Las 5 Mejores Películas de Frank Whaley
Uno de esos actores que ves donde quieras y ni te sabes su nombre. Con más de 130 títulos entre el cine y la televisión, Frank Whaley comenzaría su carrera a finales de los 80 con una seguidilla de éxitos y personajes que se extenderían hasta mediados de los 90 y que lo convertirían en uno de los rostros de reparto más solicitados por los directores de aquel tiempo, apareciendo incluso en algunas joyas de distintos géneros.
Aunque su único y recordable protagónico fílmico irónica y desgraciadamente recaerían en una mala película juvenil de culto, su rostro de ha mantenido activo hasta nuestros días gracias a la buena decisión de cambiar de pantalla, y es que en los últimos años los trabajos le han salid por parte de la televisión, sin embargo ¿quién no recuerda aquel muchacho acribillado después de que Samuel L. Jackson recitara una inventada cita bíblica? Celebrando los 61 años de un muy eficaz actor secundario, aquí las mejores películas del eterno Frank Whaley
Bonus – Field of Dreams (Phil Alden Robinson, 1989)
POR EL CINE ACTUARIO
Quizás por momentos se siente como demasiado melodramática y empalagosa (y que algunos sucesos de la trama recaen en lo absurdo), sin embargo, lo que hizo que “Field of Dreams” se convirtiera en una película de culto fue la construcción de personajes tan carismáticos, positivos y humanos, que a la larga son utilizados en la narrativa para crear una fábula de pasión y perseverancia. Podrá no ser perfecta, pero ese retrato visual y narrativo de firmeza hace que de verdad creamos que si una voz nos dice “Si lo construyes, el vendrá” persigamos nuestros sueños no importando el precio. Para Frank Whaley sería la primera gran oportunidad de codearse entre los grandes de Hollywood, despegando a partir de este campo
5 – Red Dragon (Brett Ratner, 2002)
POR EL FETT
Un buen thriller – precuela (de la joya de “The Silence of the Lambs”) que ha ganado respeto conforme el pasar de los años y que incluso supera en todo rubro a la sobrevalorada “Hannibal” de Ridley Scott. Ratner toma los elementos de “aquel silencio” y sigue al pie de la letra el manual en cuanto a la construcción de personajes, usando de nuevo al asesino en cuestión como foco de la tensión y misterio en su doble vida y personalidad. Mientras en una parte transcurre la investigación, en la otra se desenvuelve el andar social del “dragón” y de donde se desprende un planteamiento incluso mejor elaborado y original de parte del director y guionista. Ahí formará parte Frank Whaley en el que quizá sea su último destacable papel en el cine, pues de aquí en adelante tomaría el rubo televisivo
4 – Career Opportunities (Bryan Gordon, 1991)
POR EL FETT
No es muy buena, bueno, de hecho, es mala. Una cinta noventera que quiere parecer ochentera al copiar todos los clichés de las historias juveniles y de descubrimiento sexual, pero que en lugar de la frescura de aquellas, está repleta de momentos forzados, diálogos idiotas y chistes disfuncionales. Pero nos gusta por la trama, una Jenniffer Connelly que se pasaría a la juventud convirtiéndose en el símbolo sexual – juvenil de principios de aquella década. La película llegaría a tal culto, que aunque no se haya visto, las imágenes de aquella blusa blanca y esos patines tienen un lugar especial en todos los adolescentes de las generaciones X y Y.Por cierto, el protagonista es Frank Whaley
3 – Born on the Fourth of July (Oliver Stone, 1989)
POR EL FETT
Agresiva cinta anti bélica que brilló no solo por la compenetración de Cruise con el papel del trágico y redimido Kovic, sino también por la carga dramática provista por Stone que juega con la corriente neorrealista (Frank Whaley como el hermano del prota está verdaderamente increíble); combinando 4 líneas temporales: el deseo de Kovic por ir a servir su país, el conflicto bélico, sus funestas consecuencias y la consecuente reestructuración del personaje para convertirse en la figura política – social que luchó por la paz y por los veteranos, la electrizante atmósfera trágica que se respira a cada minuto encuentra en el pasado de Stone la causa de la también dicha empatía y conexión hacía con aquel personaje de la vida real: dos veteranos unidos por un mismo fin
2 – JFK (Oliver Stone, 1991)
POR EL FETT
Una película que cimbró e incomodó a todo un país, no es ningún secreto la cacería a campo abierto que el estado dio a Stone a partir de esto gracias a una excelsa labor de histrionismo e investigación que desembocó en una de esas joyas atemporales que se mueven entre la ficción y el semi documental de manera fastuosa. Con un reparto envidiable y un montaje que, a pesar de durar en su corte del director (por favor véanlo) un poco más de 3 horas y media, JFK se convirtió en el punto máximo de la investigación fílmica y uno de los mejores thrillers en la historia. Un dato curioso es que una de las mejores actuaciones de Frank Whaley es removida del corte original para solo tener presencia en el “Director’s Cut”, haciendo a a la versión siniestra del Lee Harvey Oswald
1 – Pulp Fiction (Quentin Tarantino, Estados Unidos, 1994)
POR EL FETT
He aquí un autor en todo su esplendor y fuera de los pecados que lo irán poco a poco degradando; Tarantino deja de lado su estática y asumiendo el movimiento; sus dialectos y conversaciones están ahí, sus mesas y demás elementos así como también su siniestro y negro humor, sin embargo, esta gran fábula gansteril brilla como el oro de su maletín macguffin gracias a que él mismo no se respeta y sale valiente y airoso de su zona de confort. Todo en perfecta armonía y conexión, hasta sus fetiches lucen grandiosos. Uno de sus momentos más memorables tienen que ver con Frank Whaley, una hamburguesa, una mesa de por medio (por supuesto) y una cita bíblica que precede una lluvia de balas que recibirá el buen actor de reparto.