Mank: El inofensivo y frívolo regreso del Ciudadano Fincher
Quizá no haya un mejor dicho que el de “mucho ruido y pocas nueces” para describir los resultados generales del “esperado” regreso de David Fincher, en la que se supone es la favorita para las próximas entregas del Globo y el Oscar de 2021 (postergadas a febrero y abril respectivamente); y es que a pesar de la ineludible perfección visual y de producción que rodea a la “biopic” del prolífico y polémico guionista de Citizen Kane, Herman J. Mankiewicz , su propuesta narrativa y actoral es tan plana y sobrevalorada como quizá también es el producto en el que se basa: la epopeya de Orson Welles ¿Demasiado impetuosa esta afirmación? Veamos…
Sin duda la mayor virtud de Mank es también su mayor defecto: Hacer relativamente interesante una historia totalmente irrelevante a través de un objetivo más pasional que fílmico, al Fincher honrar el guion escrito por su difunto padre. Sin embargo creo que a pesar de su solemnidad, David tal vez apretó o desapretó de más las tuercas de dicho libreto (nunca lo sabremos), y es que en realidad esta no es una película sobre “Mank”, sino sobre la escritura de un guion de Mank. Para explicarme mejor, no sé si lo notaron, pero Mank es solo un vehículo para dicha historia, un vehículo – personaje sin estructura previa, nexo o trasfondo emocional que pueda justificar su trágico alcoholismo, relaciones o modus operandi dentro de la industria hollywoodense más que la que Fincher se digna en mostrar y la audiencia en “aceptar”. Y es por eso que esa solemnidad se convierte en una constante y frívola artificialidad ¿Duro de aceptar verdad? ¿Será una maldición de Citizen Kane o solo una repetición de la misma precisa razón por la que la excelente película de Welles quizá no sea la joya que todos claman que es? (se tenía que decir y se dijo).
Por otro lado (y síganme en el siguiente cuestionamiento) ¿no se supone que la historia sobre el proceso creativo de un guion basado en un personaje real, debe tener al menos un sustento veraz que justifique el porqué de la denuncia de Mank al “ciudadano periodista” caído en los manjares del capitalismo? Si bien lo recuerdan, el guion de Kane está basado en el origen, ascenso y caída del empresario y magnate de la prensa, William Randolph Hearst (interpretado por Charles Dance), que aquí se muestra también como un importante allegado y productor a los quehaceres comerciales de la industria fílmica. Fincher decide ahondar en la relación de Hearst con el cine, pero nunca en la relación o afectación del mismo hacía con Mank, forzando así un “motivo” artístico que luce inexistente incluso en la pobre escena de su clímax. Esto se multiplica al no ahondar en el propio Mank, dando mayor relevancia al entorno que a la construcción o exploración del mismo personaje.
A pesar de todo esto, la muy particular magia de Mank radica en la propia dirección y sus actores. Fincher intenta por todos lados hacer lucir a sucinta con el agregado de ciertos personajes y elementos de ficción que agregan interés fuera del motif principal. Estas interacciones externas hacía con el “proceso creativo” agregan sustancia a su personaje (por ejemplo la relación con el personaje de Lily Collins, la escena alrededor del suicidio o incluso la propia relación con Welles), permitiendo un mayor ritmo en la narración y convirtiendo a la misma en un viaje de un solo pasajero: Gary Oldman.
Oldman como es de costumbre, hace una impecable actuación en este híbrido auto destructivo y regenerativo que fue “Mank”, abordando su personaje con mucho carisma y a la vez complejidad. Lástima que muchos no le pueden equiparar, culpa de un guion (que no repara en estructurar ni siquiera a Mank, pues mucho menos a los secundarios), pero también de un reparto que desde un principio se notaba muy desequilibrado a su talento (empezando por Collins y Amanda Seyfried, y siguiendo con el desperdicio de Arliss Howard y el mismo Dance). Quizá la pieza actoral más significativa además de Oldman sea la inclusión de Tom Burje como Orson Welles, razón por la cual y fuera de toda casualidad, su secuencia juntos es la más relevante, emocional y atractiva del film.
Irónico es pues que una película sobre la escritura de guion cojee de su guion. Fincher intenta honrar a su padre sacando sus mejores armas directivas con mucho y a la vez nada que contar. Quizá hubiera valido más la pena explorar “a convencionalidad” el pasado de su personaje, humanizarlo y llevar a esta película a un puerto más amigable como la “biopic” per se, pero la intensión de David era otra: ¿exhibir el sistema corrupto de los estudios desde sus inicios? ¿Hacer una carta de amor paternal? ¿Lucir al Hollywood clásico para satisfacer por fin al Oscar? ¿Relatar la historia (incompleta) de uno de las figuras más enigmáticas del cine? ¿Contar la historia entre la relación de Mank y Welles? ¿Gustar a Oscar y en el proceso criticar el modus actual fílmico y apoyar a Netflix? ¿Ahondar sobre un proceso creativo destructivo y petulante? Todos ellos se cumplen, pero como dice otro dicho que puede encajar a la perfección con este regreso: “El que mucho abarca, poco aprieta”. Así igualito, igualitito que Citizen Kane.
4 Comments
Hijole estimado, para nada de acuerdo con sus contundentes afirmaciones sobre la película de Orson Welles. Citizen Kane es una verdadera JOYA, un revulsivo narrativo a la hora de contar historias en el cine y con una dirección revolucionaria y extraordinaria aún en día (aún me sorprende lo buena que es).
En cuanto a Mank estoy de acuerdo con su reseña. Toda la perfección técnica de la cinta está para tapar un producto bastante artificial y carente de emoción al no tener una estructura previa de sus personajes, por lo que la empatía es muy difícil de obtenerla. Realmente me decepcionó, pensé que iba a ser como la obra maestra de “Ed Wood”, que es una cinta visualmente hermosa, pero también muy bella y emocionante en su narración.
Creo que no estará de acuerdo en tonces en mi TOP 1 de sobrevaloradas estimado jajajaja
Es un show sobre nada, la mejor forma de describir esta historia. En más de una ocasión sentía que me estaba durmiendo porque la dirección es tan plana que da la sensación de que no pasa nada (y el propósito de ver la escritura del guion ni siquiera aparece, pues sólo se ve por un par de escenas y luego, de la nada, sale ya terminado). Las intenciones están ahí, pero se siente como otra carnada para Óscar… igualito a Benjamin Button, la diferencia es que esa al menos contaba algo y se comprometía con ese relato hasta el final.
Hablando de eso, ¿no le parece irónico que, en estos intentos para las ceremonias de premios, a Fincher sí le salen los finales que en sus mejores obras no logra?
3/5.
Mi ranking de David Fincher
1. Zodiac (intercambiable con Seven por el primer lugar)
2. Seven (intercambiable con Zodiac por el primer lugar)
3. Social Network
4. Gone Girl
5. Fight Club
6. Girl with the Dragon Tatoo
7.Benjamin Button
8. Mank
9. Panic Room
10. Alien 3 (no la he visto, ¿pero en verdad es necesario para saber dónde ubicarla?)
No he visto The Game, así que no puedo calificarla.
Exacto estimado, no pudo haberla descrito mejor, la fábula es sobre nada y Fincher se pierde en su solemnidad