Las Mejores Películas de Burt Lancaster
El 2 de noviembre llega a este mundo un actor singular, que se reconocía autodidacta y que se superó en cada una de sus actuaciones hasta convertirse en un ícono de la cinematografía de los Estados Unidos, me refiero a un insuperable Burton Stephen Lancaster, más conocido como Burt Lancaster.
Por su figura y prestancia se convirtió en sinónimo del hombre galán y rudo, De fuerte atracción y energía. Su primer papel cinematográfico fue en la película “Forajidos”, junto a Ava Gardner en el año de 1946. De igual manera apareció en los clásicos del cine: “De aquí a la eternidad” (1953), “Veracruz” (1954) “Duelo de titanes” (1957) “Elmer Gantry” (1960) y “El gatopardo” (1963)
Recibió en 1960 el Óscar al mejor actor principal, por su papel en “Elmer Gantry”, por el que también fue galardonado con un Globo de Oro y el premio del Círculo de Críticos de Cine de Nueva York. Su filmografía y grandes actuaciones lo convierten en uno de los mejores actores del cine estadounidense de todos los tiempos.
Falleció en 1994, en su casa de Los Ángeles, como consecuencia de un infarto de miocardio. Sus restos se encuentran en el Cementerio Westwood Village Memorial Park de Los Ángeles, California.
23 – Novecento (Bernardo Bertolucci, 1976)
POR EL FETT
314 minutos. Si bien su visionario puede ser descartado por el espectador promedio, lo hecho por Bertolucci es un compendio fílmico – histórico sobre la Italia de comienzos del Siglo XX, abarcando 5 décadas (1900 – 1950) en donde el cineasta toma como excusa una historia de amistad y fraternidad para exponer no solo la ideología política y social de un país dividido y caracterizado en aquellos tiempos por su fascismo, sino también como un remanente de vital importancia de la revolución industrial europea. Una obra monumental, Bertolucci trasciende el arte para posicionar su pieza como un baluarte histórico. Sobre este gran lienzo se desprende uno de los repartos más envidiables de la historia, el cual incluye a un maduro pero aún increíble Burt Lancaster.
22 – Separate Tables (Delbert Mann, 1958)
POR EDGAR DEL VALLE
Drama que desarrolla situaciones amorosas diversas, que se dan entre un grupo de huéspedes de un viejo hotel. Kerr comparte créditos en esta cinta con actores como David Niven, Burt Lancaster, Rita Hayworth y Wendy Hiller. Su encomiable combinación entre comedia y romance la convierte en uno de los primeros esbozos del cine coral, manejando un alto nivel actoral y de credibilidad dramática para servir como escaparate para ese grandilocuente reparto. Para Hayworth, fue una cinta que le permitió ir más allá de su encasillamiento dentro del cine negro, mostrando un buen equilibrio tragicómico, Cinta muy infravalorada y que significa aún en la actualidad uno de los mayores referentes de su género.
21 – Sorry, Wrong Number (Anatole Litvak, 1948)
POR JOSE ROBERTO ORTEGA
20 – The Swimmer (Frank Perry, Sydney Pollack, 1968)
POR EDGAR DEL VALLE
Filmada en 1966 y estrenada en 1968, Burt Lancaster protagoniza a un hombre recorre una zona residencial, visitando las casas para conocer sus piscinas, lo que le permitirá recordar pasajes de su vida, incluyendo a una examante, esposa de un viejo amigo. Gran actuación de este estupendo actor, que encarna a un hombre sonriente y vital que no sabemos de donde viene ni quien es realmente, cuyo viaje es la metáfora de la recapitulación de la vida del hombre de su época. Una revisión muy optimista y hasta con cierto grado de contemplación hacía una generación silenciosa, aquella que apenas comenzaría a entrar a la tercera edad, dando el paso al reinado prolongado del boomer
19 – Seven Days in May (John Frankenheimer, 1964)
POR EDGAR DEL VALLE
Un general estadounidense planea un golpe de estado contra el presidente de su país después de que él firma un acuerdo con Rusia. Con reparto de primera: Kirk Douglas, Ava Gardner, Burt Lancaster, Fredric March, Edmond O’Brien, Martin Balsam, George Macready, John Houseman, Hugh Marlowe, el director nos envuelve con una trama de intriga de primer nivel, en un entorno de paranoia social en medio de la misma Guerra Fría. El principal valor del filme es su credibilidad histórica, haciendo que la propia amenaza no se sienta tan ficticia y que, con una carga de excelente suspenso e intriga política, sorprenda y asuste (en su momento) por igual. Dicha intriga política ya había sido revisitada por Frankenheimer dos años antes, en lo que es su cinta más recordada.
