La Peli para el Fin de Semana: Paprika
El espacio donde se descubren y redescubren buenas películas de todo tipo.
Paprika (2006)
Llegó el momento de recomendar esta maravilla de la animación japonesa y del genio Satoshi Kon, en este punto quizá ya muchos la conozcan, pero no está de más recordar y revivir esta obra maestra, que marcó e inspiró al mundo del cine y del anime.
Sinópsis
Para qué escribir una aburrida sinópsis si existe un maravilloso trailer que homenajea esta inreíble obra:
Por qué debes verla
Satoshi Kon (Perfect Blue, Tokyo Godfathers, Millennium Actress) entregó su última y más memorable obra, logrando un balance perfecto de surrealismo, complejidad psicológica, humor negro y crítica social. A todo esto sumémosle una animación magnifica, visuales impresionantes y un soundtrack nostálgico y tan profundo como los sueños.
¿Qué pasaría si existiera un dispositivo que te permitiera entrar a los sueños de los demás? ¿Cómo se vería? ¿Cómo se sentiría? ¿Qué dilemas éticos traería este invento? y ¿Qué problemas psicológicos provocaría al darle un mal uso?
Todas estas cuestiones y otras más, son llevadas a lo largo de la película, mostrando las respuestas de una manera sensorial y única, llenando nuestros ojos con escenas exquisitas, emocionantes, coloridas, llenas de detalle, saltando de la realidad a los sueños y viceversa hasta el punto de no lograr distinguir una de la otra, creando una colisión sin escalas entre ambos mundos.
Fan del anime o no, esta película es un deleite visual que ningún cinéfilo debería perderse.
Reflexión
El mundo de los sueños es un lugar misterioso e indescriptible al que todos hemos ido alguna vez, un mundo que se siente tan real, tan palpable, lleno de muchas imposibilidades, un lugar en donde puedes ser mil cosas, vivir millones de experiencias, conocer cientos de seres, volar entre constelaciones o caer hacia el más oscuro de los abismos, conocer a la persona que amas o tus peores temores, correr hacia la batalla como todo un héroe o esconderte ante la peor catástrofe.
Sin importar lo que sueñes, se siente tan real hasta que despiertas y todo se desvanece poco a poco, quedando solamente fragmentos, pero algunos de estos logran transformarse en memorias que se convertiran en recuerdos, recuerdos que ahora llevaremos con nosotros, recuerdos del día que fuimos más allá de la luna.
¿Que tan separados están estos dos mundos en realidad?, ¿Cómo puedes probar que no fue real?, pues dormidos o despiertos todo lo que somos y vemos ocurre dentro de nuestra mente.
Para terminar, me gustaría dejarles una de las mejores escenas de apertura que he visto en el cine: