Las 5 Mejores Películas de Toni Servillo
Toni Servillo traspasa la línea del talento actoral para convertirse en uno de los más importantes artistas de la Italia moderna. De una familia volcada 100% al arte, el también productor, director de teatro, guionista y respetado promotor de variadas festividades y espectáculos treatrales y culturales, abandonó la carrera de psicología para dedicarse de lleno a su pasión: la actuación.
No es coincidencia dicho bagaje escolar, y es ue Toni Servillo se ha caracterizado por interpretar papeles de alto nivel dramático – emocional, explorando todas las aristas de personalidad y/o psicológicas de sus personajes, reflejado principalmente en su trabajo bajo la batuta de Paolo Sorrentino, que vio en Servillo no solo la extensión perfecta de sus pasiones y demonios, sino también a su divo, a su muso y actor fetiche.
Con más de 30 premios internacionales y una filmografía muy selecta, celebremos el cumpleaños de Toni Servillo con sus 5 mejores películas
Bonus – Loro (Paolo Sorrentino, 2018)
Por El Fett
Si existe un elemento que salva a este pretencioso proyecto de Paolo Sorrentino alrededor de la vida del político Silvio Berlusconi, ese es Toni Servillo, el cual interpreta al ex mandatario y magnate italiano con toda maestría, incluyendo toda la desbordada personalidad requerida por su director como crítica (más personal y objetiva) hacía su cínica y polémica figura. Existen 4 versiones de esta cinta, las primeras fungen como dos episodios, cada uno de 100 minutos, para después sumar una tercera versión de poco más de 200 minutos, y finalmente la versión definitiva, más recortada, mejor montada, pero sobre todo más rítmica de 150 minutos. Un cagadero de Sorrentino sal
5 – Gomorra (Garrone, 2008)
Por El Fett
Ganadora del Grand Prix, la trastornada” utopía” gansteril concebida por Garrone es tan trágica como brutalmente honesta, y es que retrato de La Camorra más que ser una denuncia, es una intrusión a la intimidad del grupo criminal, a sus víctimas y a quiénes le acompañan, logrando así conservar los valores más finos de la narrativa neorrealista de Rosselini, no entrometiéndose ni juzgando, sino solo retratando la angustiante realidad, como si su cámara y el espectador fueran solo testigo del tan atroz entorno para algunos, y tan oportunista para otros, en aquellas hasta claustrofóbicas provincias de Nápoles y Caserta. Por momentos un poco pesada, dichos trazos no son suficiente para negar su riesgosa y genial propuesta, que le hizo también acreedora al BAFTA y la mejor cinta en los premios del cine europeo.
4 – È stata la mano di Dio (Sorrentino, 2021)
Por El Fett
Sorrentino confirma su estatus no solo como el mejor director italiano en la era moderna, sino también como el claro preservador del cine de Fellini en este extraño pero enriquecedor coqueteo del neorrealismo con elementos surreales que vuelven a sus personales relatos en un manjar de exquisitez narrativa. Con “Fue La Mano de Dios”, Sorrentino se desnuda en una biopic que invita al espectador hacer parte de su familia, de su vida y finalmente de su tragedia, por la cual encontraría la vocación al cine como un escape de la realidad, pero irónicamente como un retrato de la misma. Una biopic tierna, honesta e imprescindible, que ya podemos catalogar como uno de los mejores “coming of age” de la historia (y sin blanco y negro de por medio)
3 – Las consecuencias del amor (Sorrentino, 2004)
Por El Fett
Un fastuoso ensayo para La Gran Belleza, Paolo Sorrentino emprende un viaje introspectivo del dolor que causa el amor y de cómo este permanece esperanzado a ser sentido por los individuos. Mediante un protagonista desprendido y alejado de la realidad y la humanidad, el director encausa su primer gran obra en un ensayo sobre los roles de la sociedad y los límites de la hipocresía y la artificialidad, de cómo bajo mecanismos repetitivos nos construimos una barrera del sufrimiento que puede llegar a causar la propia interacción humana. Un tema que será recurrente en su obra y que madurará con el tiempo. Aún así, esta es considerada por la crítica de su país como una de las grandes cintas italianas de este milenio
2 – Il Divo (Sorrentino, 2008)
Sorrentino sorprende con la historia del político Giulio Andreotti, un personaje quizás desconocido para el resto de mortales pero que en Italia forjó una carrera casi macabra para la obtención y control del poder. Lo muestra sin tapujos, a veces con un sentido del humor mordaz pero siempre crítico ante un personaje definitivamente siniestro. El director poco a poco obtiene ese estilo ya conocido gracias al movimiento de cámara y la fotografía dentro de sitios encerrados tipo noir sin llegar enteramente a ser parte de este género. Aun así se nota claramente la comparación entre la política y la mafia sin decirlo tan abiertamente, más bien con sutilezas y detalles lo que da un sentido irónico a toda la trama que saca una sonrisa aun sabiendo que estamos ante algo sórdido.
1 – La grande belleza (Sorrentino, 2013)
Por Arquicruz
Un fragmento importante de la vida de Gep Gambardella, quien a pesar de vivir la soltería a rienda suelta y de moverse en los círculos más exclusivos de la alta sociedad de la Roma moderna, ha empezado a notar que algo falta en su vida. Pero a la vez, el protagonista nos sirve de guía para ver y conocer muchas historias casi invisibles que giran alrededor de este. A lo largo de la historia vemos como Gambardella se enfrenta con el hecho de siempre haber estado enamorado de la misma mujer y que a pesar de no sentirse un hombre religioso o creyente, existe una inquietud de su espiritualidad que no sabe cómo afrontar. Un filme muy masculino que muestra las cualidades y conflictos del hombre en una época donde masculino se confunde arteramente con machista.