Las 111 Mejores Películas sobre Hermanos

Al igual que la madre y el padre, la figura fraternal ha tenido su debida participación en el cine desde diferentes perspectivas. Para unos, es uno de los primeros recuerdos de la infancia y la única persona en la que se podrá confiar llegada la adultez, para otros, representa el rompimiento de esa unión porque, tal como Caín y Abel, los valores e ideales cambian con el tiempo. A veces el término “hermandad” refiere a esas amistades que traspasan los lazos biológicos y se convierten en una verdadera fraternidad (porque no toda familia es de sangre), y en casos tan raros como extremos, es un romance prohibido que despierta un morboso interés debido al tabú del incesto.

Sea cual sea el caso, esperemos que este repaso sirva para valorar a ese hermano o hermana que siempre ha estado ahí, en las buenas y en las malas, como el único sostén tras la desaparición de los progenitores. Y no se sientan excluidos si son hijos únicos, queremos que este listado sea la oportunidad de experimentar y entender ese lazo que cada vez menos tenemos la virtud de vivir, conservar, unir y reconciliar.

 

A City of Sadness (Hou Hsiao-Hsien, 1989) 

POR URIEL SALVADOR

Hou Hsiao-hsien hace un recorrido de los años cruciales durante la ocupación japonesa en Taiwán y la posterior huida del nuevo gobierno por el Partido Popular Socialista Chino. Sin embargo, los acontecimientos históricos son más el trasfondo para comprender la identidad nacional de una sociedad a la que le tocó sufrir, simbolizada en una familia que deben afrontar las consecuencias de la inestabilidad política y económica (de donde destaca la labor de Tony Leung como el menor de los hermanos, un fotógrafo sordomudo y pacifista). Una joya que define el gran problema cultural que tiene el país: la búsqueda de su propia identidad. Aquí no hay lugar para actos heroicos ni finales felices, sólo la dura realidad.

 

Adaptation (Spike Jonze, 2002)

POR EL FETT

Adaptation (póster) - Nicolas CageUn drama que al borde de lo surreal, que logra encausar uno de los mejores, más entretenidos y complejos auto relatos en la historia fílmica. El majestuoso libreto de Charlie Kaufman es una auto sátira al proceso creativo fílmico y de la escritura, de donde el afamado guionista divide su personalidad entre el cine de autor y el comercial a través de dos personajes, dos gemelos interpretados con una impresionante solvencia, versatilidad y credibilidad por un tremendo e irreconocible Cage, el cual logra captar ambas extensiones de Kaufman y transportarlas a un relato que alrededor de su doble actuación se construye la tensión, la comedia, la camaradería y un final de lata carga emocional. Joya.

 

Alien: Romulus (Fede Álvarez, 2024)

POR EL FETT

Consciente de que no puede equiparar el factor sorpresa de las dos primeras joyas, Fede decide crear su propia suerte con tres trucos muy obvios: justificar las acciones de sus protagonistas en su inexperiencia adolescente, dotar de protagonismo a los androides, y finalmente ejercer por medio de efectos más prácticos un equilibrio entre la nostalgia y nuevos elementos que profundizan en el ciclo reproductivo del xenomorfo y la orden original dada al Nostromo en 1979. Un as bajo la manga más es ese final, que aunque cuestionable, es mucho mejor que en Resurrection (parecido) y termina por poder explicar en 3 minutos lo que Prometheus y Covenant no pudieron en cinco horas.

 

All’s Well, Ends Well (Clifton Ko, 1992)

POR URIEL SALVADOR

Llamar bizarro a este proyecto sería quedarse corto, ya que este continuo alboroto de chistes de pastelazo usa el humor situacional para encubrir muchos líos conyugales relacionados al amor y las causas que marchitan la pasión. Cada una de las parejas que estelariza este romance representa un tipo de relación, destacando el amorío entre Maggie Cheung y Stephen Chow que va desarrollándose a base de muchas referencias al cine que cualquier fan apreciará. Dista de ser una joya, pero sabe cómo hacer para que las risas no cesen hasta su hilarante final. Procrearía otras 6 secuelas que no estarían a la misma altura.

