Las 5 Mejores Películas de Ben Johnson
La historia de Ben Johnson es simplemente de película. Hijo de un ranchero, fue solicitado por los estudios de Hollywood primero como transportista, proveedor y vendedor de caballos, siendo empleado por su padre y viajando a la meca del cine para hacer las labores correspondientes. Sin embargo, Johnson pronto se posicionó como especialista ecuestre en Hollywood, como doble de acción y como visor de seguridad dentro de las producciones western gracias a su habilidad y pericia para montar. Fue en el rodaje de Fort Apache de Ford, cuando Johnson detuvo un par de caballos atrabancados salvando a parte del cast de un accidente que pudo resultar fatal, siendo recompensado por Ford con un contrato como actor durante los próximos 7 años
Gran amigo de Wayne, de su compañero inseparable Warren Oates, y de un carácter recio pero afable y de muy buena relación con los directores, Ben Johnson de a poco fue también sacando sus dotes dramáticos – actorales, mismos que lo llevarían a ganar un Oscar por una de las mejores y más cautivantes actuaciones de reparto de las que se tenga memoria. Un total empresario antes que actor, Johnson no solo heredó la ranchería y los caballos de su padre, sino que expandió dicha empresa al no solo convertirse en uno de los criadores de raza más famosos y millonarios del mundo del cine, sino también en un astuto inversor inmobiliario que llegó a sustentar una fortuna muy considerable hasta el día de su muerte en 1996
Recordemos al actor, vaquero y magnate con sus Mejores Películas
Bonus – One-Eyed Jacks (Marlon Brando, 1961)
POR EL FETT
Única pieza dirigida por Marlon Brando, que bien podría considerarse un documento histórico dada la extrañeza no solo de su labor, sino de su talento detrás de cámaras. Imaginemos la personalidad de Brando, multipliquémosla por dos horas y media, e impregnémosla del protagonismo western como el antihéroe bandido de noble corazón; si bien esto luce tan arriesgado como descabellado, la locura es que funciona de manera espléndida dentro de un cuadro fraternal de traición y venganza que parece pasar en la mitad de tiempo de lo que marca el metraje, causa del disfrutable ritmo que imprime Marlon, sin dejar de lado su carisma. Mención para el villano de Karl Malden, la hermosa presencia de Pina Pellicer y la excelente aparición de Ben Johnson
Bonus – The Getaway (Peckinpah, 1972)
Por Edgar del Valle
Otra de Sam Peckinpah con el de culto Steve McQueen, quien interpreta a Doc McCoy, que cumple condena de diez años por asalto a mano armada. Cansado del encierro le pide a su esposa que haga lo necesario para sacarlo. Para lograrlo su pareja Carol (MacGraw), deberá de ceder a la solicitud de favores sexuales de un funcionario corrupto, que además les pide participen en un asalto a un banco. Buen road-movie de inicio a fin, con las escenas de violencia características del director y con un McQueen que logra una de sus mejores actuaciones. Convertido en uno de los actores favoritos de Peckinpah, Ben Johnson interpreta aquí al corrupto funcionario y villano a cargo de traicionar al rey de lo cool, sufriendo una doble traición a manos de su amante
5 – She Wore a Yellow Ribbon (Ford, 1949)
POR EL FETT
La cinta más colorida y moralina de John Ford es un vehículo para dos lucimientos: el primero, la narración estética, nostálgica y reflexiva sobre el paso del tiempo en el oeste americano, la cercanía a la muerte y la proyección de la grandeza hacia el elemento de la caballería de aquella conquista salvaje; la segunda, una conmovedora actuación de Wayne, que de nuevo demuestra el porqué de su revaloración, dejando entrever trazos dramáticos que hacen a su personaje uno de los más queridos e íntimos de su filmografía. Es entendible que el lento ritmo y algunas libertades artísticas de Ford, pero todo es con el objetivo de hacer lucir a sus caballos, y es que quizá estasea la película con los más preciosas cabalgatas del director (no es casualidad la presencia también protagónica de Ben Johnson)
4 – Bite the Bullet (Brooks, 1975)
POR EDGAR DEL VALLE
Un peculiar western que retoma casi todas las constantes de los grandes del género, sobre una carrera de caballos de 700 millas a través de varios estados americanos, que concentra un gran interés y muchas apuestas en toda la nación. Para no variar nos encontramos a James Coburn en el papel de un antihéroe cínico y sin escrúpulos, capaz de todo con tal de conseguir sus metas. La cinta fue nominada al Oscar como mejor banda sonora y sonido, destacando en su tiempo por su gran reparto (resaltan Gene Hackman, y Ben Johnson) y por su fresca narrativa que escapaba de la típica receta de la pasada década, pero que conservaba de manera pasional y nostálgica todos los elementos y clichés de la misma
3 – The Wild Bunch (Sam Peckinpah, 1969)
POR EL FETT
Un himno a la muerte y una de las ejemplificaciones más claras de la vileza humana, que vio a través de un desarrollo metafórico, un western de mucha soltura, complejidad y belleza audio visual. Sangriento y audaz, bien podría ser catalogado bajo la línea del chilli western, gracias al desarrollo en las sierras del territorio mexicano ambientado en las épocas de conflicto revolucionario. La pandilla salvaje, pilar del subgénero crepuscular, es una angustiosa poesía aventurera y de honor repleta de simbolismos y pistas que van aproximando al espectador hacía aquel fastuoso y sórdido final, uno que comenzará con una legendaria caminata y de la que Ben Johnson será parte esencial .
2 – Dillinger (John Milius, 1973)
POR DASTAN
Se han realizado 10 peliculas oficiales para cine basadas en la famosa historia de los años 30s (en la época de la gran depresión estadounidense) sobre el ladrón de bancos John Dillinger, es de resaltar que a los gringos también les gusta ensalzar a los delincuentes, al igual que en latinoamérica. En esta ocasión John Milius dirige y escribe esta septima adaptación, con un excelente cast, sobre el enfrentamiento entre Dillinger (Warren Oates) y el agente Purvis (Ben Johnson), una cinta gansteril con una magnífica dinámica y gran edición de principio a fin, con secuencias de acción bien ejecutadas y llenas de violencia, con el oportuno uso de fotografías y escenas documentadas, la hace una cinta más interesante. Si eres fan del cine ganster y buscas entretenimiento de alta calidad, está es la indicada.
1 – The Last Picture Show (Bogdanovich, 1971)
POR EL FETT
Entrañable y atemporal relato que significó una de las principales y primeras identificaciones mediáticas sobre el subgénero. Una cinta visual y narrativamente adelantada a su época tanto por su atrevimiento como por el brutal y honesto retrato de varios tópicos “tabúes” dentro de aquella combinación entre decadencia social y despertar juvenil americano, dos curvas que en su intersección despertaron en Peter Bogdanovich una obra maestra. Así pues aquel brutal cambio generacional no solo incluyó grandísimas actuaciones de Ellen Burstyn, Cloris Leachmann y Ben Johnson (que se haría de su Oscar gracias al entrañable dueño de un cine de vaqueros), sino también temas como la violación, la ignorancia y/o indiferencia sobre la discapacidad, el despertar sexual y la pobreza y militarización.