The Book of Boba Fett Capítulo 3: ¡Ya pónganle el maldito casco!
Todos los “warsies” hemos estado al tanto de las nuevas producciones Disney, pues desde la fatídica trilogía secuela que decepcionó a millones, el ratón busca desesperadamente ganarse el agrado del público de nuevo y gracias a Din Djarin y compañía, parece estar lográndolo. Pero hoy en día, es el turno de Boba Fett, pero parece que no todo va viento sobre popa, pues la serie no ha explotado como creíamos y hasta este episodio 4, todavía no hay algo que nos haga brincar de nuestros asientos y decir “j#der pero que buena serie”.
El episodio 4 de nombre “la tormenta que se avecina”, nuevamente nos adentra al pasado de Boba después de sobrevivir al temible Sarlacc. Este episodio, en resumen, se centra en como Boba conoce a la asesina Fennec Shand (Ming-Na Wen) y como recupera su tan apreciada e icónica nave, la Slave I. La realidad es que si hubo una marcada mejoría en el guion y en las escenas de acción a comparación del episodio pasado, pero vamos por partes…
El episodio tiene una duración de 48 minutos, de los cuales 30 minutos se enfocan en el pasado (y otros 5 en los créditos). La realidad es que esos 30 minutos, son hasta cierto punto “disfrutables”, sobre todo porque ya se empieza a hacer conexión con “The Mandalorian”, iniciando con Fett encontrando a una agonizante Fennec, después de que recibió un disparo en su abdomen por Toro Calica (acontecimiento que sucedió en el episodio 5 de la primera temporada de The Mandalorian). Boba entonces rescata a Fennec y la lleva a un ¿taller? a las afueras de Mos Eisley, y pues aquí se nos presenta un lugar de estilo “cyberpunk”.
Algo que no está gustando es la idea conceptual de un Tatooine cyberpunk lleno de pandillas, y chavos con vestimentas coloridas. Sobre todo, por que dista mucho del Tatooine que conocimos en la trilogía original, donde lejos de ser un lugar para que la chaviza se ponga bien loca, pues era todo lo contrario… era un lugar donde la juventud no tenía futuro, y tenía ese clásico estilo “western”, donde más bien, era un refugio de peligrosos criminales.
Aun así, la escena donde robotizan a Fennec, nos hizo recordar a la mano artificial de Luke en el episodio V. Total, Fennec y Boba se hacen buenos amigos, y empieza la misión para recuperar su nave. Los efectos especiales siguen siendo de muy baja calidad, pero mejoraron un poco en comparación a lo terrible que se vio aquella persecución de motos en Mos Espa del episodio pasado, pero aun así, esa escenilla donde persiguen un robotito es pésima. Por suerte, la escena de acción posterior no fue del todo mala, y aunque Temuera de plano ya no está para rodar escenas de ese tipo, fue rescatado por Ming-Na que se lució.
Boba recupera la Slave I y va al pozo de la nostalgia, que es ese agujero de Sarlacc donde Jabba the Hutt fue derrotado, buscando su apreciada armadura de beskar, sin ningún éxito. Posteriormente hubo una escena que aunque la calidad de los efectos volvió a ser mala, da regocijo a los fans al ver como Boba cobra venganza de la muerte de sus amigos Tusken, masacrando a la pandilla de motociclistas responsables y dejando entrever un poquito… sí, un poquito de la esencia de ese Boba Fett que todos conocimos en la trilogía original.
En los últimos 15 minutos del capítulo, damos el salto al presente y tenemos otra escena de acción y que tene como protagonista a Krrsantan (alias el Chewbacca negro), quien demostró lo feroz que puede ser un Wookie, y de cómo este recurso, salva el pellejo de una producción cuando se está desmoronando. En esta misma escena volvimos a ver a la siempre guapa Jennifer Beals quien interpreta a Gwarsa Fwip (y quien luce todavía más sensual que en el episodio 2). En esta escena, Gwarsa, menciona un poco del pasado de Krrsantan, personaje que es ajeno para los que solo ven las series y películas, pero no para los que leen comics. Y es que precisamente Krrsantan logró salir del “Pozo” gracias a la ayuda de nada más y nada menos que Luke Skywalker, haciendo que muchos de nosotros nos preguntemos, ¿en qué momento Boba se va a enterar de que el jedi que le desgració la vida, sigue rondando por ahí?
Krrsantan se une a Boba como un nuevo matón intimidante, y pues todo termina con la antesala del inevitable conflicto con los Pyke. Eso sí, con el final de este capítulo muchos habrán notado que sonó la clásica melodía de la serie de “The Mandalorian”, vaticinando la muy factible aparición de Din Djarin en la serie. ¿Será que nuevamente aplicaran la de soltar un cameo a propósito para disimular uno más grande? Tal como sucedió con Ahsoka, que fue la telonera de Luke. ¿Será que Din Djarin servirá para distraer al público de la venida de otro gran cameo (cof cof Han Solo)? Ya lo veremos más adelante.
Para cerrar, solo resta decir que el capítulo fue mucho más entretenido que el pasado y todavía El libro de Boba Fett no se cae por completo, aun así, no ha dejado de sentirse como una producción que parece una copia barata y de mala calidad de The Mandalorian, pero que habrá que esperar a ver su conclusión. En lo personal, yo insistiré en que por favor, ¡ya pónganle el maldito casco a Temuera! ¡Sí Disney! ¡Ya entendimos que es el actor que hizo de clon en el episodio II! ¡Ya te vimos! ¡Ya ponle el maldito casco!