 

Amores Perros (Iñárritu, 2000)

Por El Fett

La ganadora en Cannes es la constancia de cómo Alejandro González Iñárritu concibió su obra maestra a partir de las raíces mexicanas. Bajo el formato de historias cruzadas y teniendo al “perro” como eje narrativo, testigo y víctima del ruin accionar humano en un choque clasista tan familiar como oscuro, tanto el guionista Arriaga como el director conciben una oda de autodestrucción en sus primeros dos actos para después rematar con un gran final repleto de redención, generando luz a partir de la proyección más oscura de aquella evolución del México Olvidado. Las clases medieras (altas y bajas) se combinan con el estrato más bajo usando al fiel e instintivo “animal” como metáfora, el cual compartirá a través de su sacrificio  la tragedia y misma resurrección

 

Animal Kingdom (David Michod, 2010)

POR EL FETT

Si tuviéramos que mencionar a las mejores películas gansteriles de los últimos años, sin duda la ópera primera de Michod guardaría un lugar privilegiado, el cual, a partir de un libreto excepcional, construye un ambiente dual donde la narrativa fluye desde dos polos: la actividad mafiosa, y la inocencia e intervención del protagonista y principal afectado. Cinta inteligente que aporta innovaciones al thriller gansteril: la ambientación, situado en un actual Australia y su situación criminal; y el matriarcado, dando un vuelco tan íntimo como intimidante al dotar a este clan del amor de una madre, capo, cuidadora y guía. Pearce por su parte dará vida al detective, hilo conductor que servirá como pivote entre los dos polos del film.

 

August: Osage County (John Wells, 2013)

Por Clementine

Años después de haber ganado el Óscar, consagrada y con una larga trayectoria ya a cuestas; la adaptación de la obra escrita por Tracy Letts y ganadora del Pulitzer, le valdrían a Julia su cuarto nominación al Óscar en esta obra coral sobre una problemática familia de Oklahoma reunida para apoyar a la matriarca de la familia (interpretada por Meryl Streep) mientras se van develando algunos oscuros secretos. Julia Roberts interpreta a la hija mayor quien está afrontando al mismo tiempo una crisis personal y en la que vemos a la actriz como pocas veces, desmaquillada, con varios primeros planos sobre su rostro y con la frustración y resentimientos que tiene su personaje demasiado palpables. La obra también se adaptó al teatro y fue ganadora del Tony.

 

A Tale of Two Sisters (Kim Jee-woon, 2003)

POR URIEL SALVADOR

El terror que propone Kim Jee-woon es poco convencional porque no hay fantasmas, no hay ningún elemento sobrenatural (aunque esta interpretación es discutible), más bien estructura el argumento en un terreno más real y con largas escenas de completo silencio. Aunque es muy lenta y enrevesada por momentos, logra calar en el alma con algo tan bonito y noble como es el amor fraternal (así como lo que implica perderlo antes de llegar a la adultez), pero a la vez da a entender que muchas veces no es posible aliviar a una persona si lidia con un trauma que no ha superado.

 

Before the Devil Knows You’re Dead (Lumet, 2007)

Por El Fett

La última joya que nos dejó Sidney Lumet. Absorbente y tensa, todo el suspenso se origina de la interacción de estos dos hermanos que planean robar el propio negocio familiar para salir de sus independientes conflictos financieros; como verdaderos titanes de la actuación, Hoffman y Hawke entregan un desempeño conjunto que sugiere, tal y como lo planeta Lumet, un destino trágico y fatal, proveniente de la misma incapacidad relacional – familiar de ambos. Crudo y hasta culpablemente divertido thriller, uno de los rasgos narrativos más característicos en la filmografía de Lumet fue la deshumanización de sus personajes por un bien burocrático, financiero o ideológicamente trágico, y que aquí ve quizá su más (y última) fría  lección

