Las 5 Mejores Películas de Marilyn Monroe
Si bien, Marilyn Monroe, es mundialmente reconocida por su condición de sex symbol y múltiples escándalos, también es cierto que su parte actoral ha pasado casi por la sombra. Común es que se conozcan sus fotos en playboy, sus romances con los hermanos Kennedy o reconocer su tan imitada cabellera platinada; pero fuera de esto no debemos pasar por alto su carrera como actriz, que si bien no resultaba excelsa ni galardonada, no cabe duda que su presencia en los años dorados de Hollywood nunca pasó inadvertida, teniendo dentro de su acervo cinematográfico un par de cintas dignas del recuerdo y con las que compartió créditos con otros grandes histriones de la época. Además, no sobra aclarar que tan sólo 30 películas bastaron para convertirla en un ícono indeleble dentro del cine y la cultura popular casi imposible de igualar en nuestros días.
Aquí las 5 mejores películas de la gran diva de Hollywood.
Bonus – Monkey Business (Howard Hawks, 1952)
Cinta cómica protagonizada por Cary Grant y Ginger Rogers pero con una actuación secundaria muy interesante de Marilyn Monroe. Fue la primer película en la que tuvo uno de los roles principales, pues en cintas pasadas tenía papeles muy menores en los que si bien resaltaba, su tiempo en pantalla no era suficiente para destacar su actuación. Su rol es como la ingenua secretaria del jefe del químico Barnaby Fulton (Cary Grant), quien busca la fórmula de la eterna juventud pero tras una serie de enredos, termina ingiriendo una solución no probada anteriormente y por la que pasará por grandes líos a causa de su reacción en él. Una película enteramente cómica en la que vemos a los protagonistas vivir las consecuencias de los experimentos y descuidos del atolondrado químico, pues los efectos de la fórmula se resumen en disminuir como 20 años su estado mental. Una propuesta de lo más entretenida en la que también hubiese sido bastante atractivo ver a Monroe en el rol principal.
5. The Misfits (John Huston, 1961)
Última cinta que Marilyn finalizó y probablemente la mejor actuación de la rubia en su carrera; esto tal vez como consecuencia de una identificación con el papel que interpretaba en la mayor etapa de crisis de su vida (moriría poco tiempo después de finalizar la filmación), trastornada y tormentosa como el personaje mismo, pues la historia relata la vida de Roslyn (Marilyn Monroe) una mujer recién divorciada que conoce a dos chicos con los que se va de vacaciones a una cabaña en el campo para tratar de empezar una nueva vida. La situación se pone intensa cuando ambos se enamoran de ella y además aparece un tercer caballero, esto mismo mientras tratan de capturar una manada de caballos salvajes por los alrededores para vender su carne.
Salida de su encasillado molde de la chica dulce e inocente, Marilyn interpreta a un personaje sensible pero desgarrado por experiencias pasadas, atormentado y con una clara influencia marcada por su propia personalidad y situaciones íntimas: una chica hermosa pero obsesionada un poco por no poder encontrar el verdadero amor. La verdad es que todos los personajes son unos atormentados (de ahí el nombre del filme, claro está), así que tendrán que lidiar de la misma manera unos con otros: egos, frustraciones y el deseo de cariño mutuo. Una película con aire nostálgico en la que Marilyn Monroe comparte créditos con grandes actores (casual, pues) como Eli Wallach, Montgomery Clift y Clarck Gable, la cual también sería su última película.
4. How to marry a Millionaire (Jean Negulesco, 1953)
Cinta romántica de los 50’s protagonizada por 3 estrellas de la época. Lauren Bacall encabezando este trío escapando un poco del género al que tenía acostumbrado al público en ese momento, la pin-up girl Betty Grable y Marilyn Monroe completan el reparto como dos chicas ingenuas y poco inteligentes de bajos recursos que junto con el personaje de Bacall, se amañan para conseguir un penthouse en lugar bien nice para conseguir un marido bien. Básicamente es eso, un grupo de mujeres wanna be rich intentan conseguir un esposo millonario en Nueva York que las saquen de pobres (The American Dream), pero puede que se den cuenta que al final el dinero no es lo más importante. Una premisa de lo más superficial y descarada pero bastante amena y diferente del tono “chica pobre y buena que se queda con el rico”. Una comedia romántica dominguera que cuenta con un cast muy atractivo y con personalidades diferentes que hacen buena química en pantalla.
