Las 5 Mejores Películas de Anna Kendrick
Nacida el 9 de agosto de 1985 en Portland, Anna Kendrick ha ido balanceando su carrera entre el teatro (donde debutaría relativamente rápido), la música (donde ya probó su talento al participar en varias producciones y hasta sacó un disco en 2013) y el cine. En este último ha destacado principalmente en la comedia, pero como consecuencia, también se ha visto encasillada en muchos roles que no parecen explotar su potencial (haber participado en la abominable saga Twilight pudo tener algo que ver). ¿Será que realmente es otra cantante que quiere ser actriz o es una actriz con buenos dotes para el canto, pero desperdiciada por la industria?
A la espera de ese papel que la consolide, celebremos su cumpleaños repasando sus mejores 5 películas.
Bonus – A Simple Favor (Paul Feig, 2018)
Por Kim Tobias
Es imposible no comparar esta película con Gone Girl, no en narrativa, pero sí en la creación de un personaje que nos deja ver desde sus primeros momentos en pantalla su verdadera naturaleza. Se deja llevar totalmente por un juego satírico en el que las situaciones absurdas y ácidas son el mayor protagonista, creando una especie de thriller cómico que nunca deja de lado el humor negro para complacer a la audiencia. Aunque predecible entre sus tantos giros de tuerca, también es fácil notar la química entre Blake Lively y Anna Kendrick, quienes crean personajes bastante amenos y carismáticos que consiguen generar ese halo de misterio que la historia promete.
5 – Pitch Perfect (Jason Moore, 2012)
Por Jose Roberto Ortega
Beca, la introvertida chica nueva en la Universidad, se ve forzada por su padre a integrarse con sus compañeros, esto la lleva a unirse a las Bellas, un grupo de chicas que cantan a cappella y a quienes buscará revolucionar. La película tiene mucha frescura, aun utilizando una fórmula gastada y lo logra apoyado en un adecuado montaje, una gran selección musical, un humor básico y, sobre todo, en el carisma de Anna Kendrick. Con un mensaje de superación, fomentando el seguir nuestras pasiones y tomar riesgos, ha llegado a tener un cierto culto e incluso a ser expandida con un par de secuelas que, ni de cerca, logran el equilibrio de esta primera entrega.
4 – Scott Pilgrim vs The World (Edgar Wright, 2010)
POR EL CINE ACTUARIO
El no tomarse tan en serio le permite tener un ritmo vertiginoso, con un estilo visual y una narrativa que, con varios gags y elementos del mundo gamer, quizás sea el representativo (visual) más cercano en el séptimo arte del “videojuego”. La mofa de los traumas generado por relaciones de pareja antiguas y la falta de sanidad mental y madurez para resolverlos, genera una carga y lucha en las contrapartes en las relaciones futuras (esto a través de la lucha de los ex), lo cual da un sentido de burla a los arquetipos impuestos por los “chick flick”. Anna Kendrick aparece como Stacy, la hermana de Scott, con algunos chistes esporádicos.
3 – The Voices (Marjane Satrapi, 2015)
Por El Fett
La única actuación de Ryan Reynolds decente es gracias a un gato, su voz interior, su instinto asesino, su naturaleza psicópata. Hilarante y oscura, esta infravalorada pieza de un humor punzante y ácido ve en el minino los mejores momentos de su guion, con diálogos que ejecutan a a perfección la posible personalidad y poder que ejercen estos míticos seres sobre sus esclavos, la raza humana, aquí representada por un demente corta cabezas que si bien no responde a los deseos de su “animal”, sí se refleja en este para comunicar su desprecio por la vida y por las banalidades que habitan en la misma. Anna Kendrick es una de sus víctimas y también participa en el memorable tema final.
2 – 50/50 (Jonathan Levine, 2011)
Por Kim Tobias
Una de las propuestas más interesantes y mejor realizadas de los últimos años sobre la temática del cáncer. Lo atractivo de esta cinta reside en el tono cómico que maneja sin dejar de ser un drama que trata con seriedad los percances que conlleva una enfermedad de la magnitud del cáncer; como su nombre lo indica, hace un perfecto equilibrio 50/50 entre ambas escalas que la hace bastante digerible. Además, cuenta con la dosis acertada de sentimentalismo (ni más ni menos) que no empalaga ni busca la lagrimita fácil, pero que da esperanzas a luchar a pesar de una situación tan poco motivadora y a una edad poco común. Anna Kendrick funge como la psicóloga a cargo del caso.
1 – Up in the Air (Jason Reitman, 2009)
POR URIEL SALVADOR
Tal parece que en el afán de hacer parecer a su obra más importante de lo que es, Jason Reitman convierte una comedia romántica en una campaña publicitaria con ciertos simbolismos alrededor de la filosofía de vida de su protagonista. La diferencia de personalidades y de formas de ver el mundo es lo que hace resaltar por encima del promedio, mostrado en la excelente química entre George Clooney y Vera Farmiga, más la sorpresiva actuación de Anna Kendrick. Algo sermonera y con un final anticlimático, pero cuando se desprende de su tono propagandístico, este entretenido, pero olvidable cuento corporativo logra cierto balance.