Las 5 Mejores Películas de Joan Bennett
Joan Bennett debió haber tenido más fama. Una actriz con mucha presencia y de un físico y mirada seductoras, tras una primera etapa como actriz secundaria encontraría la fama a principios de los 30, sin embargo, fue con el cambio de color de su cabello y una reestructura total de su imagen que la actriz lograría catapultarse a los anales del cine gracias al género noir, siendo una de sus mejores y más reconocidas “femme fatales”, principalmente a la orden de Fritz Lang
Pero todo terminaría muy rápido para Joan gracias a su marido y un trágico ataque de celos, donde este disparó al agente de la actriz en la ingle, no solo afectando al ejecutivo, sino también la carrera de Joan, la cual tuvo que salir de la pantalla grande para dedicarse a la televisión y el teatro.
Recordemos a esta buena, fugaz y sensual actriz con sus mejores películas
Bonus – Suspiria (Argento, 1977)
POR TEDDYE ZAPATA
Suspiria suponía en aquel entonces una reinvención del giallo, ya que se acercaba más al terreno de lo fantástico, de lo esotérico, e incluso de lo onírico, y se alejaba del estilo policiaco que lo había caracterizado años atrás. Dario Argento antepone sus formas al fondo en este cuento de brujas grotesco pero estilizado, en un ejercicio fílmico de estilo en toda regla que cimbró los estatutos de su subgénero y que incluso brindó una pieza de fuerza e índole social al posicionar al empoderamiento femenino como principal cause de su trama y bello estilo. Bennett daría una de sus últimas apariciones como la legendaria villana, Madame Blanc en un papel que hizo honor a su leyenda y carrera
5 – We’re No Angels (Michael Curtiz, 1955)
POR EDGAR DEL VALLE
Unos prófugos de la justicia que escaparon de la Isla del diablo, llegan a un poblado en búsqueda de dinero y ropa para continuar con su escapatoria, convenciendo al dueño de una tienda de arreglarle su tejado con la finalidad de pasar desapercibidos. En compañía de Humphrey Bogart, Peter Ustinov y Aldo Ray, Joan Bennett será el complemento perfecto, sensual y humorístico, con esta tripleta de delincuentes, administrando así también su buen registro y buena vena cómica . Otra muy buena y divertida actuación, que no desmerece en lo absoluto a la realizada por los otros protagonistas, ofreciendo una comedia muy divertida y con momentos geniales.
4 – Man Hunt (Lang, 1941)
POR EL FETT
Quizá esta sea una de las cintas menos memorables de Lang, pero aún así divertida y adepta a esa venganza paranoica con la que el legendario cineasta vivía, una eterna fantasía y el sueño eterno de “poder matar a Hitler”, o al menos imaginarse el cómo. La historia de un hombre común que es confundido por un asesino del Fuhrer por una circunstancia incluso un poco “chusca”, es la excusa perfecta para desprender una tensa persecución repleta de buenos momentos y actuaciones, en especial la de George Sanders, que hace un villano un poco exagerado y de caricatura, pero así excelente. Bennett por su parte, se aleja de ese cínico papel de femme fatale pata encausar una sutil pero buena actuación
3 – Little Women (Cukor, 1933)
POR EL FETT
Una de las primeras adaptaciones de la célebre novela de Louisa May Alcott, y sin duda también una de sus mejores, la sensibilidad que imprime Cukor al relato de las 4 hermanas toma un sentido más emocional gracia a ese refinado estilo y la conexión con su musa, Katharine Hepburn, que aquí comenzaba junto con Cukor a construir ese arquetipo de mujer recia que irrumpiría en el Hollywood sonoro. Por supuesto que Joan Bennett como “Amy March”, no se queda atrás en dicho énfasis a la figura femenina, logrando aquí sin duda su primer gran papel y el cual llamaría la atención de todos los productores, llevándola por encima de sus otras dos hermanas también actrices, Constance y Barbara
2 – The Woman in the Window (Lang, 1944)
POR EL FETT
Lang y su experimentada paranoia americana de nuevo regalan uno de los ejercicios noir más peculiares y tensos. La amalgama fortuita de sus situaciones inmiscuirá al espectador en una espiral empática y de desgracia por sus protagonistas, un profesor maduro y obsesionado con el cuadro de una mujer, y la representación carnal de ella, materializada ante él, y que dará como resultado un estado constante de veneración, misterio, chantaje y muerte. Un crimen “casi perfecto” y la involucración detectivesca de un allegado convierten a este relato en un caldo hirviendo de extenuante suspenso. Su magnífico giro de tuerca quizá ahora pueda resultar trillado, sin embargo, es la ejecución y la notable química entre Robinson y Bennett lo que la sigue enalteciendo.
1 – Scarlet Street (Lang, 1945)
POR EL FETT
Uno de los mejores remakes de la historia, Lang mejora la adaptación original de Jean Renoir convirtiendo el sentido dramático de aquel en uno de los noir más trágicos. Hay que poner énfasis en la figura de la “femme fatale” que, si bien funge en la mayoría de las producciones como un pivote del misterio, aquí se muestra sin un ápice de dualidad, manifestando la pura maldad y perversión con una Joan Bennett enfundada en un tan seductor como siniestro papel. La degradación de esta (exponiendo el tema de la prostitución) y de su víctima, acarrean un relato enriquecido con falsificación de arte, anti romance y crimen, todo perfectamente equilibrado y sin ningún atisbo de misericordia hacía sus ruines personajes.