Everything Everywhere All At Once: Pienso, luego existo
El Hollywood moderno pasa por un periodo de decadencia; por un lado la maquinaria de los blockbusters no para de exprimir al subgénero de los superhéroes y de hacer remakes, reboots y secuelas; por el lado más alternativo, sigue copiando el mismo estilo parsimonioso, pero vacío (ultra mamador) festivalero (con contadas excepciones). Por lo que encontrar una propuesta balanceada, original y fresca se ha vuelto igual de difícil que encontrar una aguja en un pajar.
Con este escenario, no es de extrañar por qué películas como “Everything Everywhere All At Once” terminan por convertirse en un respiro y una demostración de que la historia correcta con directores competentes pueden tener ese equilibrio entre calidad y entretenimiento.
Primera parte: La presentación de su multiverso
La trama nos cuenta la historia Evelyn, una mujer quien se encuentra en el peor momento de su vida; su matrimonio está al borde del divorcio, su hija se aleja cada vez más de ella, tiene que lidiar con el rechazo de su papá y aparte su negocio está siendo auditado por hacienda. En medio de este marea de problemas, una versión de otro universo de su esposo se le aparece diciéndole que la necesita para salvar el multiverso de una amenaza malvada, por lo que empieza un viaje sumamente alocado.
Primero lo que hay que destacar es la originalidad con la que maneja el concepto. Si bien últimamente se ha puesto de moda, en la cinta de A24 este es manejado de una manera más atractiva y sin crossover o encuentros entre cada multiverso (como lo hacen el fanservice del superhéroe), sino que únicamente mediante un dispositivo parecido a un auricular, las diferentes versiones de un personaje se conectan con el objetivo de que el emisor pueda utilizar las habilidades del receptor. Desde la forma en como conceptualiza el uso de los multiversos, nos damos cuenta de que la cinta no está utilizando este elemento como un adorno ornamental, sino que le otorga un propósito a la trama.
El primero y más importante es el “What If” como un recurso de desarrollo, ya que antes de conectar con otra versión multiversal el usuario repasa su vida (como si una línea de metro se tratara) hasta que se topa con puntos de inflexión dónde su contraparte tomó una decisión diferente, lo que provoca que el emisor vea lo que hubiera pasado si hubiera tomado otro camino hasta llegar a su mente. Esto es utilizado para el desarrollo de la personalidad de sus protagonistas al cuestionarse cómo serían sus vidas sino hubieran tomado cierta decisión, aparte de que este recurso es manejado de forma descriptiva para la psicología de sus personajes y la descripción de sus relaciones. Podemos catalogar a la película como original y efectiva, demostrando que está cuestión del multiverso no es para nada una improvisación.
Segunda parte: El absurdismo
No solamente el uso de un concepto como los universos paralelos es usado para la narrativa, sino también para la estética de la cinta, que ya de entrada sabemos que va ser de corte absurdista. Esto lo podemos observar en la regla establecida para que los personajes conecten con su contraparte multiversal; primero se tienen que imaginar el lugar donde quieren estar y luego ejecutar una acción absurda. Esta norma da pie a los momentos más alocados de la película, desde los personajes cortándose con una hoja de papel, hasta metiéndose premios raros por el “sin esquinas”, lo que otorga un estilo de humor alocado que puede ser hilarante y estúpido, pero que gracias a la creatividad en la construcción de su universo(o sea por su contexto) están lejos de sentirse ajenos a su universo propuesto.
Incluso los chistes referentes a otros multiversos (que incluyen un mapache y otro de un universo de dedos de salchichas), que podrán ser simplones y algunos entrar en la categoría de humor vulgar, funcionan gracias a la dinámica alocada. También hay que añadir que el toque ochentero del cine serie B de artes marciales, le da más licencia a la cinta de tomarse menos en serio y “deschongarse” para tirar cuánta situación se le ocurra, siendo esa la base cómica, divertida, alivianada y que por su simpleza pero también por su ingenio, es el elemento de la que genera la conexión con el público (en la sala donde vi la cinta la mayoría se atacaron de la risa).
