Las 5 Mejores Películas de Barry Keoghan
La vida de Barry Keoghan bien podría ser material para una novela de superación personal. Al morir su madre por una sobredosis de heroína, él y su hermano pasarían por 13 casas adoptivas diferentes, para después ser críados por su tía materna. Para emplearse, comienza a boxear de manera clandestina, mientras responde a un casting de actuación sin ninguna preparación previa, y tras solo dos años después, comenzaría su carerra dentro de la pantalla chica.
Aunque de a poco se ha encasillado en este personaje “cínico”, antagónico, retraído o bien sociópata, Barry Keoghan se ha aprovechado tanto del acartonamiento de su expresión como de su físico para que estos trabajen a partir de su indiscutible talento y no viceversa, siendo ya nominado y premiado gracias a variadas interpretaciones.
Sin duda uno de los actores jóvenes más interesantes de la actualidad, aquí las Mejores Películas de Barry Keoghan
Bonus – Dunkirk (Nolan, 2017)
POR EL CINE ACTUARIO
Técnicamente impecable, con una fotografía espectacular, con secuencias claustrofóbicas y una edición vertiginosa, pero por desgracia y en su intento fallido por copiarle a Terrence Malick, Christopher Nolan crea un intento de “cine bélico” contemplativo vacío, superfluo y carente de emoción. La narrativa es inexistente y la mecanización estilista ayuda muy poco, y como resultado tenemos quizás una de las películas más soporíferas de su filmografía. Quizás Dunkerque sea su mayor error por intentar traicionarse y aparte hacerlo mal. Patéticamente justificada por sus seguidores, aquí se obvia la pedantería que se comparten director y fandom. Si existe algo a resaltar es su reparto, en especial Tom Hardy y el cuasi debut de Barry Keoghan, que saltaría a la fama con este papel
5 – The Green Knight (David Lowery, 2021)
POR URIEL SALVADOR
David Lowery plasma el relato original en una atmósfera medieval que permite que el espectador descubra un mundo nuevo que readapta las raíces fantásticas de su mitología. A través de las pruebas que debe enfrentarse, el caballero (un correcto Dev Patel) se cuestiona su moral, exponiendo sus defectos y entendiendo que sólo alcanzará el honor y la virtud cuando renuncie a todo lo que tiene. Su ambientación y recorido visitarán varios parajes, criaturas y personajes dentro del folclor de su contexto, y entre las varias aventuras del errante caballero, este se topará con siniestro truhán interpretado de manera magnífica por Barry Keoghan en su clásico modus “hijo de puta”.
4 – Black 47 (Lance Daly, Irlanda)
POR EL FETT
Arriesgada y sangrienta, influenciada por los arquetipos del espagueti de Leone y las oscuras odiseas y cacerías de los territorios de Peckinpah, este emergente western salido de Irlanda consigue impactar con un desoladora pero ágil propuesta a pesar de remar contracorriente, cuando su cronología y/o escenario se centren en un lapso histórico tristemente ignorado por la cultura occidental, arma de doble filo que el joven cineasta aprovecha para desarrollar con maestría una reconstrucción innovadora del género en un paraje virgen pero igual de salvaje. Con una excelente ambientación histórica, su estética hiperrealista sorprende a propios y extraños del género al contar con un poderoso inicio, pero aún más con un final sin concesión.
3 – Bird (Andrea Arnold, 2024)
Por Ale Vega
‘Bird’ desarrolla un drama “coming of age” de trasfondo construido de manera adecuada que gradualmente va convirtiéndose en una especie de fábula, como los capullos que producen mariposas, y en esa transformación avistamos lo hermoso, lo que creíamos perdido en el ambiente agreste. Un cuento en el que podríamos concentrarnos en la precariedad o la violencia, pero cuyo espíritu es capaz de hacernos volar por encima de ello para llegar a lo bello, lo mágico y hasta lo inverosímil. Barry Keoghan se sale de su arquetipo como un papá imprudente y cool ensimismado en sus planes matrimoniales, pero que a su ritmo y en sus posibilidades demuestra amor e interés por sus hijos
2 – The Killing of a Sacred Deer (Lanthimos, 2017)
POR EL FETT
Lanthimos exhibe sin reparo sus influencias de Buñuel y Kubrick en una amalgama estética tan hipnótica como aterradora. Perfeccionista del cuadro y fanático de llevar a su audiencia por un silencioso, lento y tenso recorrido, el griego no habla si no hay nada sustancial que decir, no muestra si no hay nada necesario qué mostrar, y no suelta sus golpes emocionales y metáforas existenciales hasta el momento exacto, lo cual no solo hace que su “absurdo” sea aterrador, sino también lo más cercano a la realidad en un despliegue de consecuencias palpables que como su título lo indica, llevarán a un sacrificio mental y físico dentro del entorno del cansancio y la monotonía familiar. Barry Keoghan será la silenciosa e intrigante amenaza, irrumpiendo fuerte en la pantalla grande tanto con esta como con Dunkirk
1 – The Banshees of Inisherin (Martin McDonagh, 2022)
POR EL FETT
Una analogía de la Guerra civil irlandesa, que traspasa su metafórica limítrofe geográfica para expresar una historia universal, tan humana como cruda, sobre la intolerancia, hipocresía y la violencia social. Uno de los mejores guiones de los últimos años, sus situaciones podrían parecer demenciales, pero son todo lo contrario, un reflejo de la absurda hostilidad humana en la pérdida de sus valores, ideologías y empatía hacía el prójimo. El folclor que agrega McDonagh es un elemento que cohesiona a sus cinco fichas protagonizas, cada un símbolo de un estrato social afectado en este caso por el conflicto civil de Irlanda, naciente en 1920, época en la que también se basa su narrativa. Barry Keoghan ganaría una muy respetable nominación al Oscar como actor de reparto en el mejor papel de su carrera hasta ahora