Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery – Scooby, Scooby-Doo, where are you?
Probablemente, con el pasar de los años, la tercera parte de la saga de Rian Johnson Wake Up Dead Man se vuelva un caso de estudio interesante dentro del género whodunit, y no por ser una obra destacable, sino porque es una película donde todo importa menos la parte del misterio.

Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery sigue ahora el caso del asesinato de un padre de nombre Jefferson Wicks en una iglesia de un pequeño pueblo, con una historia de trasfondo trágica y un contexto bien construido sobre la vida religiosa de una iglesia marcada por la tragedia de una historia familiar, siendo representada por la ausencia del que es una de las bases importantes del cristianismo, la figura de la crucifixión, haciendo que Wicks se coloque como deidad principal y el centro de esta parroquia.
Esto provoca que esa falta de la figura de la misericordia tenga un mensaje incendiario y provocador, que ha provocado que los que buscan la piedad se alejen y que se acerquen los miembros del pueblo que más viven de la imagen y de la superioridad moral, creando una especie de círculo tóxico más parecido a una secta. Esta dinámica es interrumpida por la llegada de un sacerdote asistente, exboxeador, de nombre Jud, quien tiene una visión diferente al padre Wicks y busca desesperadamente romper las relaciones nocivas y enfocar más a los feligreses en una búsqueda espiritual más pacífica.

La situación se vuelve más caótica cuando el padre Wicks es asesinado, lo que, por la situación y el contexto de los enfrentamientos constantes con Jud, lo convierte en el sospechoso número uno. El sacerdote se une a Benoit para resolver el caso y demostrar su inocencia.
Y ahí está el mayor problema de Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery: el drama entre estos personajes termina siendo incluso más interesante que la misma resolución del misterio, pues incluso desde el primer plano ya se puede saber e inferir quién es el (la) asesino(a). Aunque la historia comienza a revelar más secretos alrededor del grupo de feligreses de Wicks, más que apoyar al misterio, terminan por hacer más evidente la resolución que tendrá.

A sabiendas de esto, Rian Johnson recurre a un truco sacado de un programa de televisión infantil, haciendo un Scooby-Doo y dando una última vuelta que entorpece la narrativa del detective en un intento de “hacer más confuso” lo que ya es evidente. Un truco que, de no ser por el drama alrededor de la fe y las estupendas actuaciones que le rescata su elenco, terminaría por convertirse en un desastre de proporciones épicas.
Incluso esta degradación de su estilo whodunit termina por afectar a personajes como Benoit, quien no solamente es desplazado por los involucrados del caso y sus historias de trasfondo —al ser más interesantes—, sino que la falta de construcción interna lo hace ver como un detective que cae en el cliché de “es el más inteligente y por eso resuelve los casos, aunque muchas veces no sepamos cómo llegó a esta conclusión”, siendo el más afectado en esta parte.

Resalta en Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery, una vez más, el trabajo actoral que por momentos rescata la dirección, a veces torpe, al dotarle del tono correcto que requiere la escena, salvándole el culo por momentos a Johnson. Un acierto de casting tener a gente de experiencia (Josh Brolin, Glenn Close) y actores con potencial (Andrew Scott, Josh O’Connor) que incluso tienen esa capacidad de dar un plus a las limitaciones de la escritura.
Calificación
- Dirección: 2.3
- Guion: 2.2
- Actuación: 1.9
- Extras: 0.5
Calificación total: 6.9

Al final, Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery es un resumen de lo que es la carrera de Rian Johnson: un director que puede ser un completo desastre, como en Star Wars: The Last Jedi, o darte una genialidad como Looper o la primera entrega de Knives Out. Medianito, sin ser tan malo como muchos lo han señalado, pero tampoco tan bueno como él mismo o algunos creen.
Aprobada como drama alrededor de la religión, reprobada como película whodunit, Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery es otro fracaso para la carrera de Johnson y para Netlifx