Studio 666: Una celebración al rock y al terror
Studio 666 no es para tomarse en serio. Basta ver escasos segundos del trailer de la película para darse cuenta de lo que va todo el asunto. Así que no debería resultar una sorpresa enterarse que esto se trata de una parodia y no hay que buscarle 3 pies al gato, la famosa banda de rock quería pasar un buen rato y filmarlo mientras lo hacía.
La premisa es sencilla, Foo Fighters necesita grabar su décimo álbum de estudio y para ello se aísla en una misteriosa casa que envuelve uno que otro secreto.
Por un lado tenemos a una de las bandas de rock más emblemáticas de los tiempos recientes y por el otro, unos claros fanáticos del género del terror. Studio 666 se aprovecha de las cualidades roqueras de sus figuras para mezclarlo con obvias referencias de grandes cintas de terror como Evil Dead, The Exorcist, y hasta podía decirse que todo el género slasher, burlándose de los clichés de estas para crear una imitación tan caótica como hilarante.
Foo Fighters juega con sí mismo, con el rock y cada uno de sus integrantes mientras Dave Grohl es el indiscutible protagonista. No solamente funciona como el líder del grupo y el eje central de la trama, el rockero es un despliegue de carisma demasiado gracioso como para no darle el crédito que merece (no como actor, sino como figura paródica y cómica). Sus compañeros, por su parte, funcionan como los típicos personajes de relleno cuyo final es predecible tal adolescentes en un slasher cualquiera (de actuar no saben nada y poco que lo intentan).
Eso sí, extrañamente, al filme le falta más música, aunque este elemento está presente incluso dentro del argumento, creo que la banda pudo explotar este recurso generando además canciones originales que confabularan de manera ideal dentro de la narrativa, añadiendo este extra musical que se esperaría de tan prestigioso grupo musical.
Creo que no basta con ser fan de Foo Fighters para que guste la película. Hay que entender que es un total disparate y que no busca ser tomada en serio, solo divertir y ya. Es por eso que recomendaría (en una de esas pocas ocasiones) ver el trailer antes de decidir verla pues este refleja la total esencia de la película.
Studio 666 es posiblemente el capricho de unos rockeros fanáticos del terror que en un día de copas decidieron protagonizar su propia película. Cumple con su premisa de fábula absurda que entretiene y saca risas y ahí no hay nada que reprocharle.
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