 

Big Hero 6 (Don Hall, Chris Williams, 2014)

Por Clementine

Basada en un cómic de Marvel, esta película de animación 3D y llena de easter eggs, cuenta la historia de Hido Hamada, un sobresaliente chico amante de la robótica que vive en la ciudad de San Fransokyo y quien, para sobrellevar el duelo por la reciente muerte de su hermano, intenta terminar un robot comenzado por éste para llenar su vacío. Así nace Baymax, un robot blanco y bonachón que se convierte de inmediato en su mejor amigo. Juntos y formando su escuadrón con miles de piezas, ingenio y corazón; buscan salvar a San Fransokyo de la banda criminal de Yokai, responsable también de la muerte de su hermano. Hermosa fusión de estilos y conceptos entre Oriente y Occidente, Big Hero se convirtió instantáneamente en un entrañable clásico.

 

Bring Her Back (Danny Philippou y Michael Philippou, 2025)

Por El Fett

Sin ser del todo buena (el trasfondo del culto es muy pobre y lo predecible que se vuelven las motivaciones de su villana la afectan) es una de las mejores cintas de terror de los últimos 5 años. Dos factores principales; el primero, su tratamiento del duelo visto desde dos perspectivas bilaterales, la de dos hermanos hacía con los padres, y la de una madre hacía con su hijo. Las maneras de afrontarlo son básicamente el concepto rector de donde se desprende la tensión y el terror, que no es ajeno a mostrar algunas escenas perturbadoras, pero evitando clichés, jumpscares baratos y lugares comunes. El segundo factor es su villana, una siniestra hija de puta interpretada de manera PERFECTA por Sally Hawkins

 

Brother Bear (Aaron Blaise, Robert Walker, 2003)

Por Kim Tobias

Otra de las cintas un tanto infravaloradas de Disney, debido, tal vez, a que se siente un poco “salida del molde” si la comparamos con los grandes clásicos. Esto no debe ser un punto negativo, pues si bien Tierra de Osos (como fue conocida en Latinoamérica) parece tener un tono un poco más adulto, este no minimiza una bellísima historia que envuelve un poderoso mensaje dentro de ella. Animación, personajes y narración forman una fábula entrañable que merece revalorada para aquellos que la tienen en el olvido. Eso sí, una lástima que Phil Collins no pudo repetir hazaña y hacer un soundtrack tan poderoso como el que hizo para Tarzan en el 99, ¿se imaginan a Brother Bear con semejantes melodías?

 

Brothers (Susanne Bier, 2004)

POR EL FETT

Infinitamente superior a su remake estadounidense (con Jake Gyllenhaal, Tobey Maguire y Natalie Portman), Bier lleva hasta el límite a sus personajes y al propio espectador, con situaciones tan fatales como intensas dentro de un peculiar y extraño núcleo familiar trastocado a través de la guerra y de la ausencia. El estrés post traumático y la caída a los infiernos emocionales se materializan con un alto nivel dramático y actoral, sorteando el morbo que propone la misma historia y manifestando un dilema moral lo bastante atractivo como complejo ¿Habrá una solución para este incómodo conflicto? Nunca se sabe, y ese es una virtud tanto de la directora como de sus actores

 

Buenos Días (Yasujiro Ozu, 1959)

POR URIEL SALVADOR

Una de las películas más ligeras y accesibles de Yasujiro Ozu que, a través de pequeños detalles y muchos chistes de pedos, entrelaza varias subtramas sobre la vida suburbana japonesa que revelan una crítica al creciente consumismo en el país. Mediante los hermanos protagonistas, enfatiza la importancia de la comunicación en las personas, pero también cómo la edad influye en la forma de procesarla, mientras los niños dicen tajantemente las cosas como son, los adultos disimulan sus comentarios en silencio, más que por educación, por represión y miedo a las consecuencias. Simboliza la transición de Japón a un futuro más moderno, tecnológico, occidentalizado y dominado por el consumo.

