The X-Files Re-opened: Cuando lo único que nos ofrecen es expectativa
Lejanos se ven aquellos días en que los fans de The X-Files veíamos con el corazón emocionado y lleno de gozo la noticia de una nueva mini temporada de una de las series más respetas, queridas y aclamadas de la televisión: Los Expedientes Secretos X (título con el que la conocimos en México). Y la esperanza no estaba infundada, se nos prometía que nuestros héroes investigadores originales regresarían llenos de canas y arrugas pero siendo ellos mismos, esos de los que nos enamoramos en los 90’s.
Se nos prometió que regresaban sus compañeros de reparto más simbólicos y el mejor villano que la televisión ha dado (Pues de 200 capítulos apareció solo en la tercera parte de éstos y tenía la menor cantidad de diálogos que puede tener un villano, y sin embargo fue grandioso), con una presencia inigualable que solo podía darle el actor William B. Davis. Se nos prometió y se nos prometió… Y ese fue el error.
No solo de promesas vive un fandom
Desafortunadamente en estos 6 capítulos además de ver cómo han envejecido sus protagonistas podemos ver también como ha envejecido el concepto de la serie. No se decir si se deba al hecho de que la tecnología la ha dejado un tanto obsoleta o si ha sido la falta de creatividad de su creador o el empeño del mismo David Duchovny de reinventarse y dar de qué hablar nuevamente.
¡No lo sé!
Pero si sé que nos quedaron debiendo. El inicio fue como ‘Back to the Past’, con escenas dignas de los mejores momentos de la serie. Se nos presentó el nuevo ‘twist’ que prometía en verdad grandes cosas. Apareció el Fumador y ese simple hecho de darle una sola línea fué maravilloso. Pero el director pecó de creativo y en ese afán de sacar el conejo de la chistera, en lugar de avanzar y evolucionar nos entregó a los mismos personajes de hace 20 años, estancados y donde mismo.
Tenemos a un Fox Mulder que no perdía oportunidad de reclamarle a Scully que lo hubiera dejado, y aunque eso a los fans shippers se nos hacía lindo, llegó un momento en que cansó porque simplemente los tiempos son otros. El personaje de Scully es de una mujer fuerte e independiente con ideas claras que siempre ha buscado y seguido su camino. Ella es un una mujer actual que no necesita la presencia de un hombre junto a ella para avanzar. Mulder desea que Scully siga atada a él en su lucha constante por encontrar ‘la verdad’.
Ahora que ya sabemos la verdad ¿podemos manejarla?
No podemos. Al creador Chris Carter se le salió el concepto de las manos. Quiso reinventar todo el universo y al mismo tiempo regresarnos al ‘old school time’ de la serie. Pero la serie era buena porque en su tiempo la tecnología era prácticamente inexistente y porque a lo largo de cada temporada se nos iba hilvanando una subtrama con un potencial enorme y desconocido hasta ese tiempo en la televisión.
Así, ahora vemos como en 6 capítulos se nos intenta contar algo que seguimos sin averiguar qué es. Carter y su equipo de directores debieron haber decidido hace mucho tiempo qué rumbo tomaría definitivamente la relación Mulder-Scully. ¿Porqué? Simple, Evolución. Peor aún en algunos capítulos podemos ver a un David Duchovny perdido en la inmensidad de su sarcasmo sin recordar siquiera cómo actuaba el agente Fox Mulder. No se diga cuando de las menciones de su hijo William se trata. Simplemente no hay chispa ahí, es como si a Mulder le importara poco el hecho de ese hijo perdido. En contraparte Gillian Anderson como su eterna pareja semi platónica y madre de su hijo semi alien, ella está perfecta en estas partes. Cada que habla de la pérdida de su hijo uno no puede dejar de sentir como se le arruga el corazón… y entonces preguntamos ¿Porqué demonios no lo ha buscado?
Es decir, entendemos que lo hayan regalado para protegerlo pero si tanto le duele a ella como madre, sabiendo que cuando lo regaló ya no tenía ‘poderes alien’, entonces porque no hace lo posible por encontrarlo, aunque sea para saber que se encuentra bien. Eso de dejarle al destino que tu hijo mitad alien se encuentre bien y tenga una vida tranquila escondido en el anonimato de la humanidad, es pecar de insensato.
No se diga además el regreso desapercibido del resto del cast original. Entre ellos los Lone Gunmen y el director Walter Skinner. ¿Dónde están? Ese es el meollo de esta crítica. Se nos prometió demasiado, se nos crearon expectativas muy altas y hasta ahora solo hemos tenido 3 capítulos que son los únicos dignos de mencionarse:
- 10×1 – El twist de la nueva conspiración y el regreso del fumador
- 10×2 – La mención de William y la incertidumbre de Scully por saber si fue buena decisión regalar a su hijo
- 10×3 – El Were-monster, uno de los capítulos independientes más divertidos que la serie ha dado en sus 10 temporadas.
Y ya, párele de contar. Mañana lunes llega el capítulo 10×6 y se acaba la mini temporada y no hemos tenido nada significativo. Sin duda 6 capítulos para reinventar tu universo no es buena señal. Prometer un old shool cuando ésta ha sido ya rebasada por el tiempo y la tecnología es otra mala señal. Pero regresar y volver a ver a los personajes donde los dejamos en el 2008, solo habla del estancamiento creativo y falta de decisión del creador.
Sinceramente, mañana lunes que esto llegue a su fin NO ESPERO ver todo aclarado, ni lo de William, ni la relación de Mulder-Scully ni cómo sobrevivió el Fumador ni porqué los X-Files permanecieron sin ser tocados desde que Mulder renunció o cuáles son los planes de esta nueva conspiración alien y más aún quién fregados la patrocina.
No quiero tener esperanzas porque no quiero decepcionarme más de lo que ya lo estoy con este regreso.
Admito que me encantaba la idea de continuar la historia. Pero cierto es que debieron refrescarla e ir atando cabos. Pero cuando en un esperado y anunciado regreso dejas más cabos sueltos de los que amarras y no explicas nada en absoluto, no esperes que tus leales seguidores sigan siendo leales. No se qué ha sido más decepcionante para mí, el disfrazado reboot de Star Wars o el regreso mediocre que tuvo mi serie favorita de la pubertad: Los Expedientes Secretos X.
1 Comment
Aun no me repongo de Mulder bailando la de Caballo Dorado…