Red Notice: Otro bodrio de acción de Netflix con tres bonitas rocas
Tres actores atractivos y en el pináculo de su popularidad. Una trama de acción, intriga y comedia. Locaciones en algunos de los lugares más bellos del mundo… ¿Qué podría “malir sal”? Todo y nada, según el cristal con que se mire.
Y es que en medio de tanto “Tragedy Porn”, “cancelaciones” de artistas por ser vocales en sus opiniones, mucho director “gangsta” con películas artificialmente “transgresoras” y una industria severamente afectada por la pandemia, lo que necesitábamos era precisamente entretenimiento sin pretenciones además del goce durante unos minutos. Dejar el cerebro en casa, pues…aunque aquí exageraron.
De qué va?
Piezas de arte invaluables están en la mira de connotados delincuentes especializados en el rubro y corresponde al intrépido y musculoso agente especial Hartley darles caza y asegurar que dichos artefactos se conserven seguros. Por supuesto, las cosas no son lo que parecen.
Actores En Su Juego
Gal Gadot, Ryan Reynolds y The Rock se interpretan a sí mismos sin el menor disimulo. Reynolds en especial parece no haberse enterado de que no está en set de Deadpool y Gal Gadot está instalada en su look de femme fatale. The Rock, pues es The Rock.
Los diálogos e interacciones resultab insufribles. La necedad de tener personajes bocones, que no se callan no callandose, llega a hartar los oídos. La acción es aceptable pero nada realmente emocionante. Los giros de tuerca resultan, eso sí, inesperados, haciendo la trama menos predecible pero en conjunto resultan poco novedosos. Por otra parte, la química entre los protagonistas brilla por su ausencia. Se trata del “bromance” más forzado de los últimos años.
Cliché Elevado A Arte
Básicamente todos, y quiero decir TODOS los clichés del cine de espionaje/policiaco/de acción están ahí: la pareja dispareja del policía bueno y malo, la mujer hermosa, gadgets y McGuffins, paseos por todo el mundo (turístico, eso es), hazañas que desafían las leyes de la física, referencias a civilizaciones y guerras antiguas y blah, blah, blah…
Los buenos, unos genios. Los malos, tontos y extravagantes. Las agencias gubernamentales, torpes y estorbosas. Las locaciones de postal y el humor de pastelazo. Nada nuevo bajo el sol…
Pero, entretiene?
Si bien se trata de una comedia, el asunto raya en una mal ejecutada auto parodia. Nada, pero nada es memorable salvo la inhumana belleza de Gal Gadot (a quien malditos carajos se le ocurrió ponerla como la Reina Malvada, celosa de la belleza de la muchísimo menos agraciada Rachel Zegler? No mames, Disney…)
Hay que verla?
En efecto, hay quienes estamos cansados de tanta basura progre y agendas ideológicas y deseamos cine para escapar, pero aquí exageraron en aquello de no pensarle demasiado. Para un domingo sin nada más que hacer