 

Crepúsculo de Tokio (Yasujiro Ozu,1957)

POR EL CINE ACTUARIO

El relato de una familia compuesta de dos mujeres; una que ha tenido una aventura y está embarazada, otra que ha abandonado a su marido, añadiendo un padre abandonado por su esposa se convierte en un pretexto para que Ozu resalta la importancia de la figura materna; todo el dolor, soledad, silencio es plasmado en pantalla a través de planos tan estéticos, hasta que el regreso de la madre genera un cambio en el ambiente a nivel narrativo y de ejecución, rompiendo esa monotonía emocional. Con una cámara correcta Ozu recrea un retrato de la soledad, y termina por ser un cuestionamiento de los estereotipos de los roles sociales familiares. Muy adelantada a su época.

 

Dead Ringer (Paul Henreid, 1964)

POR EL FETT

Casi 20 años después de una de las mejores películas mexicanas de la historia, La Otra, viene la versión estadounidense sobre como una demente asesina suplanta a su gemela, pero con grandes diferencias. La primera, que es más ridícula y con giros argumentales que volverían loco al mismo Shyamalan, pero no por eso menos interesante y/o divertida en su propuesta; la segunda, una Bette Davis grandiosa y desbocada en “double pack”, lo cual ya es digno de verse por el simple hecho de su inconmesurable presencia y de donde se desprende una ola de locura emocional que vendrá a afectar a todos a su alrededor.

 

Dead Ringers (Cronenberg, 1988)

POR EL FETT

Perturbador thriller que raya la fantasía y lo surreal en otra deconstrucción y degradación física del maestro David Cronenberg, que somete al doble papel de Irons a una tensión constante cuando un elemento externo (una misteriosa mujer) lleve a estos gemelos a experimentar la transformación desde el placer, la demencia y la perversión. Sin duda una de las olvidadas del director, esta cinta de culto adquiere una forma también trágica, dadas las condiciones de la caída física y mental de su doble protagonista, frente a todos los ingredientes de su filmografía. Sin duda Irons encontraría una revitalización a su estilo teatral de la actuación de mano de Cronenberg, con el que colaboría en otras ocasiones

 

Deux Frères (Jean Jeaques-Annaud, 2006)

Por El Fett

El gran Jean-Jacques Annaud, quien como ningún otro director ha retratado la belleza de la naturaleza esta vez nos trae una historia de dos pequeños tigres hermanos separados por la avaricia y la soberbia del hombre, crecerán en cautiverio: el primero con un príncipe, regalo de un cazador y el segundo en un circo. Su reencuentro será un combate entre ellos en una celebración del principado, después de tanto tiempo separados, será posible que se reconozcan o será un baño de sangre como lo desean los salvajes humanos. No le llega al Oso, pero tiene lo suficiente para ser una aventura natural y salvaje entrañable

 

Eleni (Angelopoulos, 2004)

POR URIEL SALVADOR

El romance entre 2 futuros amantes condenados por el destino a ser hermanos en realidad no es más que un reflejo concreto y, por lo tanto, microscópico de la gigantesca tragedia sufrida por millones de europeos durante la primera mitad del siglo XX. La belleza de las imágenes es poderosa, Theo Angelopoulos funde un crepúsculo infinito con la música de Eleni Karaindrou para componer un espectáculo deslumbrante y cautivador. Una tragedia moderna que tal vez sea demasiado lenta para la mayoría, pero claudica ante el dolor de un territorio lleno de heridas sin sanar.

