Las 5 Mejores Películas de John Garfield
El 4 de marzo de 1913, nace el actor estadounidense John Garfield (Jacob Julius Garfinkle), reconocido por su trabajo actoral protagonizado personajes rebeldes, anárquicos y cínicos, siendo nominado dos veces a los premios Oscar.
De ascendencia judía, a los siete años queda huérfano de madre, por lo que es recluido en un internado del Bronx lo que marcaría su vida futura.
En su juventud pretende incursionar en el mundo del Box, pero una afección cardiaca no le permite seguir en este deporte. Posteriormente tiene una breve participación en el teatro, por lo que dejo dejar Broadway y se desplazó a Hollywood para probar suerte. A finales de los años 30, aparece en la cinta “Cuatro hermanas” (1938), recibiendo buenas críticas siendo nominado al premio Oscar como actor de reparto.
En la Segunda Guerra Mundial Garfield se alistó en el ejército norteamericano, pero fue rechazado por sus problemas cardíacos, lo que no impidió que junto a Bette Davis ofreciera entretenimiento y comida a los soldados que prestaban sus servicios. Paralelamente continuó su carrera artística participando en filmes como “Castle on the Hudson” (1940) “El lobo de mar” (1941), “La vida es así” (Tortilla Flat) (1942) y “Destino Tokio” (1943)-
Al término de la guerra, se consolidó como uno de los actores más reconocidos, por sus participaciones en cintas como: El cartero siempre llama dos veces ((1946), “De amor también se muere” (1946) y la multipremiada “La barrera invisible” (1947).
En 1946, cuando su contrato con Warner Bros expiró, Garfield decidió enfrentarse a su antiguo estudio y crear una productora independiente, siendo el primer actor de Hollywood que dio este paso.
A finales de los años 40 y principios de los 50 se vio involucrado en la llamada cacería de brujas del senador McCarthy, por la que fue acusado de actividades antiamericanas y colaborar con los comunistas. Garfield renunció a dar nombres de colegas relacionados con el comunismo aduciendo que, en realidad, no conocía a ninguno.
De todas maneras, su resistencia ante el comité le costó cara a su reputación. Fue incluido en las listas negras y fue vetado en la elección de futuros papeles
Sus problemas cardíacos se agravaron y murió a la edad de 39 años el 21 de mayo de 1952. Recordemos a este gran actor, con cinco de sus magistrales actuación
LA FUERZA DEL MAL (1948) (ABRAHAM POLONSKY).
Considerada dentro de las 150 mejores películas del cine negro, nos plantea la historia de un abogado que trabaja para un hombre que se ha vuelto rico con negocios de apuestas ilegales. Estupenda interpretación de John Garfield con unas cuantas secuencias memorables. Polonsky establece un tono progresivo de autodestrucción en su protagonista, el cual irá cayendo en una espiral de desgracia y tensión mientras da cuenta de su verdadero entorno; al mismo tiempo, nuestra clásica “femme fatale” fungirá como una salida incierta ante la desconfianza del acechado héroe. Sin duda alguna una cinta ágil (apenas 78 minutos) que significa uno de los pináculos del cine negro.
YO AMÉ A UN ASESINO (1951) (JOHN BERRY)
Con un guion de Dalton Trumbo y en compañía de la también gran actriz Shelley Winters, Garfield nos ofrece una actuación convincente como un delincuente de poca monta que al tomar a una familia como rehén, comienza a enamorar a una mujer despechada, en un relato que hace prevalecer el llamado síndrome de Estocolmo, el cual que guionista y director relatan de una manera ágil y tensa en tan solo 75 minutos. Aunque el tono de thriller resalta, el contexto alrededor del delincuente la convierte también en un clásico del cine negro, mostrando quizá la mejor faceta de John Garfield, cuando demostraba lo que era protagonizar al antihéroe por excelencia. Excelente dupla y química com Winters.
CUATRO HIJAS (1939) (MICHAEL CURTIZ)
John Garfield, hace un debut sólido y premonitorio, que le permitió ganar su primera nominación al Oscar como mejor actor de reparto. Aquí interpreta a un joven compositor que es desposado por circunstancias ajenas al amor, debido a que su esposa ama a otro, pero sacrifica su felicidad debido a que su hermana también ama a esa misma otra persona. Un dramón que construye la historia de cuatro mujeres amantes de la música de manera muy veraz por parte de Curtiz, un cineasta que sabía explorar los tonos trágicos del romance (véase Casablanca). Melodrama muy bien ponderado en su tiempo, y que permitió conocer el talento y los alcances de actor de Garfield.
CUERPO Y ALMA (1947) (ROBERT ROSSEN)
Película que retrata el mundo del boxeo, en donde un joven que desea triunfar en este deporte (Garfield) y que se ve envuelto en el mundo de la mafia que rodea a este espectáculo pese a las críticas y advertencias de su familia. Uno de los retratos más veraces y brutales sobre la corrupción del deporte en general, siendo el boxeo desgraciadamente una de las justas más propensas a los amaños y apuestas. Garfield muestra un impresionante registro dramático en otro de esos personajes que caen en una espiral de autodestrucción, arquetipo que tenía muy bien dominado desde los inicios de su carrera, haciéndose de su segunda nominación como mejor actor
EL CARTERO SIEMPRE LLAMA DOS VECES. (1946) (TAY GARNETT)
Durante la gran depresión en los Estados Unidos, un vagabundo llega a un restaurante de carretera, donde solicita trabajo, terminando por enamorarse de una esposa del dueño con quien inicia un romance que termina mal. Junto con Lana Turner, Garfield nos dan muestra de su gran calidad escénica, en un papel de que a pesar de ser un hombre sin principios logra la empatía del público, dando una cátedra de interpretación gracias al manejo de dicha dualidad. Un clásico del cine negro, que tuvo un remake protagonizado por Jack Nicholson, Jessica Lange, que si bien no superó a la original, si pudo haberla igualado para la vista de vario críticos.