, poniendo a prueba sus fortalezas, su resiliencia, exponiendo sus heridas y deseando su reconstrucción, reflejando en el destino de Monty el porvenir de una ciudad que recién había sufrido el 9/11.
16 – Punch-Drunk Love (Paul Thomas Anderson, 2002)
Anderson construye un relato románico de peculiar naturaleza. Una fábula sobre obsesión, amor y compulsión, que a ratos parece un poco artificial dentro de sus fortuitas situaciones, pero que fiel a un estilo que estudia íntimamente a sus personajes, la profundidad emana directamente de la psique de un genial Adam Sandler que mucho antes de “Uncut Gems” interpretaría a ese personaje atrapado en una vorágine de eventos bajo tensos sintetizadores y un sube y baja de emociones. Siendo ya casi un requisito dentro de la filmografía de Anderson, Philip Seymour Hoffman recrea un antagónico tan accidental como extraño, parte del encanto de este gran e infravalorado filme
15 – Moneyball (Bennett Miller, 2011)
POR EL FETT
Compra inteligente, marketing deportivo, lectura de estadísticas y relaciones públicas, principales tópicos de uno de los mejores dramas deportivos que brilla gracias a la estructura de sus personajes, que son el pilar en el que descansa el juego, al proveerlos de un trasfondo emocional profundo y que empata no solo con la vena “capitalista” y deportiva de la cinta, sino con su conmovedor y realista clímax. Por otro lado, el concepto financiero y de mercados sobre el retorno de inversión, toma un papel activo en la narrativa cuando un equipo de menor poderío presupuestal, tras la venta de sus principales jugadores, ahora debe comprar estadísticas en lugar de deportistas para poder conservar su competitividad en la liga americana de béisbol.
14 – The Ides of March (Clooney, 2011)
POR EL FETT
Como director, guionista y actor, Clooney consigue denotar su madurez narrativa con un thriller político que se aleja del maniqueísmo para asimilarse a la vieja usanza de un Hollywood más clásico y crítico en cuanto a su faceta más “investigativa” y confrontativa se refiere. Si bien cae en ciertos excesos ceremoniales en cuanto a diálogo y exploración del sistema político (puede llegar a ser tan pretenciosamente realista que se aleja de la empatía humana), es evidente que Clooney centra los atributos de su film en el registro actoral gracias al ensamble de un reparto que efectivamente parecen más políticos que artistas dramáticos. Philip Seymour Hoffman es sin duda el más solvente en este ejercicio de marketing político
13 – The Talented Mr. Ripley (Anthony Minghella, 1999)
Por El Fett
Quizá la historia de manera injusta no haya reparado o analizado correctamente a esta cinta (nueva adaptación de la novela de Patricia Highsmith y remake de “A Pleno Sol”) , y es que tras varias revisiones no cabe duda que estamos hablando de una de las mejores adaptaciones noventeras, pero también de uno de los villanos más tétricos y astutos de dicha década. La construcción y desarrollo de Minguella y Damon hacen que Tom Ripley se convierta en una amenaza constante, un ser indescifrable, impulsivo y terroríficamente inteligente que provee de un suspenso constante al relato. La supuesta ingenuidad convertida en una sed de poder y reconocimiento marcan el nacimiento de este monstruo, el cual se cargará varias víctimas, entre ellas a un Philip Seymour Hoffman odioso que imprime a sus escenas un suspenso formidable.
12 – Mission: Impossible III (Abrams, 2006)
Por El Fett
Quizá en su etapa de villano hubiera sido más lógico en términos de calidad fílmica destacar su participación en Punch Drunk Love, pero dado que su carrera a lado de PTA será muy repasada en este ranking, me pareció prudente hacerle un espacio al que quizá sea el mejor villano de esta atropellada saga (¿o ya será Henry Cavill?), uno que de manera siniestra pone a parir chayotes tanto a “Hunt” como a Tom Cruise en el apartado de credibilidad dramática, incluso haciendo que este último tenga que incrementar su nivel dentro de lo que supone ser solo un relato de pura acción. Aún así, Philip Seymour Hoffman no se toma ningún personaje a la ligera, surtiendo una verdadera y sombría amenaza y de paso, siendo por mucho lo más destacable del film.