 

El Globo Blanco (Panahi, 1995)

POR MANUEL ESTEBÁN GAITAN

El Globo Blanco es la cinta debut del realizador Jafar Panahi, que conforme paso el tiempo, se estableció como uno de los grandes cineastas iraníes. No obstante, es difícil encontrar en su filmografía una película más representativa que esta. No sería justo desmerecer la labor como director de Panahi en dicha ocasión, pero sin duda uno de los factores elementales de tal cuestión y sus resultados, es que el guión de la citada fue realizado por el mismo Abbas Kiarostami. Mediante una historia simple, sobre una niña que intenta conseguir un pez dorado para las fiestas, y sufre una serie de inconvenientes que complican su tarea, Jafar Panahi y Kiarostami construyen una de las historias mas emotivas y hermosas del cine de Irán. Un dato extra: esta cinta fue premiada en Cannes en 1995 con la cámara de oro.

 

El intendente Sansho (Kenji Mizoguchi, 1954)

POR EL CINE ACTUARIO

Ganadora del León de Plata para Kenji Mizoguchi, es una historia alrededor del esclavismo con una alta dosis de humanidad, resumiendo en la frase más popular de la película “Si una persona no siente la caridad, no es una persona. Incluso ante tu enemigo hay que sentir la caridad”, relata el valor de la dignidad humana ante cualquier individuo no importando su status económico, removiendo las entrañas del espectador a través de personas cegados por su egoísmo antes las crueldades de un sistema (que aunque ya no hay feudalismo poco ha cambiado) que se aprovecha del débil para beneficiar al que más posee. Estupendamente fotografiada está cinta es un retrato de esperanza ante una crueldad deprimente

 

E.T.: The Extra-Terrestrial (Spielberg, 1982)

Por El Fett

El otro tipo de encuentro cercano del tercer tipo de Spielberg, quizá sea la cinta más adecuada para adentrar a un infante hacía el amor al cine o específicamente al género. Si bien con el tiempo su impacto ha disminuido, esto no es debido a que sus elementos dejen de mantener la calidad en comparación a la evolución narrativa, sino porque básicamente está concebida como una fábula de ciencia ficción infantil, por lo que la madurez y/o adultez pueden perder no solo la capacidad de asombro, sino también su inocencia. Dos preguntas ¿Es posible llevar al estatus de culto a una película gracias a su pura banda sonora? Posiblemente ¿E.T. hubiera funcionado sin el score de John Williams? Absolutamente no.

 

Fanny y Alexander (Bergman, 1982)

Por EL FETT

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Su última película es, según él mismo, su ensayo más personal. En ella se narran las desventuras de los hermanos Fanny y Alexander, dos niños testigos del crecimiento y crisis de una familia sueca de finales del anterior siglo y en donde el autor aborda desde la situación relacional de los miembros y conflictos financieros y laborales, hasta la muerte del patriarca y el casamiento de la madre con un estricto pastor de doble moral ¿Resulta cercano? Principalmente a través de Alexander, sumerge al espectador en una atmósfera y visión infantil que enriquecen una odisea que traduce complejos temas religiosos, sexuales y paranormales en anecdotarios llenos de simpleza e inocencia. Poseedora de una narración progresiva en ritmo e intensidad, su último acto de expiación y detonación anti espiritual se convierte en un deleite, quizá el remanente visual más ideológico sobre el tema de parte del director que en realidad nunca dejó de visionar al arte como un “Alexander”.

 

Festen (Vinterberg, 1998)

POR EL FETT

Thomas Vinterberg aprieta pero no ahorca y destruye sin ser invasivo. Ganadora del premio del jurado en Cannes y curiosamente promocionada sin director, esta sería por encima de lo hecho por Von Trier quizá la cinta más simbólica del Dogma 95 (y también la primera). En la celebración de los 60 años del patriarca de una familia de la alta burguesía danesa, sus tres hijos están a punto de aprovechar la ocasión para sacar a relucir los trapos sucios de la familia y con ello, manchar la reputación de un hombre que parecía ser intachable. Vinterberg no solo filma, sino que se adentra en la psicología de una familia y nos hace participes segundo a segundo de la incómoda situación ¿lo mejor?, que la misma es sugerida y no impulsivamente revelada, manteniendo también un halo de suspenso y comedia accidentada sublimes. Un pedazo de obra maestra.

