Tétrico Musical de Horror Presenta: “Little Shop of Horrors: Directors Cut”
Seymour Krelborn (Rick Moranis), es el encargado de una floristería que está a un paso de la quiebra, hasta que después de un extraño eclipse solar, descubre una peculiar y extraña planta que llegó del espacio exterior. Seymour la bautiza como “Audrey II” y después de un accidental corte en el dedo de Seymour, descubre que la planta tiene un singular apetito por la sangre que la hace crecer y crecer; pero todo cambia cuando la planta empieza a hablar y a exigir más sangre a tal punto de que convence a Seymour de que le lleve gente para poder matarlos y a cambio la floristería prospera y Seymour se convierte en todo una celebridad.
Estrenada en 1986 bajo la dirección de Frank Oz, “Little Shop of Horrors” es la adaptación cinematográfica de la comedia musical de Broadway del compositor Alan Menken (La Sirenita, Hércules) con letras de Howard Ashman (La Sirenita), que a su vez el musical está basado en una comedia negra de serie B escrita por Charles B. Griffith y dirigida por Roger Corman en 1960 en blanco y negro con un presupuesto de 30 mil dólares y que la filmación fue de solo dos días.
Con el paso del tiempo “Little Shop of Horrors” se ha convertido en toda una película de culto, con una historia sencilla y hasta un poco predecible pero en la que sus elementos cinematográficos la elevan como todo un referente para el cine de horror y musical, empezando por el trabajo de Menken y Ashman al tomar el guion original de 1960 y crear un musical del off-Broadway; un gran acierto es el coro de señoritas que funcionan como narradoras de la historia, algo que Alan Menken tomaría el mismo concepto para la película animada de Disney “Hércules”, además de combinar el típico rock and roll de los años cincuenta con melodías un poco melosas, como en el número musical de “Skid Row” o el leit motif y que funciona como intro de la película “Little Shop of Horrors song”. O en la canción donde Audrey sueña con una vida diferente y de ensueño llamada “ Somewhere that’s Green” Menken utilizaría la misma melodía y final de la canción para la película también de Disney “La Sirenita”. Cada número musical funciona a la perfección ya sea para presentarnos a los personajes, como lo hizo con la gran “Dentist Song”, uno de los mejores números al introducir al violento novio de Audrey, el dentista Orín Scrivello, interpretado por Steve Martin en uno de sus mejores papeles y lejos de lo que venía haciendo en el cine de los ochenta, todo un bully que le gusta infligir dolor a cada uno de sus pacientes, hasta que se topa con el personaje de Bill Murray, un paciente que siente un extraño placer por el dolor, la escena entre estos dos grandes de la comedia es sin duda de los mejores momentos.
Murray con ese monólogo y las gesticulaciones de su cara al ver cómo el dentista le muestra cada uno de sus herramientas una más dolorosa que la otra. Pero el que brilla en toda la película es nuestro protagonista, Rick Moranis es una de las figuras del cine ochentero por excelencia, desde su paso por Ghostbusters 1 y 2, la trilogía “Querida encogí a los niños”, “Spaceballs” o “Pequeños Gigantes”, Moranis entrega una vez más, un personaje desdichado y torpe, que sueña con tener una vida mejor y que a su vez está enamorado en secreto de su compañera de trabajo Audrey; y no olvidemos al villano en cuestión, esta planta venida del espacio con un solo propósito, dominar a la raza humana y que solo necesita beber sangre humana para crecer, y cuya voz fue del cantante Levi Stubbs vocalista de la banda de R&B Four Tops, Levi interpretó magníficamente la voz de esta singular planta, y con la canción “Fedd Me (Git it)” donde Seymour descubre que la planta puede hablar y donde ésta le convence de matar gente para poder comer.
Pero hablemos del final que todos conocemos y del final “alternativo”, y aquí es donde entra la diabólica figura del productor David Geffen, que obligó al director Frank Oz a cambiar el final original, esto contra la voluntad del propio director, de Menken y Ashman guionista y compositor original de la obra musical, en total fueron veinte minutos recortados de la película y en su lugar se agregaron tres minutos filmados a todas prisas y es el final que todos conocemos donde después del número musical “Suppertime” Seymour y Audrey deciden acabar con la planta, después del derrumbe del edificio, Seymour la electrocuta y la planta explota, la película tiene un final feliz donde Seymour y Audrey por fin tienen la vida soñada.
Pero gracias al lanzamiento en formato remasterizado de la película en Blu-Ray, salió con la versión del director, donde por fin vemos el final original, uno donde hace gala de todo el cine de serie B de los cincuentas y donde la película gana ese estatus de culto al ser una película musical de horror. En este final después del número musical “Suppertime”, Audrey muere después de que la planta intentó comérsela, en los brazos de su amado Seymour; y al intentar matar a la planta, Seymour es devorado por la misma, sin su dueño, Audrey II queda en libertad y el verdadero plan de la planta se pone en marcha, destruye toda la ciudad y el último cuadro de la película es el de la planta tomando la Estatua de la Libertad con una Nueva York totalmente destruida.
Con este final y con esta película Frank Oz logra consolidarse como un director de culto y separarse de lo que hizo a lado de Jim Henson con “The Dark Crystal” y su trabajo con los Muppets. Con un supuesto remake en puerta con el capitán America (Chris Evans) como Seymour, la viuda negra (Scarlett Johansson) como Audrey y Billy Porter como la planta “Audrey II” se espera que llegue en algún punto del 2021. Pero mientras eso pasa disfrutemos de este singular y muy buen musical de horror.