Five Nights at Freddy’s: Evítese a toda costa
Five Nights at Freddy’s es un popular videojuego que vio la luz por allá del 2014, debiendo gran parte de su fama a youtubers que buscan entretener a un público mayormente infantil con videos de reacciones exageradas a los jumpscares por los que este juego se caracteriza. Viendo su fama, era ya hora de que este concepto fuera trasladado al séptimo arte y prometiera tantas franquicias como las tiene su videojuego (actualmente 13).
Freddy Fasbear’s Pizza es el lugar en el que se desarrolla Five Nights at Freddy’s, un restaurante familiar muy popular en el pasado pero que actualmente se encuentra prácticamente abandonado. Mike Schmidt es contratado como el nuevo guardia de seguridad nocturno de dicho restaurante, pero desde su primera noche, Mike se dará cuenta que el trabajo no es tan fácil como esperaba y hay algunos secretos que esconde este inusual centro de diversiones.
Five Nights at Freddy’s comienza de una manera bastante interesante, pues nos presenta desde muy temprano a un protagonista con un pasado oscuro y particular, algo que promete irse desarrollando de poco a poco y que parece encajar adecuadamente con el papel de guardia de seguridad que ya es conocido en esta saga.
De aquí parte esta idea de presentarnos con una trama un tanto compleja, algo que extraña debido a que está basada en una saga de videojuegos basada en Jumpscares (y poca profundidad), por lo que es lógico pensar que estos “sustos repentinos” serían parte importante de esta cinta pero que sorprendentemente son escasos y de manera irónica, nada asustadizos.
Entonces Five Nights at Freddy’s construye todo este argumento que de entrada parece bastante estudiado, pero que conforme avanza en su estructura, se van añadiendo elementos que no concuerdan con todo lo que sucede alrededor de nuestro protagonista, empezando a cuestionar el significado de todo aquello que se nos había mostrando anteriormente.
Pero todas esas dudas carecen de importancia hacia lo que podría denominarse como “el clímax” de la película, porque lo poco que se había logrado conseguir es destruido pieza por pieza con la más grande cantidad de sandeces que he visto en mucho tiempo. Y cuando hablo de estupideces me refiero a que absolutamente NADA TIENE SENTIDO, ni siquiera los llamados plot twists funcionan aquí, pues es incluso doloroso presenciar esas escenas frente a nosotros, que muestran un desfile de incoherencias que lejos de amenizar cualquier situación solo provocan repulsión.
Cualquiera que haya presenciado este videojuego pudiera pensar que la manera más obvia de trasladarlo al cine hubiera sido con un slasher, una película en donde los asesinatos estuvieran a la orden del día, un entretenimiento que no necesariamente tendría que ser rebuscado pero puede resultar muy efectivo cuando se utilizan sus cualidades de manera ingeniosa para estructurar este género.
Five Nights at Freddy’s es difícilmente una película para público infantil (a pesar de que gran parte de su fandom está ahí) pero al mismo tiempo, no es lo suficientemente gore para ser catalogada solo para adultos. En pocas palabras, el filme no decide qué es lo que quiere ser y termina por ser nada, y ni siquiera le alcanza para ser una recomendación de esas de fin de semana. Evítese a toda costa.
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