The Danish Girl: Lo cursi le quita lo valiente
En los años veinte una joven pareja de artistas daneses comienza a destacar en Copenhague. Él, Einar Wegener (Eddie Redmayne) paisajista, y ella, Gerda Wegener (Alicia Vikander), ilustradora de modas. La carrera de Gerda comienza a quedar estancada por su condición de mujer, por lo que busca quién le abra las puertas en París para ir en busca de mejores oportunidades. Casi por accidente, su esposo se presta a sustituir a la modelo de Gerda, iniciando con el contacto de las prendas femeninas el despertar de la mujer que vive dentro de él, Lili Elber. Las pinturas de la misteriosa mujer resultan el pasaporte al éxito para la joven pintora.
Basada en la novela homónima de David Ebershoff, Lucinda Coxon hace la adaptación del guion inspirado en hechos reales que habla de una de las primeras mujeres transgénero de la historia.
“Era como un ser humano obligado a llevar un traje que me constreñía y en el que me sentía ridícula”
Lili Elber 1931
¿Qué le salió mal a “The Danish Girl”, si tenía todo para brillar? Veamos, tuvo un buen director, Tom Hooper (The King’s Speech), que logró imprimir en ella la elegancia, el buen gusto que destacan en diseño de producción y vestuario, además de una brillante selección de personajes. Tuvo un actor maravilloso, Eddie Redmayne, con un reluciente Oscar en mano y a la hermosa revelación sueca Alicia Vikander, quien sorpresivamente fue la que vino a darle el peso emocional a la cinta. ¡El guion! Siempre es el maldito guion.
¿Y qué le faltó al guion? Alma, vida, reflejo de un sentimiento que te oprime las entrañas y que grita por liberarse. Le faltó hasta esa dosis de escándalo que puede hacer voltear los ojos a los seres que están dispuestos a dar la vida por liberar a la mujer o al hombre que llevan dentro cuando a la naturaleza le da por equivocarse.
Puedo decir que The Danish Girl es sutilmente sentimental, por no decir que es cursi en extremo. Entiendo la idea del director de seguir una línea de delicada belleza, pero no justifico la ausencia de la valentía y el coraje que se requiere para defender la libertad.
Todavía no termino de digerir el trabajo de Redmayne, sin duda lo hizo bien, bien a secas es mi primera reacción. Sus rasgos andróginos le fueron de mucha ayuda para el papel. Me gustó su mirada coqueta y seductora cuando se mira a sí mismo, perdón, así misma. Pero a mí parecer, no logró transmitir la frustración de Lili; Vikander hizo un mejor trabajo con la frustración de Gerda, esas lagrimitas, esa mirada inconsolable ¡no mi niña, ven que te voy a cuidar más que a mis ojos! ¡Ah no! Por ahí no era. Perdón.
La historia daba para mucho más, y no lo digo sólo por el tema de la valiente trasformación de Einar a Lili, cosa que requirió cinco cirugías experimentales que incluyeron trasplante de ovarios y matriz. Tampoco lo digo por la problemática sexista que en su momento afectó más a Gerda que a Lili, lo digo por la maravillosa historia de amor y amistad entre Lili y Gerda que echaron por la borda, dejando a “La Chica Danesa” en un cuento cursi cuando pudo ser una memorable historia de arte, belleza y valentía.
6 Comments
¡Vaya, pues yo que tenía mejor opinión de esta peli viendo los nombres de su director e intérpretes! Pero si el grado de cursilería es como el que denuncias, no sé, no sé si acercarme a verla, pues por otro lado como bien dices también aunque cursi también tiene su lado valiente. En fin, no sé. Lo que está claro es que tu reseña ha servido para movilizarme ante ella y mañana viernes lo mismo cae esta chica danesa.
Un beso
Me gusta pensar que todas las películas tienen “algo” por lo que vale la pena verlas, muchas veces no es así, pero en este caso si tiene un par de cosas rescatables. La desilusión para mí viene porque le restaron valor a la historia de Lili Elber y de la misma Gerda con las cuestiones de género. Le faltó la fuerza y la pasión que pueden imprimir las películas Queer…las buenas! Gracias por comentar y gracias por el beso!
Será porque el cliché del personaje que lucha contra todas las adversidades y sale avante ya fue demasiado explotado y es muy predecible? tal vez el director no quiso usar este mismo cliché para diferenciar su pelicula de las demas?
Pero por otro lado tienes razón, no debio abaratar su obra con solo cursilería así como tampoco utilizar el cliché del tipo triunfador; debio mostrar los problemas psicológicos y existenciales a los que una persona se enfrenta cuando toma la decision de hacer este cambio de genero.
Pero como es solo mi opinión le mando un saludo.
Creo que de ese cliché vamos a seguir viendo mucho, esas historias de vencer a la adversidad a todo el mundo le gustan, además de que son muy “Oscarizables”. Muchas gracias por dejar tu opinión. Saludos!
Yo no salvaría ni la actuación de Redmayne, hace un par de años Felicity Hoffman actuó y logro una nominacion por la película Transamerica, ella hacia el papel de un transexual que buscaba su operación para convertirse en mujer, en otras palabras, en la vida real una mujer haciendo el papel de un hombre que quiere ser mujer. Esa si fue una buena actuación, al ver de nuevo a Hoffman te das cuenta de lo caricaturesca y cliche que es la actuación de Redmayne.
Si hay algo que se salva de esa pelicula es Vikander que con una actuacion totalmente opuesta a su coprotagonista se roba la pelicula.
Tienes razón, comparado con Hoffman, Redmayne no tiene nada. También me gustó el papel de Alicia Vikander, sin embargo, sigo culpando a lo enclencle del guion por el fracaso de esta cinta que pudo ser muy buena. Los dos actores podían haber llegado a más. De Vikander podemos esperar mucho más que su belleza, ojalá este año la veamos de nuevo. Gracias por comentar. Saludos!