 

Frozen (Chris Buck, Jennifer Lee, 2013)

Por Glen

Este fue el éxito que la compañía había planeado con Enredados. Tarde pero seguro, Frozen vino a romper récords nuevamente con un cuento altamente modificado a los estándares de felicidad de Disney. Regresando a la fórmula que funcionó 20 años atrás, inyectando elementos teatrales a la música pero actualizando el carácter de los personajes, se logra una amalgama altamente disfrutable. Aquí se burlan indirectamente de sus propios clichés (sobre todo en cuestión al príncipe)  a la vez que invierten un poco los roles, centrándose en el amor filial y no en el romántico. Si por mi fuera estaría más alto en el top ¡Porque libre soy, libre soy!

 

 Gravity Falls (Alex Hirsch, 2012-2016)

POR URIEL SALVADOR

Mediante la revelación de pistas en forma críptica, da pauta al surgimiento de pequeños misterios que ocultan uno más grande y digno de Lovecraft. Aunado a la gran variedad de chistes, ideas ingeniosas sobre diversos tópicos y sus carismáticos personajes, logra una combinación que toma la interactividad del presente y la nostalgia del pasado, desembocando en un final intenso y conmovedor. No es tan perfecta como parece (depende de muchas conveniencias para avanzar la trama principal y la caracterización de Mabel y Wendy ha envejecido horrible), pero tiene un poco de todo para niños y adultos, y lo más importante: dura justo lo que tiene que durar.

 

Gritos y Susurros (Bergman, 1972)

Por EL FETT

Sussurri e grida - Ingmar Bergman

La hegemonía de la feminidad ve su pináculo en esta multi galardonada obra maestra. Un color rojo oscuro que evoca la sangre y religión pinta las paredes, los techos y el piso de una mansión en la que 3 hermanas se reúnen debido a la próxima muerte de una de ellas. Pronto los recuerdos comienzan a surgir y entre ellos los fantasmas: disfuncionalidad familiar, infidelidad, falta de espiritualidad y sobre todo muerte, esta última en uno de sus mayores referentes narrativos. Sobre este ensayo el director recalca la ausencia del “hombre”, usándolo como mero valor simbólico para que el poder y la ternura femenina desemboquen un cuento dramático que raya en lo fantástico y romántico; al final la revelación se tornará como su color, pero su ritmo sobrecogedor hará vivir al espectador un efecto de paz en dicha transición.

 

Hannah and Her Sisters (Allen, 1986)

Por El Fett

Quizá podamos encontrar la definición perfecta de lo que es una tragicomedia en el idilio tóxico entre estas hermanas y el esposo de una de ellas, un soberbio Michael Caine que carga con la batuta del relato y que sirve en esta ocasión como la representación o el alter ego del mismo Woody Allen (aquí relegado a otro personaje). La perfección narrativa se extiende a la construcción de cada uno de sus personajes y por supuesto de este triángulo familiar que trata de cualquier manera de sobrevivir socialmente a sus impulsos y deseos, tema recurrente en el cine de Allen y que aquí se plasma con una elegancia fascinante (más drama que comedia). Nominada a 7 Oscar, esta cinta es una verdadera joya, y un poco relegada en su filmografía

 

Harvey (Koster, 1950)

POR EL FETT

Harvey no es un simple amigo imaginario, sino un pooka, una antigua criatura de la mitología griega que ha adoptado la forma de un conejo gigante amable, bonachón y amante de los cocteles, que acompaña a todos lados al querido Elwood (Stewart), al cual su familia ha decidido recluir en un psiquiátrico al notar que la relación con su amigo se ha incrementado. El problema es que Harvey quizá sea más real que todo el mundo que rodea a Elwood. Cautivadora, esta tragicomedia de momentos maravillosos y toques surrealistas se convierte en un análisis social de gran complejidad e inocencia, cuando el pooka de alguna manera se relacione con todo el entorno del supuestamente afectado protagonista, un Jimmy en el papel más tierno de su carrera, y donde con maestría realiza una química extravagante y soberbia con algo que no parece existir ¿o sí?

