Las 5 Mejores Películas de Rob Reiner
Uno de los mejores adaptadores de Stephen King, precursor del documental falso, maestro de la comedia y uno de los directores más versátiles, olvidados y talentosos, el genio de Rob Reiner logró su clímax primero como actor durante la década de los 70, para después dar un salto impresionante a la silla de director desde mediados de los 80.
También productor y escritor, seguramente la mayor parte de la audiencia lo identifique por sus papeles de reparto en cintas como “Balas sobre Broadway” o “El Lobo de Wall Street”, pero fue durante una década (1984 – 1994) donde demostró su valía como cineasta procreando algunos de los mayores clásicos del suspenso, el drama coming of age y la comedia.
Hijo de otro símbolo de comedia, Carl Reiner, Rob heredó y superó el talento del padre, comenzando primero como guionista en la televisión. Aunque su última película data del 2017, es cierto que la carrera de Rob ha disminuido en calidad directiva, sin embargo su estela artística quedará inerte cuando cualquiera repase sus excelentes y mejores 5 películas
Bonus – A Few Good Men (1992)
Quizá la cinta más atípica de su carrera, Reiner encausa con creces un drama bélico que a pesar de ciertas inconsistencias en el guion y un sentido patriotero por momentos rebasado, sale avante por sus extraordinarias actuaciones; en especial la de Jack Nicholson, que se lleva de corbata a sus co-protagonistas como el antagónico, un militar que nos recuerda que no podemos manejar la verdad, la verdad en la que una sola secuencia en un tribunal (y en particular una sola línea) puede llegar a convertirse en historia gracias a una mera interpretación y su respectiva buena dirección, un fenómeno pocas veces visto donde el autoritarismo histriónico puede hacer crecer a una cinta. Para repasar de vez en cuando.
5 – The Princess Bride (1987)
Uno de los mejores y más maduros cuentos de hadas en acción real. La mayor valía de Reiner es ensalzar todos sus clásicos elementos (amor, princesas, brujas, duelos y hechizos) con diálogos y actuaciones tan bien posicionadas en su entorno medieval, que la emoción y el sentimiento que causan son compartidos con la misma intensidad por chicos y grandes. Mientras la visión estética vislumbra a los más pequeños, Reiner se encarga de incrustar un humor fino y sutilmente “negro” en sus situaciones, lo cual hace de esta aventura un deleite para todas las edades. Resaltar la presencia de una bellísima Robin Wright como la princesa en cuestión, en este cuento entrañable y aún vigente gracias a su calidad
4 – When Harry Meet Sally (1989)
Una inolvidable comedia romántica que con ocurrencia y agudeza en los diálogos y situaciones, explora los quehaceres del amor y el desamor con singular naturalidad. Espontánea y cautivadora, la combinación de la alguna vez llamada “Reina de la comedia romántica” Meg Ryan, y el carisma que hace mucho tuvo un tal Billy Crystall, dieron como resultado una atrevida, familiar y honesta apuesta que si bien se internaba dentro de los estándares de su industria, también salía de paseo fuera de lo moralmente aceptado para tocar algunas fibras sensibles dentro de las relaciones humanas con conversaciones y situaciones que desembocaron en un par de secuencias ya legendarias (la del orgasmo en el restaurante es bestial).
3 – Stand by me (1986)
Además de Darabont, Reiner ha sido el otro director que más ha comprendido la obra de King, ajustando ciertos elementos de las fuentes originales para que funcionen en pro de lenguaje fílmico ¿Han notado que muchos o la mayoría de los escritos de King contienen en menor o mayor grado una naturaleza “coming of age”? It, The Shining, Pet Sematary, Carrie, The Green Mile, Children of the Corn, The Dark Tower y por supuesto esta, una de los relatos fílmicos por antonomasia de dicho tópico, donde gracias a Reiner, la narrativa de King es tan respetada como perfectamente nutrida por el excelente trasfondo y lazos juveniles entre sus entrañables protagonistas. Quizá sea verdad, pero para el cine King vale más como dramaturgo juvenil.
2 – This is Spinal Tap (1984)
El tercer falso documental en la historia (y debut directivo de Reiner) es una sátira punzante sobre el modus vivendi de las agrupaciones de metal de los 80’s; Motorhead, Poison, Def Leppard, Van Halen, entre otros, que ven con singular humor desplegar no solo sus excesos, sino de manera creativa una concepción bufonesca de sus letras, composiciones, excéntricos performances y hasta las alianzas y/o relaciones destructivas dentro de la unidad del mismo grupo. Una de las películas más divertidas en la historia y de donde gente como Sascha Baron Cohen o Taika Waititi han basado su humor. Spinal Tap incluso existió tras el éxito y culto de este film injustamente olvidado. Reiner también funge como actor, como el propio director que lleva a cabo este “documental”
1 – Misery (1990)
Reiner de nuevo, la adhesión a la obra de King lo llevó en esta ocasión a confabular su mejor película, sin duda una de las mayores odas al suspenso y en donde el aspecto de la “literatura” juega un papel primordial. King – Reiner usan la obsesión como motor principal de esa tensa experiencia, pero al mismo tiempo la siniestra Kathy Bates encausa el renacimiento creativo del autor en un círculo vicioso tan natural como satírico para la figura del escritor. “Misery” pues funge como un elemento macguffin dentro de esta brutalidad que se extiende de las emociones a las sensaciones físicas, haciendo que el espectador sea partícipe incluso del dolor de su cínico antihéroe, y socio de su demente casera.