18 – Lawman (Michael Winner, 1971)
POR EDGAR DEL VALLE
A toda estrella del western le llegará ese proyecto de “despedida” que simbolizaría el arquetipo en el que desempeñó dentro del género, pero ¿dónde colocar a Burt Lancaster? Un caso dual y maravilloso si tomamos en cuenta que fue uno de los grandes villanos del género, así como también uno de sus más interesantes y dramaticamente complejos. Entonces el “Hombre de La Ley” conservará esa dualidad, pues estamos hablamos de un sheriff inmisericorde y obsesionado con ejercer la justicia, por lo cuál se auto empleará como mercenario para impartir balazo y sangre, no importanndo si estos son hermanos, hijos o padres. Un héroe inflexible, deshumanizado, un anti héroe en su máxima expresión, ese era Burt Lancaster en este olvidado y genial western de corte crepuscular.
17 – The Rainmaker (Joseph Anthony, 1956)
POR EL FETT
Quizá sea el papel más alejado de Hepburn en su estereotipo de hembra empoderada, sin embargo, esta cinta permitió también ver lo poderosamente multifacética que era, con el común denominador de la mirada, esa misma que dejaba congelado a cualquier espectador gracias a su increíble expresividad. A lado de ella otro grande, Lancaster, que se encargará de interpretar a un pintoresco estafador que hace creer a todos que puede “hacer llover”. Lo importante de este drama romántico es que el personaje de Burt Lancaster sirve como un distractor para un crudo mensaje sobre la opresión femenina en algunas sociedades, destinadas a encantar a su “hombre” sacrificando su voluntad propia. Una gran actuación
16 – The Killers (Robert Siodmak, 1946)
POR EL FETT
Fantástico film noir que significó la entrada de Burt Lancaster y de Ava Gardner con bombo y platillo a Hollywood. Mientras Ava definiría su arquetipo de “mujer fatal” a través de la figura de una misteriosa mujer, pareja de un mafioso, que empieza a jugar sus cartas a partir de un atraco maestro, un fantástico y debutante Lancaster dejaría en claro su grandeza con una potente presencia y un halo dramático imprescindible, y del cual se desprende la narrativa con la que se irá desarrollando la trama, a base de flashbacks y teniendo como base un extraño asesinato. Siodmark tensa y alarga el pasado para revelar su gran giro de tuerca en la investigación presente, permitiendo que la figura de Lancaster sea aún más épica.
15 – The Crimson Pirate (Robert Siodmark, 1952)
POR EL FETT
Drama, noir, western, cine bélico, acción, comedia, cine gransteril, thriller, romance ¿Qué le faltaba a Burt Lancaster para consagrarse como uno de los mejores actores de todos los tiempos? Una aventura en altamar y un pirata que encausaría los mejores valores de sus cínicos antihéroes y los estereotipos en donde se sentía más cómodo, pero también en donde gozaba más actuar. Y es que eso es esta treídante y acrobática aventura de Siodmark, una gozadera de principio a fin en donde cabe resaltar que Lancaster diseñó sus propias escenas de acción y maromas, haciendo él mismo sus propios “stunts”. Presencia, talento, humor y un Lancaster mostrando la sonrisa y el pecho con un adorable criminal de las aguas del Atlántico
14 – Criss Cross (Robert Siodmark, 1949)
POR EL FETT
Siodmark marcaría el destino de su nueva adquisición, Burt Lancaster, al que tres años después de nuevo emplearía para uno de los noir más sórdidos y con mayor impresión de suspenso. El arrastre lento y tenso hacía el crimen y la degradación se da gracias a la influencia de una “femme fatale” tan bella como peligrosa, un arquetipo ruin que el director ya había utilizado y del que Lancaster ya había sido víctima. Así mismo, la otra particularidad del narrador se hace presente con el constante uso de los flashbacks, recurso narrativo que suma no solo profundidad, sino también tensión dentro de la construcción y desarrollo de sus personajes y sus motivaciones. Y como ya es costumbre, no olvidemos los “finales Siodmark”, una garantía cínica de la marca
13 – Sweet Smell of Success (Alexander Mackendrick, 1957)
POR EDGAR DEL VALLE
La acción tiene lugar en New York y narra las peripecias de Sidney Falco (Tony Curtis), agente de imagen ambicioso y sin escrúpulos, que trabaja para J.J. Hunsecker (Burt Lancaster), columnista del diario de distribución nacional “The Globe”, y que tiene controlado bajo sus columnas a millones de lectores. Entre los dos comenzará un conflicto cuando Falco comience a cortejar a la hermana de su jefe, el cual hará lo posible para evitarlo. Una excelente película, con grandes actuaciones de Burt Lancaster, que logra proyectar la manipulación de la media en un personaje – símbolo que se mantiene como un remanente aún en nuestro días; y por supuesto de Burt Lancaster, con un antagónico manipulador y siniestro
12 – Gunfight at the O.K. Corral (John Sturges, 1957)
POR EL FETT
¿Recuerdan el western Tomsbtone con Russell y Kilmer? Pues bueno, esta versión de aproximadamente 40 años antes narra los hechos acontecidos en aquella real balacera que hubo en el salvaje oeste entre el Wyatt Earp y Doc Holliday y los hermanos Clanton, un clan criminal de aquellas épocas conocido como “Cowboys”. Burt Lancaster interpreta a Wyatt Earp, una de las eternas figuras históricas y fílmicas del oeste americano. La química con Kirk Douglas como Doc Holliday ofrece una exposición más dramática y real de los hechos que sus similares, centrándose en la evolución de sus personajes y los motivos que los llevan a aquel legendario acontecimiento, uno de los famosos de aquel periodo americano.
