Las Mejores Películas de Tony Curtis
Estudios dramáticos, su galantería y una campaña publicitaria que sirvió a Universal para explotar su imagen, fueron los 3 ingredientes para que este Don Juan de 6 esposas labrara una carrera en el cine y la televisión de más de 100 títulos. Primero como criminal, luego como detective, sus roles secundarios se transformaron repentinamente cuando se puso una falda a lado de Marilyn Monroe. Para los 80’s y regresando al plano secundario, dedicó su carrera a su otra faceta artística, la pintura, llegando a ser un importante referente.
Recordemos a Tony Curtis con sus Mejores Películas
Taras Bulba (J. Lee Thompson, 1962)
POR EDGAR DEL VALLE
Una película de aventuras sobre la vida de Taras Bulba, un hombre amante de la libertad e incapaz de someterse a nadie, que vivió en el Siglo XVI. Un magnífico relato, repleto de aventuras, eso sí nacionalista, sobre el pueblo cosaco por la lucha por su independencia de los polacos en el siglo XVI. La cinta sube su nivel con la aparición de Yul Brynner en un papel hecho a su medida, con sus poses y su extraña manera de andar. Basada en una novela corta del escritor ucraniano-ruso Nikolai Gogol, la cinta ayudaría a consagrar al actor en este tipo de personificaciones históricas, siendo sin duda uno de los actores más eficaces, legendarios y con un mayor número de papeles de esta índole
Sex and the Single Girl (Richard Quine, 1964)
Por El Fett
Comedia romántica muy infravalorada y con momentos de grandes destellos humorísticos a raíz de dos factores: el primero, los excelentes diálogos provistos por un guion que propone un duelo de géneros que, a pesar de usar los estereotipos propios de los 60, permanece como un inteligente y fresco estudio sobre los comportamientos de hombre – mujer, el segundo, su excelente química entre Natalie Wood y Tony Curtis, ambos expertos en este tipo de papeles y que aquí desglosan su chispa y belleza al servicio de una muy rítmica y disfrutable dirección. Habrá un remake “no oficial” con Ewan McGregor y Renee Zellwegger, pero dista de la calidad de esta cinta.
Bonus – Spartacus (Stanley Kubrick, 1960)
Por Edgar del Valle
Esta película estuvo envuelta en la polémica en toda su producción, debido a que ésta estuvo a cargo de Douglas, quien impuso al guionista, despidió al primer director elegido (Anthony Mann) y lo sustituyó por Kubrick quien se hizo cargo sobre todo de la dirección de actores y fotografía y no de la obra completa, situación por la que algunos críticos no consideran esta película de su autoría. Finalmente nos encontramos con una película épica, con un gran reparto y estupendas actuaciones. Ganadora de 5 premios Oscar, ganadora del globo de oro a mejor película. Curtis en un excelente papel de reparto, de connotaciones eróticas pero con un objetivo aliado hacía el héroe del film
5 – Sweet Smell of Success (Alexander Mackendrick, 1957)
Por Edgar del Valle
La acción tiene lugar en New York y que narra las peripecias de Sidney Falco (Tony Curtis), agende de imagen ambicioso y sin escrúpulos, que trabaja para J.J. Hunsecker (Burt Lancaster), columnista del diario de distribución nacional “The Globe”, y que tiene controlado bajo sus columnas a millones de lectores. Entre los dos comenzará un conflicto cuando Falco comience a cortejar a la hermana de su jefe, el cual hará lo posible para evitarlo. Una excelente película, con grandes actuaciones de Burt Lancaster y por supuesto de Tony Curtis, que lo hizo acreedor a una nominación en los premios BAFTA
4 – The Vikings (Richard Fleischer, 1958)
Por Edgar del Valle
En la Alta Edad Media, los vikingos o normandos estaban habituados a realizar incursiones de saqueo. Einar (Kirk Douglas) y Eric (Tony Curtis), hijos ambos del rey vikingo Ragnar -aunque ignoraban su parentesco-, se odiaban profundamente, se ven obligados a luchar juntos para rescatar a la princesa Morgana, de la que ambos estaban enamorados, de las garras del rey de Inglaterra. Película de romance y aventuras, en la cual Tony Curtis logra un personaje que compite con el de Douglas en tono nivel, situación no fácil de conseguir, sin embargo, su trabajo actoral es convincente y a la altura del reto.
3 – Some Like It Hot (Billy Wilder, 1959)
Por El Fett
Utilizando el elemento criminal como un soberbio recurso macguffin, Wilder construirá una de las más adorables y sensuales bombas cómicas de la historia, una explosiva y vertiginosa odisea romántica que tuvo que necesitar de Wilder, el dominio dramático de Curtis y la gran capacidad humorística – actoral de Lemmon, para contener la belleza y carisma, pero también la incapacidad actoral y problemas emocionales de una radiante Monroe. El resultado es imprescindible, regalando varios de los más grandes momentos y diálogos dentro de la comedia fílmica, incluyendo por supuesto uno de los más grandes finales de la historia.
2 – The Boston Strangler (Richard Fleischer, 1968)
Por Edgar del Valle
En esta reconstrucción de la vida real de un famoso asesino en la ciudad de Boston en los años 60, Tony Curtis consigue una de sus mejores interpretaciones como Robert de Salvo, un fontanero felizmente casado y con una vida aparentemente normal, pero que asesina mujeres estrangulándolas. El nivel de naturalidad que alcanza la dirección la hace una pieza que juega entre la ficción y el documental, con secuencias que resaltan por su frialdad, sobre todo en los interrogatorios, donde Curtis denota algunos registros jamás revelados en alguna otra parte de su extensa filmografía. Por su papel en esta cinta Curtis, fue nominado al Globo de Oro como mejor actor principal.
1 – The Defiant Ones (Stanley Kramer, 1958)
Por Edgar del Valle
Dirigida por Stanley Kramer con Tony Curtis y Sidney Poitier, esta cinta de fuerte crítica racial y con tintes de road movie se centra sobre dos fugitivos que han escapado de la cárcel y tienen que emprender la odisea de estar encadenados y condenados a huir juntos, a pesar de las diferencias raciales por ser un blanco y otro negro, pero con un mismo propósito: alcanzar la libertad. La película ganó el Oscar a mejor guion y mejor fotografía y nueve nominaciones adicionales, además de obtener el globo de Oro a Mejor película y el Osos de plata a mejor actor para un Sidney Poitier, dejando a un también excelso Curtis con la única nominación al Oscar en su carrera. La impresión de suspenso es destacable y parte de lo impredecible de dicha química racial.