11 – Charlie Wilson’s War (Mike Nichols, 2007)
POR EL FETT
No es la película ni el mensaje más correcto, sin embargo, bajo la mirada de Nichols y el guion de Aaron Sorkin se entreteje un drama coral sobre la responsiva política de armamento de los Estados Unidos y su injerencia en medio oriente. Lo mejor de la cinta sin duda son la triada protagonista, pues tanto Julia Roberts como Tom Hanks (y Philip Seymour Hoffman en un papel de reparto asombroso, sacando la mejor parte y logrando nominación al Oscar) destilan química e interpretaciones muy naturales y enérgicas, No causó la polémica que se esperaba fuera de los Estados Unidos, quedando solo como un decente vehículo narrativo para todos los inmiscuidos
10 – Scent of a Woman (Brest, 1992)
Por Clementine
Esta película fue la responsable de #UnOscarParaAl ya que finalmente Pacino se hacía con la estatuilla por su interpretación de un coronel invidente, retirado y que sirve de guía en Nueva York para Charlie Simms (Chris O’Donell), al que quiere mostrar como funciona el mundo. Un joven Hoffman, interpreta aquí a George Willis Jr un privilegiado y antipático amigo de Charlie, que sin embargo se aprovecha de su ingenuidad y vulnerabilidad ya que no cuenta con los mismos privilegios que él y justo esto hace que su personaje sea odioso sin restarle esa profundidad emotiva característica de Philip Seymour Hoffman; y esto es quizá lo que más resalte de nuestro actor, aún a los pequeños papeles de personajes que parecían poco atractivos, él los volvía memorables.
9 – Boogie Nights (Anderson, 1997)
Por Clementine
En un relato largo y con una compleja narrativa que no decae en ningún momento, PTA nos muestra la historia del asenso y caída de un actor porno con todo lo que hay alrededor de él en ese ambiente y narrada con toda la habilidad y sutileza que caracterizan a Paul. Cuenta con un reparto variado, y aquí nuestro actor incluso con el pequeño papel de Scotty nos demostraría ya el dominio total de las escenas en las que aparecía. La escena destacada es aquella en la que intenta besar al protagonista, ya que pasa por un cúmulo de emociones primero quiere mostrarse divertido con Dirk (Mark Wahlberg), luego es perturbador, se muestra enfadado, y al final es desgarrador; toda una variedad y en tan poco tiempo, pero que Philip Seymour Hoffman ejecuta excelentemente.
8 – The Savages (Tamara Jenkins, 2007)
POR EL FETT
Un deleite ver compenetrados a dos de los mejores actores de su generación, y es que a través de la química entre el finado Philip Seymour Hoffman y Laura Linney, se edifica una de las más nobles y entrañables tragicomedias alrededor del duelo, los “daddy isues” y la redención familiar. Dos hermanos que deben reunirse para cuidar a su enfermo padre, con el cual no se hablan durante años, una situación más recurrente de lo que parece y de donde se desprende una armoniosa sensibilidad por parte de ambos histriones. Mientras la infravalorada Laura Linney recibía su nominación al Oscar, Philip Seymour Hoffman seguiría probando que tan solo su presencia servía para ensalzar direcciones y otras actuaciones.
7 – Almost Famous (Crowe, 2000)
Por IvanO
La película más personal y autobiográfica de Cameron Crowe nos presenta a William Miller (Patrick Fugit), un adolescente que hace todo lo posible para adentrarse en el mundo del rock en 1973, laborando como periodista para revistas de rock. Y desde los primerod minutos de metraje es que entra en escena el personaje de Philip Seymour Hoffman interpretando a Lester Bangs, que en la vida real y en la película se convierte en la guía y en quien le enseñó a Crowe cómo se comportaba todo el mundillo del rock tras bambalinas; Philip Seymour Hoffman se vale de la misma personalidad de Lester Bangs para dotar al personaje con un humor y carisma único sin caer en la parodia.
