Las 5 Mejores Películas de Mary Elizabeth Winstead
Nacida el 28 de noviembre de 1984 en Carolina del Norte, Mary Elizabeth Winstead quiso ser bailarina de ballet, pero se vio obligada a abandonar la carrera por su sorprendente altura de 1.73. De ahí que la menor de 5 hermanos eligiera la actuación como alternativa, apareciendo en pequeños roles en diversas series de televisión y consiguiendo su primer rol importante en la telenovela “Passions”. En cine tardaría más, teniendo la oportunidad en 2005 con el doble estreno de la tercera entrega de “Final Destination” y una comedia de superhéroes de Disney.
Una actriz talentosa y sexy, pero también desperdiciada por la industria al quedar encasillada en ese papel romántico de chica única y diferente que la consolidó, causando que su carrera sea irregular y esté llena de productos desechables (aunque bueno, cuando estás casada con Ewan McGregor tampoco es que te afecte mucho). Aun así, le damos un pequeño reconocimiento a otra actriz que ya fue con sus mejores 5 películas.
5 – Sky High (Mike Mitchell, 2005)
POR URIEL SALVADOR
Puede que la idea de colocar al superhéroe en un ambiente escolar suene ridícula e infantil, y por momentos lo es, pero el guion y la dirección se las ingenian para adaptar a los personajes y sus poderes a un entorno que el espectador reconoce fácilmente. Sin embargo, lo interesante viene al momento de usar a sus estereotipados personajes como una metáfora didáctica a la lucha de clases, reforzado en esa división entre héroes y asistentes. Si a esto se le agrega un decente giro final (que le otorga a Mary Elizabeth Winstead una de sus más memorables actuaciones), se obtiene una divertida historia que quizás pudo haber inspirado la creación de My Hero Academia.
4 – Death Proof (Tarantino, 2007)
POR EL FETT

Tomando en cuenta que esta es una parodia serie b, en realidad su 1a parte es incluso sobresaliente, revitalizando la figura del asesino motorizado de los 80 (The Hitcher la mayor referencia) con un brillante Russell envuelto en una ráfaga de erotismo y buena música; un depredador que Quentin Tarantino es capaz de estructurar gracias a que sus estáticos trucos de dialecto funcionan a la perfección. El problema viene después, pues aunque es más que claro que el feminismo necesita tomar venganza y ser redimido, es en la forma de plantearlo, totalmente contrario a su primer acto, donde esta broma termina por ser más ridícula de hasta como originalmente se vendía. Rodríguez sacó la mejor parte.
3 – Swiss Army Man (Daniels, 2016)
Por El Fett
De los directores de “Everything Everywhere All at Once”, no se puede debatir el hecho de que esta pieza representa en contexto una muy peculiar oda y metáfora a la soledad y al duelo, sin embargo su contraparte visual pudiera parecer exacerbada y hasta grotesca a un gran segmento de la audiencia dadas las circunstancia dentro de la convivencia de un ser maniaco depresivo y un cadáver pedorro que saca agua potable de su boca de cuestionable sanidad. Paul Dano otorga un gran personaje, que combina la extravagancia y tristeza necesaria para equilibrar el surrealismo con la grave situación emocional que vive su personaje. Mary Elizabeth Winstead tiene un pequeño papel, pero que da sentido a toda la travesía del protagonista
2 – 10 Cloverfield Lane (Trachtenberg, 2016)
POR EL FETT

Es sencillo, y es que sin la presencia de John Goodman este thriller psicológico no le hubiera interesado a absolutamente nadie. Aunque el guion de Chazelle ofrece a este concepto su idea más preciada y mejor desarrollada dentro del tono de suspenso, es el veterano actor el que con su presencia inyecta la tensión necesaria a una trama que todos sabemos se irá al carajo hacia su final (nunca terminó por cuajar la combinación de la SF dentro de esta fórmula), pero que se sostiene gracias a su perturbador e impredecible personaje. Una deconstrucción de la figura paterna convertida de un tétrico y amenazador villano, la cual se convierte en el punto de dónde emana el desempeño de una hermosa y aceptable Mary Elizabeth Winstead.
1 – Scott Pilgrim vs The World (Edgar Wright, 2010)
POR EL CINE ACTUARIO

El no tomarse tan en serio le permite tener un ritmo vertiginoso, con un estilo visual y una narrativa que, con varios gags y elementos del mundo gamer, quizás sea el representativo (visual) más cercano en el séptimo arte del “videojuego”. La mofa de los traumas generados por relaciones de pareja antiguas y la falta de sanidad mental y madurez para resolverlos, genera una carga y lucha en las contrapartes en las relaciones futuras (esto a través de la lucha de los ex), lo cual da un sentido de burla a los arquetipos impuestos por los “chick flick”. Es una estupenda propuesta y una excelente carta de amor al último tramo de la generación millennial, encarnado en la ya icónica imagen de una pelirrosa Mary Elizabeth Winstead.