Oscars 2020: Predicción Mejor Dirección
Un británico con las memorias de su abuelo; un coreano exhibiendo la toxicidad de las clases sociales; un italoamericano desmenuzando una fábula gánster; un Tarantino llevan su teatralidad a los 60’s; y un neoyorquino jugando a ser Scorsese pero pintado de payaso. 3 previos ganadores, un novato y uno que anda aquí gracias a Joaquin y a Batman ¿Quién se llevará el Oscar a la mejor dirección?
El Favorito: Sam Mendes (1917)
Premios acumulados: Globo de Oro, el reconocimiento del gremio de directores y el de 8 círculos de la crítica
Experiencia Oscaril: Victoria previa en este rubro por American Beauty (1999); además este año también compite por película (como productor) y guion original.
Pronóstico: Un claro ejemplo de como una poderosa dirección incluso puede opacar su relato, Mendes se engolosina con el propósito de crear la más grande épica visual bélica ¿y saben qué? Quizá lo logró (habrá que preguntarle a Coppola), con un poderoso falso plano secuencia (de al menos 18 cortes) donde el británico despliega todo su talento y excelsos artilugios técnicos. La concentración es clave en la comunión con sus actores, los cuáles siempre entendieron que esta es la visión de Mendes, y no la vivencia de sus personajes. El Oscar está en el bolsillo.
El extranjero: Bong Joon-ho (Parasite)
Premios acumulados: El reconocimiento de 26 de los círculos de crítica
Experiencia Oscaril: Debuta en la ceremonia con 3 nominaciones, repitiendo en guion original y en película (como productor)
Pronóstico: Sería una sorpresa muy grata pero también muy extraña dados los estándares hollywoodenses y las estadísticas en su contra con el gremio de directores a favor de Mendes, pero tras su victoria en los SAG, Parasite cuenta con la bendición del gremio más numeroso de Hollywood… los actores ¿será? Merecido de igual forma, el coreano infla y exprime la tensión de un lapso a otro, cambiando el tono de su relato de manera soberbia. De sátira a suspenso, de suspenso a thriller, los cambios de registro obedecen a la excelsa dirección del Bong.
El eterno segundón: Martin Scorsese (The Irishman)
Premios acumulados: El reconocimiento de 8 círculos de crítica
Experiencia Oscaril: Una victoria en esta categoría por The Departed (2006), además de 11 nominaciones; 7 como director por Raging Bull (1980), The Last Temptation of Christ (1988), Goodfellas (1990), Gangs of New York (2002), The Aviator (2004), Hugo (2011), The Wolf of Wall Street (2013); 2 como guionista por Goodfellas (1990) y The Age of Innocence (1993); y 2 como productor por Hugo (2011) y The Wolf of Wall Street (2014); este año también repite como productor.
Pronóstico: Como casi siempre pasa, las nominaciones de Scorsese son anecdóticas, apuntando a la estadística y leyenda de genios incomprendidos por el glamour e hipocresía de Hollywood. ¿Ustedes creen que el impecable relato narrativo – técnico – directivo de esta grandilocuente fábula gánster tiene alguna posibilidad de ser premiada cuando Scorsese mandó al carajo a las productoras yéndose con Netflix y en ese inter se atrevió a ofender a la gallina de huevos de oro de Hollywood? ¿Qué importa un Oscar en los últimos 20 años? Casi nada, siendo en ocasiones las menciones más enriquecedoras que los tendenciosos(as) ganadores.
El metido: Quentin Tarantino (Once Upon a Time in Hollywood)
Premios acumulados: El reconocimiento de 4 círculos de la crítica
Experiencia Oscaril: 2 Victorias previas en la categoría de guion por Pulp Fiction (1994) y Django Unchained (2012), además de otras 3 nominaciones previas, dos en esta categoría por Pulp Fiction y Inglorious Basterds (2009) y una como guion también por esta última. En esta edición también repite por guion y por película (como productor)
Pronóstico: La teatralidad y minuciosidad de nuevo dan frutos en otra especie de auto complacencia irónica por parte del extrovertido director. Y es que lo chistoso es que lo mejor de Once Upon a Time quizá se encuentre en la dirección y no en su guion, siendo en este último apartado donde se le regalará el Oscar sin merecerlo. Es gracias a esos detalles sobre planos secuencias claustrofóbicos y en donde el director hace gala de sus elementos fijos tales como mesas, sillas, autos, salas y bares, que la dirección saca a flote su polémica preferencia entre algunos sectores del público y/o la crítica
El copión: Todd Phillips (Joker)
Premios acumulados: Ninguno
Experiencia Oscaril: Una nominación previa en la categoría de guion por Borat (2007); este año repite en guion y película (como productor)
Pronóstico: Doble nominación para Scorsese en la misma categoría ¡Wow! No, ya en serio, Todd no lo hace mal, pero está aquí por ver mucho Taxi Driver y The King of Comedy y literalmente copiar el estilo directivo y visual (su nominación más justa en fotografía lo avala) de las cintas de Martin ¡Vaya tío joder! Astucia y soporte en la actuación de Phoenix, para algunos de nosotros Todd seguirá siendo el que dirigió las 3 partes de la cruda cómica. Este lugar era de Gerwig, de Mangold,de los Safdie, de Waititi o de un largo etcétera.
La que faltó: Greta Gerwig (Little Women)
Premios acumulados: Solo un círculo de crítica
Experiencia Oscaril: Dos nominaciones previas por Lady Bird (2017) en guion y dirección. En esta edición cuenta con su nominación en guion adaptado.
Lo que me sorprende aquí es que siendo Hollywood tan “progre”, los votantes hayan dejado a fuera al símbolo femenino directivo de moda con toda la fortaleza y argumentos para competir realmente en la quinteta por encima de Phillips y hasta posiblemente de Tarantino. Gerwig de nuevo ejemplifica de manera perfecta lo que es una buena dirección, agregando su estilo visual y técnico (esos característicos travelings son exquisitos) a una obra que literalmente convierte en “su adaptación”. Una lástima, y es que la narración de Gerwig a estas alturas ya supera a su compañero estudiante Noah Baumbach o hasta a su maestro de estilo Woody Allen.