3. The Seven Year Itch (Billy Wilder, 1955)
Aunque no lo mejor de Wilder, esta cinta terminó de posicionar a Marilyn Monroe como una seductora definitiva, pues en el filme no tiene otra labor que exponer su belleza y encantos al máximo “disfrazándolos” con una inocencia que engaña al soso protagonista. La historia trata sobre las inquietudes en las que se ve envuelto Richard (interpretado por Tom Ewell) al quedarse en la ciudad por cuestiones laborales mientras su esposa e hijo se van de vacaciones de verano. Y es que este individuo atraviesa por una etapa peculiar en la vida de todo hombre (ay, ajá…) llamada ‘la comezón del séptimo año’ en la que fantasea demasiado con otras mujeres; la situación se pone intensa cuando conoce a su nueva vecina (cuyo nombre nunca es revelado), una hermosa y tierna modelo con quien desarrollará una peculiar “amistad” llena de circunstancias cómicas y enredosas auspiciadas principalmente por la imaginación de don jarioso.
Cabe resaltar que esta película es la que contiene la tan famosa y polémica (en su tiempo) escena en donde el vestido de Marilyn es levantado por una corriente de aire proveniente de unas rejillas de ventilación de la calle, momento favorito para ser parodiado e imitado en infinidad de ocasiones. La verdad es que el cierto brillo de la cinta se lo debe particularmente a Miss Monroe que en cada escena desborda la sensualidad y belleza que el simple personaje requiere, encanto del que Ewell carece y por el que su personaje se vuelve en momentos exasperante. Una película que no es la típica comedia romántica pero resulta un must watch dentro de la corta carrera de la actriz.
2. Gentlemen prefer blonds (Howard Hawks, 1953)
Cinta musical de principios de los 50’s cuyo tema principal e icónico “Diamonds are a girl’s best friend” nos cuenta el argumento de la historia. Y es que de nuevo Marilyn Monroe interpreta a Lorelei Lee, una chica inocente pero a la vez muy interesada que busca casarse con un millonario solo porque ama las joyas y la buena vida (¡sólo por eso!). Para esto deberá viajar en barco hacia París junto con su mejor amiga y compañera Dorothy (Jane Russell) para encontrase con su futuro esposo, pero lo que no sabe es que el papá de este le ha tenido una trampa para descubrir que ella es sólo una mujer codiciosa. Así se verán envueltas en varios líos para tratar de encubrir su engaño mientras de Lorelei también le quiere encontrar un hombre rico a su gran amiga.
Pocas veces encontramos una situación tan desvergonzada y superficial tan encantadora a la vez, y es que los tonos cómicos de la cinta son en verdad muy divertidos y espontáneos, todo esto aderezado con una gran actuación musical de Monroe que no por nada se convirtió en una referencia en este tipo de películas. Además, las personalidades contrastantes de ambas actrices protagonistas resultan bastante atractivas en un compendio de buen diálogo, dirección, fotografía y música.
1. Some like it hot (Billly Wilder, 1959)
Billy Wilder dirige de nuevo a la actriz en esta fabulosa comedia de 1959, en la que sí, una vez más, la diva interpreta a una chica dulce e inocente pero esta vez acompañada por dos grandes histriones de la época: el galán de Tony Curtis y el carismático y divertido Jack Lemmon. Juntos protagonizarán una hilarante historia cómica y romántica, al involucrarse involuntariamente estos dos chicos, llamados Jerry y Joe, como testigos de un crimen al presenciar el acto. Entonces se verán obligados a huir para no ser asesinados y lo harán haciéndose pasar por dos chicas de una banda para disimular el asunto. La situación es que ahí conocerán a Sugar, una linda y tierna chica de la que Joe quedará flechado pero que su condición de “mujer” le dificultará la conquista de la esta.
Ahí es dónde ese encuentran los grandes dotes de la cinta, las situaciones por las que se ven envueltos ambos amigos para escapar de los mafiosos que los persiguen, al mismo tiempo que uno de ellos busca enamorar a la joven. Los actores muestran una genial química en pantalla que se ve reflejado al momento de hacernos reír con cada una de las ocurrencias (principalmente solventadas por Lemmon) pero en las que sobretodo Marilyn Monroe se muestra natural y encantadora, en uno de sus mejores papeles en el cine pero definitivamente la mejor cinta que protagoniza. Mi imperdible favorita de la actriz.