6 – Magnolia (Anderson, 1999)
Por El Fett
En el ensamble actoral perfecto de PTA, Seymour Hoffman ya se encontraba establecido como el gran fetiche del director (tres participaciones al hilo), y aunque por desgracia no cuenta con la tridimensionalidad de otros de los personajes (como por ejemplo, los otros 3 principales con los que le toca interactuar), su rol se convierte en un eslabón testigo dentro de 2 de los más complejos ejes de conflicto, denotando su capacidad actoral en la catarsis clímax de los mismos junto a Julianne Moore y consecuentemente detrás del de Tom Cruise. Así como el espectador no puede evitar que la lágrima recorra la mejilla en aquella secuencia, Philip Seymour Hoffman es también alcanzado por la emotividad de aquel momento en uno de sus roles más bondadosos de su carrera
5 – Happiness (Solondz, 1998)
Por El Fett
Apenas un año antes de Magnolia, Philip Seymour Hoffman sería parte de otro maravilloso casting de historias cruzadas, pero en esta ocasión dentro del resquebrajamiento del ideal americano en lo que es una de las mejores comedias negras de los años 90, precursora un poco más extravagante, punzante y arriesgada que por ejemplo American Beauty del 99. Dentro de esta telaraña familiar de secretos y perversiones, Hoffman sin duda es uno de los personajes que más destaca gracias a la dualidad sombría de su interpretación, quizá siendo también el símbolo y un protagonista “falso” de la propia y propositiva contrariedad ácida del film. Puede sonar extraño, pero tal vez su propia personalidad puede haber ayudado a compenetrarse de tal forma con este personaje
4 – Before the Devil Knows You’re Dead (Lumet, 2007)
Por IvanO
A sus 83 años, Sidney Lumet dirigía lo que era su última gran película, toda una puesta en escena donde daba una gran lección de cómo hacer cine; una tragedia familiar donde dos hermanos (Philip Seymour Hoffman y Ethan Hawke) unidos por la falta de dinero, arman un plan sencillo para robar la joyería que manejan sus padres; este robo a la joyería es el punto donde cohesionan todos los personajes mientras con flashbacks, Lumet nos cuenta las diferentes perspectivas de la familia frente al robo del negocio familiar. Hoffman hace una interpretación bestial de un ejecutivo fracasado, ahogado en deudas y adicto a la heroína, que a pesar de que es el villano, tú como espectador quieres que le salgan bien sus planes.
3 – Doubt (Patrick Shanley, 2008)
Por El Fett
El foco de “La Duda”, la selección de este tipo de personajes, propositivamente sin un trasfondo sólido y vinculados con el leitmotiv del film, hicieron que el talento de Philip Seymour Hoffman trascendiera incluso más allá que las propias cintas, y tanto esta como el primer lugar pueden ser los casos más relevantes de dicho método y/o atribución de sus interpretaciones. La química con Meryl Streep es sencillamente fastuosa girando alrededor de la estruendosa “duda” (el mismo Hoffmany el comportamiento de su sacerdote), la cual quedará como un misterio abierto para variadas interpretaciones, en mucha parte gracias al extraordinario abordaje del histrión que para esas fechas ya estaba totalmente consumado.
2 – The Master (Anderson, 2012)
Por El Fett
Acreedor de la Copa Volpi por su papel de Lancaster Dodd, Philip Seymour Hoffman hace una monstruosa y libre interpretación del líder espiritual e ideológico de la cienciología, en lo que a lo largo del sensorial desarrollo visual y auditivo de PTA, se convertirá también en uno de los mejores duelos actorales de la pasada década junto a Joaquin Phoenix (y por supuesto sin olvidar también a una avasallante Amy Adams). En espera del crecimiento del personaje de Phoenix, la primera parte del relato es completamente en torno a su “guía” como un emocional y ensayista “Maestro”, construyendo nuevamente un personaje que denota un halo de misterio y que parte de un marco más bien ideológico, por lo que es notable su abordaje metodista del mismo a lo largo de todo el film
1 – Capote (Miller, 2005)
Por El Fett
El protagónico que consolidó su leyenda y le otorgó más de 70 premios alrededor del orbe, Philip Seymour Hoffman hace una impresionante recreación de Truman Capote, no solo en posesión, sino también en el nutrimiento del carismático pero también complejo personaje a partir de variados momentos que denotan un perfecto equilibrio dramático – cómico. Es esencial redondear lo que he venido mencionando dentro de mis participaciones en este top, y es que es de aplaudirse que Hoffman sea el responsable de dar y nutrir de trasfondo a su personaje frente a una situación en concreto, dejando que el “biopic” prescinda de un prólogo para centrarse libremente en dicho conflicto. Una masterclass interpretativa.