Entre todo este absurdo, en su primeros actos la cinta hace una invitación al espectador a dejarse llevar y arrojarse en este tobogán sin tomarse demasiado en serio. Sin embargo llegado la tercera parte, se da un giro inesperado y se otorga “ese plus” que lo hace algo más que un disparate de artes marciales multiversal, sin olvidar las bases o regla cimentadas en su primera parte.
Tercer parte: El plus I, Montaje y estilismo
El montaje es absolutamente increíble, no solamente por la forma en articula los encuadres, sino que en colaboración con la fotografía son clave para marcar los tonos en lo que irá la cinta, ya que puede pasar de ser una comedia disparatada, a una película de artes marciales mixtas, a un drama de conflictos familiares, a un drama existencialista. Todo sin que en ningún momento se sienta desconectada.
Visualmente, en su lenguaje se apoya en las diferentes ópticas que le da su imagen cuando salta de género. Ejemplo, la escenas acción se encuentran en 2:35 utilizando fast forward, y generalmente son planos americanos en primera persona; en cambio el melodrama, se utiliza un widescreen con planos más cortos.
Entre los saltos multiversales la historia justificadamente permite que se tengan cruces plasmados de manera visual, apaleando a un estilo surrealista preciso. Para ello, el montaje juega un papel importante, pues permite que en menos de un parpadeo las diferentes versiones de cada personaje puedan convivir en un mismo escenario, o sus diferentes historias comiencen a ser entrelazadas en la narrativa visual sin perder hilo una de la otra.
Y quizás la pregunta es ¿cada multiverso tiene un propósito distinto (unos son utilizados como chiste, otro son la parte melodramatica)? ¿El hecho de cruzarlos en montaje no podría hacer que la mezcla se sienta extraña? Una vez más, la fotografía soluciona esto, pues cada universo tendrá un estilismo diferente; si el universo será netamente cómico, tendremos imágenes o encuadres parecidos a los de un sitcom, si es más alocado o de acción, los planos americanos junto con los secuencia para las coreografías de las peleas serán la constante. Incluso hay un universo que tiene el propósito de dar las explicaciones metafísicas de la cinta, dónde no existen los humanos, solo hay piedras, y donde se utiliza un gran plano general. Al final, de una manera brillante los realizadores han dotado de un estilismo variado para evitar descuadres en la mezcla de géneros lo que termina por ser un acierto
Tercer acto: El plus II, Los personajes y filosofía
No solamente es la parte técnica lo que eleva el nivel de la cinta, sino son las entrañas de su trama y el mensaje (obviamente existencialista) que hay entre estás capas de absurdo.
Aunque se lea pretencioso, la cinta tiene una carga de contenido filosófico introducida de forma sutil entre toda esta gama de chistes tontos, apelando al método cartesiano y a la corriente de pensamiento nihilista, lo cual explicaré a continuación:
El dualismo cartesiano es un movimiento intelectual cuyo principal representante fue el filósofo Rene Descartes, cuyos axiomas principales eran los siguientes:
-El escepticismo ideológico en el cual se establece que todo idea puede ser dudada y que lo único que demuestra la existencia del “yo” y que por lo tanto es indudable es el acto dudar (resumido en la frase: “Pienso luego existo”)
-También describía una dualidad entre el cuerpo y el alma, estableciendo el primero como algo que estaba determinado por el ambiente y sujeto a las leyes física y al segundo como aquella que tenía la capacidad de discernir y donde nacía la conciencia del humano, una no podía existir sin la otra pues el alma dominaba al cuerpo y controlaba sus acciones dentro del plano material y sin embargo sin el cuerpo, el alma no pueda actuar sobre el plano material.