 

His Three Daughters (Azazel Jacobs, 2023)

POR JOSE ROBERTO ORTEGA

Las relaciones intrafamiliares entre tres hermanas quienes se ven reunidas debido a la situación crítica de salud de su padre son el pretexto para una catarsis emocional que las llevará tanto a encontrarse como a confrontarse, entre ellas y con los resentimientos hacia con su progenitor, mientras esperan que suceda lo inevitable. Sin duda una dirección acertada, que se recarga en tres actuaciones impecables de su reparto femenino (destaca la de Elizabeth Olsen), para llevar una historia que capta momentos emocionales álgidos, con diálogos punzantes y momentos de silencios bien planeados, que llevan a capturar momentos de intimidad con un detallado manejo de fotografía. La metáfora de la ausencia del padre es conducida de forma efectiva, hasta explote en un momento de epifanía

 

Jumanji (Johnston, 1995)

POR EL FETT

Sin duda una de las películas más vistas y queridas por los niños millennials, repetida hasta el cansancio en la televisión y con un Robin Williams que abandonaba por momentos su faceta cómica para hacer de un trágico adulto atrapado en un siniestro juego de mesa selvático. El mensaje paternofilial sin duda es lo más destacable, así como la combinación de efectos prácticos y por computadora que en aquel tiempo causaron la sensación de los pequeñines con retorcidos animales y aventuras por doquier. Fiel a su concepto, la cinta significó para Joe Jhonston una seguidilla de niveles que cumplieron su único objetivo: entretener (por cierto, la infravalorada serie animada fue mucho mejor)

 

 Jurassic Park (Spielberg, 1993)

Por EL FETT

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La figura del Tiranosaurio se posa de manera amenazante y majestuosa frente a la mirada atónita de millones de cinéfilos que observan maravillados cómo lo imposible se hace realidad. El Rey Midas (en su mayor estado de gracia allá por los principios de los 90), se convirtió en más que un director, en un científico, en un artesano que supo adaptar las ideas de la novela para revivir a los dinosaurios, criaturas que se han mantenido en el colectivo memorial del humano desde su temprana etapa educativa y vivencial ¡Que encuentro tan soñado! La ciencia ficción hizo posible dar vida a los verdaderos protagonistas del film, por supuesto ayudados por un carismático reparto de víctimas y gritos

 

La Otra (Gavaldón, 1946)

Por Cat Movie Lee

En plena década de los 40, Dolores interpreta un papel doble, sí, de gemelas. Magdalena y María son dos hermanas que tienen su historia. Una queda viuda de un millonario, la otra era manicurista y víctima de la avaricia y la necesidad, decide matar a su hermana, hacerse pasar por ella y cobrar su jugosa fortuna. Le juro que es para morderse las uñas, exquisita, fabulosa y magistralmente interpretada por Lolita. Curioso que su actuación más brillante sea ésta, en donde no fue dirigida por el Indio, ni actuó con Armendáriz, ni la fotografió Gabriel Figueroa. En la historia la acompañan Víctor Junco como su pareja y Alex Phillips en lugar del fotógrafo mexicano. La película ocupa el lugar 25 dentro de las 100 mejores del cine nacional.

 

La Tumba de las Luciérnagas (Takahata, 1988)

Se cuenta que el escritor recibió propuestas para llevar su obra al cine, pero en forma de live action, a lo que él se negaba a vender los derechos argumentando que era imposible de llevarse a cabo, además de que la actuación de los niños no tendría la suficiente fuerza para interpretar a los personajes. Pero fue convencido por Ghibli, y a la hora de que Nosaka vio los guiones gráficos de la misma, quedó convencido de que esa era la única forma de que su historia viera la luz en una pantalla. “La tumba de las luciérnagas” es una obra maestra, animación completamente para adultos que muestra lo crudo de la guerra, y es el testigo perfecto para todas aquellas personas que murieron en la misma; lejos de los campos de batalla y de la primera línea frente al enemigo.