11 – The Professionals (Richard Brooks, 1966)
POR EL FETT
Imaginemos “The Expendables”, pero en western, con un reparto de primer nivel, una excelsa fotografía, y lo más importante, un excelente guion. Eso fueron “Los Profesionales” de Brooks, una colección de estrellas del género unidas para el rescate de una “secuestrada” en territorio mexicano. Sin duda una de las más entretenidas cintas de género, la presentación y desarrollo de sus forajidos, así como la impresión de sus maravillosas escenas de acción, se ven ensalzadas por ese sutil giro de tuerca a la mitad de su historia y por supuesto, una final – clímax repleto de tensión y cambios de bando y personalidad, fiel a la naturaleza de este grupo de carismáticos antihéroes liderados por Marvin y también un destacable Burt Lancaster.
10 – Brute Force (Jules Dassin, 1947)
POR EDGAR DEL VALLE
Uno de los mejores dramas carcelarios de todos los tiempos. Tras los muros de la penitenciaría, el alcalde de la prisión mantiene hacinados a los presos. Joe Collins (Burt Lancaster) y sus compañeros de celda, hartos de la situación, deciden organizar una fuga. Un plan temerario para buscar soluciones a sus problemas. El film combina elementos de drama, cine negro y thriller. Se cuenta entre los mejores de Jules Dassin, y que a la larga le causaría problemas con el senador McCarthy y su cacería de brujas, debido al tono anarquista de la cinta. Haya sido un mensaje o mera coincidencia, el drama y entretenimiento noir dentro de una cárcel es imperdible
9 – The Rose Tattoo (Daniel Mann, 1955)
POR EDGAR DEL VALLE
Basada en una obra del dramaturgo Tennessee Williams, en su primera película en los Estados Unidos, Magnani protagoniza a una mujer viuda que conoce a un camionero (Burt Lancaster), que transformará su vida al enamorarse de él. Sin duda el talento apasionado y gestual de Magnani impresionó a la crítica y audiencia americana, con un estilo que literalmente era una explosión de emociones al servicio de un relato que el mismo Williams adaptó de su obra, haciéndolo incluso más personal y vivencial. Destaca la química con el también grandioso Burt Lancaster. Por su papel, Magnani recibió los premios Oscar y Globo de Oro gracias a esta enérgica y pasional actuación.
8 – Vera Cruz (Robert Aldich, 1954)
POR EL FETT
Gran western que combina su peculiar tema bélico (la intervención francesa en territorio mexicano) con una gran producción y una dirección soberbia por parte de Aldrich, al cual tampoco le será ajeno la construcción de su entorno social dentro de tan singular período y región, y por supuesto su inmersión en la maldad a raíz de este. Aventura sobre traiciones con un clímax fenomenal (que combina lo bélico con la acción western), y un duelo entre Cooper y Lancaster que alcanza una notable tensión (Burt Lancaster otorga uno de los mejores antihéroes del género). Destaca también la grandilocuencia y cuidado histórico que el director tuvo sobre el período, sobre todo al tratarse de la visión entre la lucha de clases sociales.
7 – Il gattopardo (Luchino Visconti, 1963)
POR EDGAR DEL VALLE
El filme suma drama, historia, romance y guerra. Es el octavo largometraje de Visconti, en la cual Burt Lancaster lleva el papel protagónico en película basada en la novela homónima de Giuseppe Tomasi di Lampedusa y con un reparto multiestelar. En una profunda reflexión acerca de la decadencia social, Lancaster en el papel de Don Fabricio, Príncipe de Salina, ve alterada su vida y la de su familia tras la invasión de Sicilia por las tropas de Garibaldi por lo que se ve obligado a refugiarse en su casa de campo. Resulta irónico que la más famosa imposición que se le hizo a Visconti (la de contratar a un actor americano, para estrenarla en América), sea la que le da mayor grandeza al filme: el magnífico trabajo de Lancaster.
