Las 5 Mejores Películas de Jeanne Moreau
una de las divas del cine francés. Me refiero a la actriz, guionista y directora Jeanne Moreau.
Comenzó su carrera cinematográfica en 1949 participando en pequeños papeles en películas de bajo presupuesto. En 1958 protagoniza la película “Ascensor para el cadalso”, dirigida por Louis Malle y en 1962 la cinta “Jules y Jim” dirigida por Francois Truffaut, mismas que le otorgarían el reconocimiento de la crítica cinematográfica.
Su mejor época actoral se desarrolla en las décadas de los años 50 y 60, cuando trabaja bajo la dirección de cineastas como Louis Malle, François Truffaut, Michelangelo Antonioni, Luis Buñuel, Jacques Dem, Roger Vadim, Elia Kazan, Orson Welles, Peter Brook, Wim Wenders.
Su interpretación cinematográfica de mujeres anticonformistas y rebeldes, la convirtieron en un icono del movimiento feminista. En su filmografía encontramos cintas como: “Los amantes”, La novia vestía de negro”, “Diario de una camarera”, ¡“La Noche” y “! Viva María ¡”, “Jules et Jim”, “El amante” y Nikita” por mencionar algunas.
Moreau, quien fallece el 31 de julio de 2017, ganó el premio del Festival de canes a la mejor actriz, por el filme “Moderato cantábile” en 1960 y el premio BAFTA a la mejor actriz por “Viva María” en 1965, entre muchos otros premios.
Festejemos su natalicio recordando 5 de sus películas:
Bonus – The Train (John Frankenheimer, 1964)
POR EDGAR DEL VALLE
Basado en un hecho de la vida real sucedido en la segunda guerra, se nos relata el enfrentamiento de la resistencia francesa (Lancaster) contra el coronel alemán Franz von Waldheim (Scofield), que intenta trasladar las obras de arte robadas de Francia en un tren hacía Alemania. Estamos ante una de las películas bélicas más importantes y explosivas de la historia, no solo por su increíble impresión de suspenso (en donde la carga tiene tiempo y hora para ser entregada), sino también por que lo largo del tiempo, se ha convertido en una de las obras más influyentes dentro del subgénero de acción. Moreau hace un pequeño pero importante papel, dando fuerza femenina a un relato acostumbrado para hombres
Bonus – Le procès (Welles, 1962)
POR EL FETT
Welles aprovechó su estatus para encausar la que sin duda fue su último gran film, un thriller onírico y repleto de humor negro basado en la novela de Frank Kafka. Llamada “The Trial” en occidente, podríamos también asegurar que no hay obra de Welles más rítmica, entretenida, loca y sujeta a todo gusto, comercial o “de arte”, que también se ganó el mote de la crítica como su obra más inventiva, resultado de una pericia visual inigualable que alcanzaba otro de sus clímax de carrera gracias al tono surrealista del relato, mismo que Welles aprovechó para procrear una hermoso testimonio narrativo y estético sobre la opresión del sistema judicial en el individuo. Moreau siempre será recordada por esas membranas entre los dedos, y por su sensualidad en ese pequeño gran y coqueto papel.
5 – El diario de una recamarera (Luis Buñuel, 1964)
POR EL FETT
Una de las mejores y más olvidadas piezas de Buñuel, que en su etapa francesa encontró cierta asimilación de mensaje de su obra clímax, Viridiana (aunque en realidad es una segunda versión y adaptación de la novela homónima, llevada al cine con anterioridad en 1946). En este estudio sociológico sobre la perversión y el prejuicio, Moreau interpreta a una mujer parisina que se emplea en una casa rural como criada, causando un revuelo emocional entre sus residentes, una clase aristócrata caída en la clase media y que busca desquitar la frustración bajo juicios y una ambientación sombría que explaya la maldad y la opresión. Así mismo, su crítica y metáfora política es incluso educativa.
4 – Los amantes (Louis Malle, 1958)
POR EL FETT
Moreau se convertiría también en una de las musas de Malle, trabajando bajo las órdenes del director incluso en dos películas en el mismo año. El papel de Moreau en la obra del cineasta sería clara: ser la figura de la amante, pero no cualquiera, sino una que experimentaría tanto los placeres como los dilemas morales alrededor de las multi relaciones. Así pues, Malle a través Jeanne exhibe una exploración existencial y hasta filosófica sobre el hartazgo del matrimonio, exponiendo la verdadera naturaleza del individuo y su incapacidad por ser monógamo. La presencia, sensualidad y belleza, y esos largos silencios de la gran actriz francesa, son suficientes para nosotros también convertirnos en uno(a) de sus amantes
3 – Ascensor para el cadalso (Louis Malle, 1958)
POR EL FETT
Trágica pieza que gira en torno a la infidelidad de una pareja y al crimen pasional de ambos por el único impedimento para consumar su romance: el esposo de ella y el jefe de él. Malle manifiesta por la parte de él, una incapacidad de reacción lógica debido al embelesamiento hipnótico por su amor; y por ella (una magnífica Moreau), un lienzo contemplativo de su obsesión por su amante. Sobre este relato se construye una trama criminal y policial que incluso rayará en lo onírico y la comedia negra al presentar varios episodios circunstanciales que irán sumando complejidad y consecuencias a sus inmiscuidos. No hay piedad en su final, pues el destino de los amantes será el castigo por su crimen… y estupidez.
2 – La Notte (Michelangelo Antonioni, 1961)
POR EL FETT
Tal vez la mejor película de Antonioni, el legendario director logra una seductora amalgama entre su drama anti romántico y la fina crítica a la burguesía italiana por parte también de una extraordinario cast y la precisa decisión de filmar en blanco y negro, imprimiendo así un hilo de nostalgia, suspenso y hasta erotismo en su tercer acto, cuando esta pareja en crisis, despliegue sus deseos e hipocresías más desenfrenadas. La nostalgia, la muerte y por supuesto la sociedad italiana son temas que el director toca en este final de era y cambio de batuta del cine italiano, haciendo una perfecta alegoría del porvenir de la propia industria. Las actuaciones por supuesto son de un nivel máximo.
1 – Jules y Jim (Francois Truffaut, 1962)
POR EL FETT
Una de las piezas más representativas de la nouvelle vague, y que quizá por encima de Godard y Karenina, crea el arquetipo más exacto de la mujer bohemia – francesa de aquella ola, responsabilidad también de una excepcional y bella Jeanne Moreau, que aquí funge como el interés amoroso de los dos amigos que engalanan el título. Tan entrañable como emocionalmente trágica, Truffaut era un maestro en captar y manifestar la toxicidad relacional del individuo, y que aquí se da a partir de un mismo interés amoroso, que también simboliza la unión y co dependencia fraternal en todo ámbito de su pareja masculina protagonista. Uno de los más interesantes triángulos amorosos en el cine