Dentro de la historia encontramos a Evelyn, la cual es descrita como una mujer de carácter fuerte, pero al mismo tiempo abnegada en muchos sentidos de su vida, y con la suerte de ser la versión más fracasada de todas las Evelyns. La llegada de su esposo del multiverso Alpha la hace comenzar a dudar de “aceptar” ese destino que le ha tocado, que si los eventos catastróficos que suceden en su vida son una obra de la casualidad o parte de un suceso que se encuentra fuera de su plano terrenal. La ideología cartesiana sirve como elemento para el despertar de Evelyn (no en balde la forma de trasladarse a los universos es pensando antes de hacer la conexión y no por nada las habilidades que adquiere de su contraparte viene por una conexión mental que en la perspectiva de Descartes lo atribuía al alma).
La corriente ideológica del nihilismo niega toda creencia o dogma, en la cual se pasa por diferentes etapas: la primera, viene acompañada de un pesimismo dónde el individuo se enoja y entristece al descubrir que ha vivido una mentira, llegando al concluir que la existencia no tiene sentido. Esta etapa se le conoce como nihilismo negativo. Posteriormente, una vez que el hombre entiende que hay fuerzas naturales que no pueden controlar y que la única sobre la cual puede manejar es la fuerza de voluntad y que la existencia de la vida es ejercer de manera efectiva libertad, se evoluciona y pasa a la etapa del nihilismo positivo.
De cierta manera, el pensamiento cartesiano influye en el nihilismo, pues al no existir un control del alma sobre la fuerza naturales que afecta al cuerpo se cae en la duda y se puede llegar a la conclusión de que todo o la mayoría es sustentado en la mentira o la falsedad. No es hasta que el individuo entiende que el alma solo tiene control sobre el cuerpo y no sobre el entorno que encuentra la fuerza de voluntad que pasa al siguiente nivel de nihilismo.
La historia central de la cinta es un “mommy issue”, donde la hija de Evelyn al cuestionar su sistema de creencias y no encontrar las respuestas del comportamiento de su mamá cae en el nihilismo negativo bajo la bandera del: “Nada importa”. Sin embargo, Joy no tiene fuerza de voluntad (principalmente porqué en sus versiones multiversales tiene el control de todo) por lo que nunca evoluciona a al nihilismo positivo; Evelyn al dudar o cuestionar su existencia sigue el mismo camino, y al no encontrar respuestas, está en la cornisa de caer en el ciclo del nihilismo negativo, sin embargo hay un personaje clave que es el que termina por dar el siguiente paso en la transformación de nuestro personaje.
Para mí gusto personal, Waymond es mi personaje favorito, pues en un principio es presentado (en el universo de Evelyn y su lavandería) como un hombre “beta”, despreocupado y hasta cierto punto “pocos huevos “, dependiente de Evelyn, y sin embargo su discurso es el que le da una vuelta de 180° a su personaje; en este diálogo, establece que no entiende porque existe tanto caos en el universo y que sin embargo en la positividad ha encontrado una estrategia de supervivencia ante un ambiente inestable. Waymond ha entendido que no puede controlar ciertas fuerzas naturales, por lo que su despreocupación o pasividad es su fuerza de voluntad ante la vida, y a pesar de que eso sea un defecto en su relación con Evelyn, también es el complemento para los momentos en que su carácter rasposo llega a encerrarse en ciertas situaciones. Es la tranquilidad de Waymond la que permite que salga adelante.
Si bien está lejos de ser una pareja ideal, cada aspecto de su personalidad y unión está justificado. Lo que me agrada es que el guion nunca llega a idealizar a ningún de los dos y exhibe tanto sus virtudes como defectos, dándoles un trato humano. Incluso esto ocurre con el personaje de Joy, quien al principio es pintado como alguien que es víctima de la circunstancias de su madre solo para ir comprendiendo de a poco que tiene un lado sumamente narcisista, egoísta y autodestructivo y que sin embargo tiene un punto a reclamar con respecto al apoyo del lado materno (una vez más desarrollando personajes bastante humanos). Joy termina también por ser un personaje interesante, pues es una representación de como actualmente el concepto del nihilismo en la modernidad se ha reducido al aspecto negativo y no en el evolución hacia el “súper hombre”, haciendo que más que la ideología sea una ayuda para que el individuo mejore en el aspecto psicológico, termine por encausarse en un “loop” dónde será utilizado como un escapismo para no afrontar los problemas, derivando en un cinismo tóxico por la vida.