6 – Judgment at Nuremberg (Stanley Kramer, 1961)
POR EL FETT
Una de las más poderosas cintas americanas sobre juicios y dilemas morales en la historia. No solo es espléndidamente incómoda y tensa, sino que también resalta su valía histórica al relatar con mucha entereza el juicio de los jueces nazis encargados de la limpia durante la Segunda Guerra Mundial. Kramer hace que su duración de tres horas se diluya en una ágil impresión de tensión dramática constante, delegando su credibilidad en un impresionante ensamble actoral encabezado por su fetiche Tracy y una serie de impresionante “testimonios” de Clift, Garland y Burt Lancaster. Kramer, un cineasta que no tenía miedo a proyectar complejos tabúes sobre el racismo, la religión, la ciencia y como en este caso, los dilemas humanistas de la postguerra.
5 – The Train (John Frankenheimer, 1964)
POR EDGAR DEL VALLE
Basado en un hecho de la vida real sucedido en la segunda guerra, se nos relata el enfrentamiento de la resistencia francesa (Lancaster) contra el coronel alemán Franz von Waldheim (Scofield), que intenta trasladar las obras de arte robadas de Francia en un tren hacía Alemania. Estamos ante una de las películas bélicas más importantes y explosivas de la historia, no solo por su increíble impresión de suspenso (en donde la carga tiene tiempo y hora para ser entregada), sino también por que lo largo del tiempo, se ha convertido en una de las obras más influyentes dentro del subgénero de acción. El héroe que interpreta aquí Burt Lancaster es IMPRESIONANTE, y es que basta con recordar la última escena de las vías del tren para comprender que ver a Burt era PURO CINE.
4 – From Here to Eternity (Fred Zinnemann, 1953)
POR EL FETT
La ganadora de 8 Oscar es no solo una de las presentaciones que mayor éxito de taquilla, crítica y público de la historia, sino también un gran clásico romántico – coral – bélico en donde Zinnemann establecería muchos de los estatutos dramáticos con los que la crítica estadounidense mediría las consecuentes súper producciones de esta índole. Dos principales historias cruzadas se ven afectadas por conceptos como el honor, la pasión y el adulterio, pero también por el consecuente ataque a Pearl Harbor. La película está repleta de grandes actuaciones y momentos, pues basta recordar la escena en la playa junto con Kerr y Burt Lancaster, un legendario momento que inmortalizó a este clásico, al cine dramático – bélico y que cimbró todo Hollywood.
3 – Birdman of Alcatraz (John Frankenheimer, 1962)
POR EL FETT
El visionado de este soberbio drama te hará comprender el poder del montaje y del ritmo. Cada escena es alta importancia y cumple su cometido dentro del gran desarrollo de su personaje, un reo violento y rebelde sentenciado a cadena perpetua y que, a través del estudio y compañía de los pájaros, no solo encontrará la redención, sino también algunos de los más grandes descubrimientos científicos alrededor del ramo avícola. Basado en extraordinarios hechos reales, sus dos horas y media de duración que se sienten como una, con un Burt Lancaster que como siempre, representa la excelencia actoral. Frankenheimer, siendo normalmente un cineasta de acción, aplica los más grandes principios de edición para encausar un ágil e interesante drama.
2 – Atlantic City (Louis Malle, 1980)
POR EL FETT
Una fábula criminal que narra el ocaso de la figura gansteril con elegancia, humor negro y mucho romanticismo, y en donde una muy joven Sarandon crea una química conmovedora con el siempre magnífico Burt Lancaster, en un amor de “parias” imposible, electrizante y por supuesto con momentos de elegancia erótica que explotan la excelsa combinación histriónica. Tan tierna como pasional, Malle logra la humanización de la figura “gansteril” desde uno de los arquetipos menos revisitados: el del ayudante, asistente o achichincle de los ex capos que, en su búsqueda por el respeto jamás ganado, encontrará la redención. Divertida, romántica, dramática, tensa, esta joya ganadora del León de Oro de Venecia es una de las piezas mejor equilibradas del género gansteril.
1 – Elmer Gantry (Richard Brooks, 1960)
POR EL FETT
La película anti religiosa más religiosa que hay. Brooks no crítica la fe dogmática, sino a las instituciones inmorales que la preceden, y en el proceso, como estas se ven ensalzadas accidentalmente por el actuar de los sus dos ejes protagónicos que simbolizan el fanatismo y la falsedad, dos extremos que encontrarán su muy personal y trágica redención a raíz de sus pecados, bautizados con el fuego “divino”. Memorable sería el calificativo perfecto para describir también a las actuaciones de Burt Lancaster y Simmons, protagonizando a este par de predicadores (el, un inmoral oportunista, y ella, una tóxica creyente), que verán caer su “gracia” gracias al éxito y la hipocresía del culto. Contiene uno de los mejores clímax de la historia.