Las 5 Mejores Películas de Leo McCarey
El 3 de octubre de 1898 nace el director y guionista Leo McCarey, nominado en varias ocasiones al premio Oscar y ganador de dos estatuillas.
Leo McCarey se recibió como abogado, pero circunstancialmente se acercó al mundo del cine al perder su empleo e integrarse como asistente del director Tod Browning. Posteriormente escribió y dirigió cintas de Charley Chase. Se comenta que fue gracias a él que se reunieron como pareja Stan Laurel y Oliver Hardy (el gordo y el flaco) en la cinta muda “Slipping Wives (1927)”.
En 1929, el director se pasó a los largometrajes, convirtiéndose en uno de los principales directores de comedias de los años 30, con cintas como “Torero a la fuerza” (1932), “Sopa de ganso” (1933) con los hermanos Marx, “Nobleza obliga (1935) y “The Awful Truth” (1937). En su filmografía se encuentran otras cintas como: “Mi hijo John” (1952) “Un marido en apuros” (1958) y “Satanás nunca duerme” (1962).
Recrodemos al buen Leo McCarey, con sus 5 Mejores Películas
Bonus – My Son John (1953)
Una pareja de un pequeño pueblo se queda destrozada cuando descubre que su hijo John es un agente comunista. Una cinta con claros y obscuros, pero indispensable en la filmografía de Leo McCarey filmada en la época de la persecución del senador McCarthy en contra de los artistas procomunistas. Sin duda se trata de una película muy curiosa, un intenso drama familiar que a su estridente mensaje anticomunista se contrapone un fuerte componente religioso. Quizá la película no sea tan buena, sin embargo, quedó como uno de los remanentes menos objetivos y más curiosos sobre la llamada Guerra Fría, contextualizada en un entorno más común y familiar. La dirección no es ajena a la calidad.
5 – Bells of St. Mary’s (1946)
Secuela de la cinta “El buen pastor”, nuevamente protagonizada por Bing Crosby en el papel del padre O’Malley, en su nuevo destino como sacerdote del colegio de monjas hacía la parroquia de Santa María, en un barrio humilde de Nueva York. Una película divertida, al mejor estilo de Leo McCarey, con muy buenas interpretaciones de los actores protagonistas, logrando nominaciones a mejor película, mejor director y mejor actriz para Ingrid Bergman, la cual si se llevó un Globo de Oro. Con tintes musicales, está considerada una de las mejores secuelas en la historia del cine, quizá no superando a su original, pero si manteniendo su buen y fino humor y a sus conmovedores personajes
4 – My Favourite Wife (1941)
En este caso Leo McCarey se desempeña exclusivamente como guionista, en una cinta que repite como protagonistas a de Cary Grant e Irene Dunnde y en una historia romántica sobre una mujer que es declarada como perdida en un naufragio y que regresa para enterarse que su esposo se ha vuelvo a casar. Una comedia romántica y de tono “screwball”, lo bastante coqueta y entretenida y que como dato curioso une a Cary Grant y a Randolph Scott, de los cuáles hay rumores (y algunas confirmaciones) eran amantes. La cinta originalmente sería dirigida por el propio Mccarey, pero que no se concretó su participación, pero aun así se hizo acreedor a una nominación al premio Oscar como mejor guion.
3 – An Affair to Remember (1957)
Curiosamente esta cinta es al igual que en el caso de “Sólo Dios lo sabe” un remake del mismo Leo McCarey (la original data de 1939), pero ahora con el protagonismo de Déborah Keer y Cary Grant. Un melodrama, con momentos verdaderamente incompresibles, pero que con el tiempo se convirtió en un clásico, y una de las películas más recordadas de la actriz, tal y como lo anunciaba el título de la cinta, mejorando en definitiva a la cinta fuente y sirviendo como inspiración para otro remake y/o adaptación futura para Sintonía de Amor, otro clásico del cine romántico (pero con menor calidad) interpretado por Tom Hanks y Meg Ryan en 1993 (más otro muy olvidable apenas un año después, en 1994).
2 – Going My Way (1945)
Una de las ganadoras del Oscar más dispares y criticadas con el tiempo, incluso de las más apestadas y olvidadas por la historia. Muy estrictas las críticas negativas, quizá sea cierto su sobrevaloración a raíz de sus 7 premios (entre ellos, Mejor película y mejor director y uno para su protagonista), sin embargo y teniendo en cuenta el tiempo en el que estamos hablando (final de la Segunda Guerra Mundial), esta comedia musical interpretada por Bing Crosby sobre un simpático cura y su actividad a favor de su parroquia, así como las discrepancias con otro sacerdote mayor y más severo, es una ligera y entrañable cinta que llega a disfrutarse si llegaras a olvidar sus galardones.
1 – The Awful Truth (1937)
Una película romántica con la actuación de Cary Grant e Irene Dunnde, sobre una pareja a punto de divorciarse, pero que no están muy seguros de su decisión. Por esta cinta recibió el director un premio Oscar y 6 nominaciones para la película, a pesar de los años transcurridos desde su estreno consigue una amplia sonrisa de los espectadores. Sin duda es la mejor película de su filmografía, la cual brilla por el balance entre la “incomoda verdad” del matrimonio fallido y el divorcio, y la comedia “screwball” que emanan de las mismas complicaciones relacionales entre la pareja protagonista. Así mismo, Leo McCarey expone de un manera recia los vaivenes de la vida social de aquella época. Y por supuesto el perro, uno de los mejores perros en el cine