Las 5 Mejores Películas de Patrick Wilson
Un actor de reparto muy efectivo, y hasta un poco desperdiciado, el talento y presencia de Patrick Wilson lo ha convertido en un rostro recurrente sobre todo en el cine de terror de los últimos años.
Así mismo, y a pesar de no ser galardonado en el plano fílmico, el teatro y la televisión le han retribuido sus esfuerzos actorales, con variadas nominaciones y premios a los Globos, Emmys y Tonys. Celebramos su cumpleaños con sus cinco mejores películas
Bonus TV – Angels in America – (Mike Nichols, 2003)
POR JOSE ROBERTO ORTEGA
Miniserie televisiva que adaptó la laureada obra teatral de Tony Kushner. A través de los ojos de dos parejas gay, sus visiones angelicales y fantasmagóricas, de una narrativa surrealista y de elaboradas metáforas, se exploran los dramas vividos por la comunidad homosexual durante la epidemia de VIH a finales de los convulsos años 80’s, en los que Dios ha abandonado el cielo. Pocos trabajos logran ser tan emotivos como trascendentes, tan poéticos como dramáticos y humorísticos. El prominente trabajo de dirección de Nichols y el renombrado reparto en el que cada actor interpreta al menos a dos personajes, crean una experiencia muy peculiar.
5 – Young Adult (Jason Reitman, 2011)
POR EL FETT
Comedia negra que si bien no destaca directiva o narrativamente en nada, proveyó a sus actores de una pieza de elogio madurativo para sus currículos, sobre todo si tomamos en cuenta que su trama trata precisamente de ese paso definitivo hacía la adultez, más emocional que físicamente hablando. Quizá haya llegado un poco tarde, pues a pesar de retratar a una Generación X, Reitman quiere forzar una analogía y mensaje moralino generalizado, razón por la cual no acaba por definir de manera correcta su crítica. Patrick Wilson y Charlize Theron se roban la película.
4 – The Conjuring (James Wan, 2013)
POR EL FETT
La elección de Vera Farmiga y Patrick Wilson no pudo haber sido mejor para interpretar a los cazadores de demonios y exorcistas Warren, un par de actores colmilludos y algo relegados que siempre cumplen con creces en sus trabajos. Así también y a pesar del encasillamiento de Taylor como fémina acosada por espíritus, ella y su manada de niñas son las se roban la película, denotando con terror la escabrosa situación que Wan logra proyectar, usando a las niñas como elementos esenciales para su ejecución. Antes de irse al carajo con secuelas babosas, la primera fue muy decente y con sustos muy efectivos.
3- Hard Candy (David Slade, 2005)
POR EL FETT
Muy infravalorada cinta de suspenso que por allá del 2005 tocó un tema del que todos conocían, pero nadie quería hablar, que era el internet como arma preferida de los violadores y/o pederastas. En este contexto, el desaparecido David Slade construye con mucho sentido de tensión la historia de un fotógrafo de treinta años (interpretado por un genial Patrick Wilson) que cita a una joven de 14 a su casa para tomarle una sesión fotográfica. La trama rápida pero eficazmente toma un giro inesperado cuando al cazador sea cazado por una vengadora anónima que se volverá un símbolo de justicia femenina necesario y que hace que esta cinta siga más que vigente. Hay que redescubrirla, por que además es muy divertida
2 – Watchmen (Zack Snyder, 2009)
POR EL FETT
Un total cambio de registro en esta alternancia histórica tan compleja como entretenida. Un thriller, Watchmen es quizá el ejemplo más claro de a lo que se refiere con una adaptación fílmica, revolucionando e innovando a su fuente original para trasladar con singular maestría el camino del héroe al lenguaje fílmico desde varios puntos de vista, o en otras palabras, desde diferentes perspectivas sociales dentro de la resquebrajada sociedad americana, mezclando varios aspectos culturales y bélicos que hacen de la obra de Snyder un manjar narrativo desde cualquiera de los arquetipos referidos. El final es un shock emocional, con la perfecta dosis de drama que hace a un film digno del calificativo “memorable”, o más atrevido, “de culto”.
1 – Little Children (Todd Field, 2006)
POR EL FETT
Una joyita de drama moderno con uno de las mejores narraciones “voz off” de las que tenga memoria, la devastación marital en toda su simpleza y esplendor de nuevo es tópico central de esta brutal tragicomedia que utiliza a la figura del “niño” para dar un testimonio tan contemplativo como existencial del resquebrajamiento del núcleo familiar frente a las tentaciones del día a día y los deseos y pasiones desenfrenadas. Dicho derrumbe es narrado desde un tono de humor ligero y elegante, lo que permite a los actores el dote de la improvisación en un libreto que de por sí brilla por su genialidad y frescura. La química entre Kate Winslet y Patrick Wilson es soberbia, irradiando naturalidad y sensualidad, con un par de escenas muy explícitas