¡Te cortaste tus trenzas Chachita! Adiós a Evita Muñoz
Se nos fue nuestra Chachita, la mujer que con sus trenzas tejió y unió a Nosotros los pobres y Ustedes los ricos. La niña de Pepe, “El Toro” y “La Chorreada”, el eterno amor del “Ata” que con su ternura e inigualable carisma, cambió por completo la actuación femenina en nuestro cine mexicano.
Eva Muñoz Ruiz no parecía un nombre digno de su candidez y calidez, por eso y porque desde los
4 años empezó a trabajar como actriz en la película ¡Ay Jalisco, no te rajes! que la niña Eva pasó a ser Evita, la muchachita, Chachita, pues.
¿Qué cómo entró en el mundo de la actuación? Su padre era actor y cantante, Don Francisco «Paco» Muñoz. A partir de su primera película, le seguirían alrededor de 60 más, series y telenovelas como: “Nosotros los Gómez” (una fabulosa parodia de la película que la catapultó pero con todo el espíritu de los 80 donde hacía una excelente mancuerna con el “Pichi” Freddy Fernández, contando por las que tenía que pasar a su lado), Corona de lágrimas donde dio vida a una villana genial, Olga Ancira y la Hermana Carmela, en la interminable Mundo de Juguete.
No todo en su vida fue dulzura. Chachita siempre sufrió por su aspecto físico; en su juventud fue atacada por su sobrepeso y en varias ocasiones, su gordura se convirtió en el impedimento que le diera papeles estelares. Pero en 1984 hizo uno de sus papeles más divertidos y recordados, dando vida a la bruja más genial del universo, la mismísima Hermelinda Linda, cuyo éxito le valió repetir el papel dos años más tarde con Agente 0013.
En el 88 grabó una de sus actuaciones más fantásticas en la película “Día de las madres” donde reflejó ese absurdo de celebración con el que los mexicanos nos obsesionamos y terminamos por hacer de él, una auténtica aberración para nuestras progenitoras.
Chachita también hizo doblaje. En 2001 le dio voz a “Coco” uno de los personajes de la película animada Serafín. Actuó en un sinfín de obras de teatro e incluso hizo radio novelas; Aventuras de una niña y Del otro lado.
Ayer, 23 de agosto, con 79 años y toda una vida llena de incontables anécdotas, nuestra Chachita partió, pero a cambio, nos dejó una cadena para nuestro reloj, el mismo que nos reunirá a la hora que la citemos y podamos gozar de ella en la pantalla.
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