Las 5 Mejores Películas de Armin Mueller-Stahl
Armin Mueller-Stahl, gigante actor alemán de proyección internacional con más de 140 créditos en el cine y la televisión, con un Oso de Berlín y retirado desde el 2015. Su vida siempre estuvo rodeada por el arte, y es que antes de dedicarse a la actuación en las carpas teatrales de la post guerra, era un prometedor violinista, actividad que cambió quizá para bien, pues sin duda se ha convertido en una de los rostros actorales alemanes más famosos y prolíficos de la historia, siendo parte de la nueva ola fílmica de su país gestada a principios de los 80’s
Pintor, director y escritor, a sus 95 años Armin Mueller-Stahl siempre se ha mantenido unido al arte. Lo celebramos con sus Mejores Películas
Bonus – The Game (Fincher, 1997)
POR EL FETT

El verdadero valor de David Fincher es construir y mantener en desarrollo al “Juego” incluso más que a su personaje protagónico, decisión y truco que le permite de manera muy astuta manipular a la ficción hasta algunos tonos un tanto absurdos, pero al fin y al cabo muy funcionales dentro del microcosmos creado alrededor del mismo. El espectador puede sentir en algún punto del relato una fidedigna confusión, de si esto se trata de una venganza corporativa, o de una expiación emocional hacía los fantasmas del pasado, y ese es el objetivo de su narrativa, bien cumplida incluso hasta los últimos instantes finales. Armin Mueller-Stahl será el padre la víctima, mismo que organiza el “juego” que le cambiará la vida a su hijo
Bonus – Veronika Voss (Rainer Werner Fassbinder, 1982)
POR EL FETT
Parte de la trilogía de Fassbinder sobre el ocaso y la autodestrucción personal como metáfora de la venida abajo “Alemania Occidental”, su última película y quizá el mejor y más hábil testimonio sobre su patente narrativa “Doppelgänger”, donde trata la doble personalidad o el desdoblamiento de la misma visto desde personajes con terribles ansiedades y/o depresiones. Además, Veronika Voss quizá signifique el ejemplo más obvio sobre el genio híbrido narrativo entre el dialecto de la nouvelle y los nuevos patrones establecidos venidos de occidente, siendo una pieza magnífica en cuanto a su exploración psicolófica. Armin Mueller-Stahl ya habpia participado en Lola, pero tomaría el impulso y la experiencia de la mano de Fassbinder
5 – Shine (Scott Hicks, 1996)
Por EL FETT
Basada en la vida del pianista prodigio, David Helfgott, el director Hicks y el Oscar a mejor actuación de Geoffrey Rush convierten a este drama paterno filial en una de las mejores biopcis de la historia, que a pesar de contener todos los trucos narrativos del manual, escapa de su amenaza artificial y melodramática gracias al soberbio crecimiento y desarrollo de su personaje, que combina con mucha espontaneidad su intenso lado dramático y un humor natural, resultados de una personalidad inocente y entrañable. Así pues, a pesar de encausar una durísima historia sobre la opresión patriarcal (un Armin Mueller-Stahl hijo de puta como el padre, con nominación al Oscar includia), el director escapa de esas trampas moralinas para dejar que Rush crezca con su mismo personaje
4 – Night on Earth (Jim Jarmusch, 1991)
POR ADOLFO URIARTE
Memorable participación de Armin Mueller-Stahl en este curioso y muy logrado experimento por parte de Jarmusch, quién nos cuenta 5 historias distinas en cinco distintas ciudades, teniendo como elemento en común la cabina de un taxi. En el segmento desarrollado en Nueva York, Armin Mueller-Stahl nos deleita con el papel de un inmigrante taxista que tiene un choque cultural con un joven del Bronx, siendo en definitiva el segmento más profundo en cuanto a su mensaje sociocultural, y en donde el alemán hace gala de sus grandes dotes actorales al incluso emprender con la barrera del idiona una comedia natural y entrañable. No muy conocida, pero sin duda imprescindible y una de las mejores películas del sobrevalorado Jarmusch
3 – Eastern Promises (Cronenberg, 2007)
POR TEDDYE ZAPATA
Una partera en el Hospital Trafalgar de Londres, atiende a una chica embarazada en estado crítico. La chica muere, pero su bebe vive. Entre sus pertenencias se encuentra un diario, y a través de este, ella termina ligada a una familia de la mafia rusa. Con aromas a The Godfather y Goodfellas, David Cronenberg construye una historia que más que violenta, es un relato sobre la violencia y de quienes la viven. Brilla por supuesto la gran presencia dramática y física de Mortensen como uno de esos crecientes mafiosos, dando de nuevo muestras de su inconmensurable talento en los acentos, y haciendo gala de una fortaleza física avasallante que explotará en esa soberbia secuencia de las duchas. Por su parte Armin Mueller-Stahl como el Godfather ruso es sencillamente GENIAL
2 – Music Box (Costa-Gavras, 1989)
POR EL FETT
Ganadora del Festival de Berlín, esta es una de esas películas dignas de redescubrir. No solo estamos ante la mejor actuación de Jessica Lange, sino también ante uno de los mejores films del realizador griego, el cual comulga de manera perfecta con su deslumbrante actriz, para desarrollar un relato angustioso que progresivamente aumenta de tensión y trasfondo psicológico hacía con todos sus elementos. Lange interpreta con singular naturalidad y maestría a una abogada que convencida de la inocencia de su padre (un fastuoso Armin Mueller-Stahl ), lo defenderá al ser acusado de ser un criminal de guerra nazi. El desarrollo de la relación paterno –filial es fastuosa, creando un verdadero reto moral en el espectador gracias al realismo impreso en la ficción y en el desempeño de Lange, la cual debió haber ganado su tercer Oscar.
1 – Amarga cosecha (Holland, 1985)
POR JOSE ROBERTO ORTEGA
