Living in the material world: un documental lleno de misticismo

“Beware of darkness…”

George Harrison

 

Martin Scorsese es el mejor director vivo de cine. Sabemos que sus mejores películas ya han sido cosas del pasado, sin embargo su trayectoria y lenguaje cinematográfico no deja de sorprendernos. Amante del rock clásico estadunidense, Marti siempre ha tratado de retratar de manera honesta el rock y la relación con el celuloide. En este último trabajo, Scorsese nos demuestra cómo se pueda narrar de manera lineal y con una buena música de fondo la vida de uno de los músicos y guitarristas más importantes de los inicios del rock como futuras estrellas e iconos de la cultura pop: George Harrison.

A través de un largo documental (208 minutos) el director Neoyorkino nos muestra las peripecias de Harrison en sus inicios con The Beatles y su ascendiente fama, que conllevaba un cambio profundo en la manera de sentir y vivir del guitarrista de uno de los mejores grupos de rock de todos los tiempos.

Las entrevistas son formas narrativas

El documental no se mete en vericuetos narrativos y su forma sencilla de narrar la historia es su máxima cualidad. Por medio de las entrevistas de conocidos y amigos del guitarrista de Here como the sun, el documental se desplaza cómodo entra las anécdotas y los sentimientos de los involucrados. Desde un Paul McCartney ya entrado en años, un siempre honesto Eric Clapton y hasta una aun bella Pattie Boyd nos comparten la etapa de la fama y los excesos del cuarteto de Liverpool hasta la epoca mística de Harrison y sus encuentros con el hinduismo y su filosofía de vida. Una etapa interesante de la vida de Harrison es aquella en la cual se relaciono con los Monty Python en especial Terry Gilliam y su gran involucramiento en los proyectos humorísticos de estos comediantes ingleses.

Sin embargo, para los amantes de los Beatles (a los cuales me incluyo) el documental no aporta algo nuevo en el sentido de alguna información más allá de algún enfoque diferente en las entrevistas con respecto a la vida de Harrison. Aunado a que el documental, dividido en dos partes es sumamente largo y en ocasiones, por el estilo que Martin escoge para mostrarnos la vida de Harrison, cansón y de difícil acceso de entretenimiento. Se podría catalogar como un documental biográfico denso, que para los no acostumbrados a los documentales fílmicos, se les hará muy tedioso y largo.

Los mejores momentos del documental

Sin lugar a dudas los relativos al cambio espiritual de Harrison con su inclusión al hinduismo. De la misma manera sus esfuerzos por tocar y comprender un instrumento extraño como la Sitara. El concierto por Blangadesh y sus aportaciones altruistas. La formación del Grupo Travelling Wilburys junto con otras leyendas del rock. Y para los amantes de los chismes de la farándula y el estilo amarillista, la relación entre Harrison/Clapton como mejores amigos y la bella Pattie Boyd como musa inspiradora de ambos músicos.

¿Hay que verlo? Definitivamente para aquellos amantes de los documentales. Aun creo que se puede ver en la gira de documentales Ambulante.

Sin más, les dejo esta bella canción de unos de los mejores conciertos de beneficencia antes de todas las payasadas de festivales altruistas que se implementaron mas como negocio que como una ayuda real.

http://youtu.be/QBxbWkf4z-E

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