The Watchers: ¿Pero qué carajos acabo de ver?

Esa fue la pregunta que me hice tan pronto abandoné la sala de cine ¿Una película de terror? No sentí demasiado miedo… ¿Un drama? Apenas me conmoví un poco… ¿Un thriller? Había pocos misterios y estos se resolvían fácilmente.

Observados (The Watchers), el más reciente esfuerzo de M. Night Shayamalan (esta vez como productor) y dirigido por su hija Ishana en su debut (el nepotismo a su máxima expresión), padece el síndrome de quien mucho abarca y poco aprieta al presentar un relato bien construido, pero indeciso en su tono, dejando una sensación de tibieza frustrante.

¿De qué va?

Mina (Dakota Fanning), joven estadounidense trabajadora de una veterinaria y con talento para el dibujo, se pierde en un misterioso bosque en Irlanda Del Norte y queda atrapada en una extraña cabaña junto con otros tres desconocidos, mientras son observados por misteriosas criaturas sobrenaturales que han de aniquilarlos a menos que sigan una serie de reglas.

Un lore novedoso e interesante.

Quizás el punto más fuerte de la trama es su exploración del poco conocido folclore celta, pues aquí se nos muestran entes mitológicos muy distintos a la concepción más difundida sobre ellos. Igualmente estamos lejos de la geografía habitual en producciones de este tipo, lo que nos ofrece horizontes más amplios.

Pero el problema es el enfoque de la directora. Como señalamos previamente, la película no se decide entre el terror, el misterio o el drama (Mina guarda un pasado y presente dolorosos y las mismas criaturas malignas tienen su historia trágica detrás), abordando cada uno de forma superficial, lo que nos hace preguntarnos precisamente qué es lo que vimos en pantalla. Claramente se nota la timidez de la directora debutante para sumergirse de lleno en una temática y eso diluye el disfrute del filme.

¿Hay que verla?

Vale la pena como entretenimiento pasajero y si se quiere aprender más de la cultura explorada, pero no deja una sensación clara en la mente. Para un domingo sin otra cosa que hacer, es evidente que la hija resultó ser peor que el padre, con un debut muy alejado de aquel “one hit wonder” de 1999.

Etiquetas:  

Acerca del autor

Dr. Dark    

Médico de profesión y cinéfilo de corazón. Amante del buen cine y destructor del que no lo es.


Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*

*

*