Al final, Evelyn comprende que no puede estar combatiendo constantemente a quienes los rodean y que la fuerza de voluntad es lo único que lo ayudará a sobrevivir, y así como Waymond encuentra en la positividad su eficacia, el ejercicio de conectar con versiones multiversales (que podría ser una referencia al autodescubrimiento) y de comenzar a conectar con otras mentes le permite generar la empatía como su fortaleza (volvemos a Descartes, pues el estableció que la empatía no era más que la conexión de un alma con otra, que al final cuando se refería al alma hacia un referencia a la mente). Evelyn comienza a comprender mejor a sus seres queridos, perdona a su padre por los errores que cometió con ella en su etapa más joven al darle la espalda al casarse con Waymond, perdona a su esposo por el divorcio y entiende su papel dentro de su relación así como el balance que puede generar su carácter, y sobre todo perdona a su hija al entender que está repitiendo los mismos comportamientos que su padre, pero también a su vez entendiendo que a pesar de que no tienen el mismo sistema de creencias, la acepta y ama tal cual es a pesar de no estar de acuerdo en ciertas decisiones y entendiendo que por mucho que quieras a los hijos ellos tomarán su propio camino.
Al final, si bien el mensaje de la cinta puede resumirse: “nada importa”, no es que nada importe en el sentido de que todo da igual y por lo tanto la destrucción hacia la nada es el camino, sino que al comprender que la única fuerza que podemos controlar es la voluntad como manera de tener una libertad efectiva (la cual puede ser definido de acuerdo a un sistema de valores que varía por persona, vean a los personajes de Evelyn y Jonathan) es cuando el “nada importa” adquiere más un significado de que el Espacio físico o natural ya no termina por afectar a nuestra alma y únicamente ella ejerza el control sobre nuestro cuerpo. Básicamente un mensaje de sanidad mental desde una óptica filosófica que utiliza elemento de la corriente ideológica cartesiana y nihilista, y por consecuente de la reparación de los vínculos afectivos que tenemos con otras personas conectando con ellos en el alma a través de la empatía.
Calificaciones
Guión: 3.5 – Increíble como varios conceptos filosóficos son envueltos en un mensaje de sanidad mental y empatía en un producto tan entretenido.
Dirección: 3.0 – El montaje es de lujo, la combinación de estilos no se siente desconectada, sería perfecta de no ser porque el único defecto de la cinta viene por el último tramo dónde es un poco excesiva y eso es culpa de la dirección.
Actuaciones: 1.9 – Todos tienen su momento para brillar desde Jamie Lee Curtis, hasta Michelle Yeoh y Jonathan Ke Quan
Extras: 0.5 – Un manejo estupendo del concepto del multiverso
Calificación Final: 8.9 – Excelente
Y a todo esto qué es Everything Everywhere All At Once?
¿Es una cinta con humor alocado de artes marciales mixtas tirando a serie b que te hace reír hasta que te duelan las costillas? ¿Es una cinta bien montada y que mezcla diferentes géneros en su trama?¿Es una cinta con personajes bien diseñados con perfiles y relaciones bien establecidos?¿Es una película acerca de la sanidad mental?¿Es un filme que explica de manera sutil pero puntual conceptos cartesianos y nihilistas?¿Es una cinta bien actuada dónde todos tienes su oportunidad de mostrar su perfil actoral?¿Es una cinta con mucho músculo intelectual pero que a la vez sabe comunicar sus mensajes al público utilizando el humor absurdo, y personajes tan humanos para mantener el equilibrio entre la calidad y humor?¿Está cinta le patea el culo a Marvel en eso de los multiversos?
Si,Si,Si,Si,Si,Si, Si y por supuesto que Sí (de hecho Dr Strange va tener que ponerse Vitacilina).
Haciendo honor a su título:
Es todo,
Está en todas partes y
Está en todo a la vez.
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