Knives Out: Un Clue Detective Moderno
Mientras que los blockbusters de acción parecen ser la carta más eficiente dentro de esta bella industria del entretenimiento, también se agradece que haya algunos directores como Rian Johnson que nos ofrezcan una temática alejada de ese género. Tal es el caso de su nueva película Knives Out, que sin ser maravillosa, se convierte en un pasatiempo divertido para desconectar las neuronas y disfrutar.
Entre Navajas y Secretos (Puñales por la espalda, en España), narra la historia del novelista Harlan Thrombey y cómo su muerte después de su cumpleaños 85 se convierte en un misterio, involucrando a toda su disfuncional familia en la búsqueda de un asesino. Para ello, el astuto investigador Benoit Blanc se las ingeniará para descubrir al culpable definitivo.
La cinta nos presenta un típico caso de “descubre al asesino” en el que el director tratará de confundir al espectador lo más posible, desde cosas que parecen demasiado obvias para ser verdad, hasta cosas sacadas de la manga para sorprender y/o dar un giro a la historia. El gran cast con el que cuenta es sin duda una de sus mejores armas: Daniel Craig, Chris Evans, Ana de Armas, Toni Collette, Jamie Lee Curtis, Michael Shannon, Don Johnson y Christopher Plummer quienes mayormente desempeñan papeles que se encuentran fuera del estereotipo al que nos tienen acostumbrados.
La evidente debilidad de la película es meter aspectos que se notan muy forzados para poder darle un poco de sentido a las situaciones, que fuera de hacer la historia original, más bien la hacen sentir fantasiosa (en lugar de graciosa), y es precisamente ese alejamiento de la realidad lo que expone la debilidad del guion. La mayoría de los personajes no tienen profundidad y parecen solamente ser parte de la trama para aparecer en el momento indicado para hacer algo relevante o que simplemente justifique su existencia siendo una pieza útil.
El truco es no buscarle defectos a la película porque será muy fácil encontrarlos. Knives Out es ese tipo de entretenimiento para pasarla bien sin darle muchas vueltas, sin buscar que sea perfecta, y entrar en un juego muy al estilo de Clue Detective.
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