 

Lawless (John Hillcoat, 2012)

Por El Fett

Una cinta gansteril de bajo perfil pero de excelente dirección por parte de Hillcoat, sobre 3 hermanos traficantes de licor en la época de la depresión. Sorpresiva en su momento por el hecho de que a pesar de contar en su cast con Tom Hardy, Jason Clarke, Jessica Chastain, Gary Oldman, Guy Pearce Shia LaBeouf (en una de sus mejores actuaciones), pasaría desapercibida por cualquier cartelera y distribuidora latina. Lástima que un relato tan bien trabajado, con secuencias memorables y con personajes muy bien construidos, no haya logrado alcanzar esa valoración requerida. De resaltar lo del protagónico de Shia, y la química con sus dos hermanos (Hardy y Clarke), que construyen una fraternidad cruda y trágica.

 

Life is Sweet (Leigh, 1990)

POR URIEL SALVADOR

En esta ocasión, el día a día de una familia disfuncional se compone de situaciones donde el humor y una vibrante paleta de colores contrastan con la necesidad de sobreponerse a las caídas e inconvenientes que conllevan el trabajo y la rutina diaria. Destaca la aparición de una cálida Alison Steadman como una madre que será la unión entre todos sus miembros. Un poco lenta por momentos, pero Mike Leigh va de menos a más y nos recuerda que, lejos de lo que indica el título, la vida es más agridulce, pero es necesario sonreír ante los problemas comunes, el tiempo perdido y el fracaso personal.

 

Lilo & Stitch (Chris Sanders, Dean DeBlois, 2002)

Por Leo Idair

A poco de haber comenzado el nuevo milenio, Disney sorprendió con una historia emotiva que logró alejarse de lo meloso gracias a la presentación de personajes imperfectos. Disney regularmente se vende como moderno e inclusivo, pero todos sabemos que es de dientes para afuera, por eso sorprendió que se centrara en una familia ‘rota’ y al borde de la desintegración. Es de admirar su económica narrativa, pues en 85 minutos ocurre de todo: desarrollo de personajes fascinantes, escenarios de acción sci-fi, grandes gags cómicos y momentos desgarradores. La parte musical con canciones de Elvis pareciera integrada para pasar desapercibida, pero realmente realza grandes escenas. Ohana significa familia. Yo no estoy llorando, tú estás llorando.

 

Little Women (Cukor, 1933)

POR EL FETT

Una de las primeras adaptaciones de la célebre novela de Louisa May Alcott, y sin duda también una de sus mejores, la sensibilidad que imprime George Cukor al relato de las 4 hermanas toma un sentido más emocional gracia a ese refinado estilo y la conexión con su musa, Katharine Hepburn, que aquí comenzaba junto con Cukor a construir ese arquetipo de mujer recia que irrumpiría en el Hollywood sonoro. No confundir con su otra obra, Women, de unos años después, que también merece aquí una mención especial al ser el primer largometraje sin un hombre en el reparto, que dicho por el propio Cukor, realizaría como venganza artística por sus tantos despidos injustificados a causa de su homosexualidad.

 

Little Women (Gerwig, 2019)

POR EL FETT

Uno de los relatos “coming of age” más influyentes y simbólicos, y que con Greta Gerwig ha alcanzado el punto máximo de su adaptación fílmica, moldeándolo a su estilo tanto técnico como narrativo, basado en su espontaneidad y esas secuencias de largo alcance oral (gracias a sus fastuosos travelings). Lo que resaltan en estas mujercitas es el perfecto reparto, meticulosamente seleccionado no solo para entrar como anillo al dedo en su personaje, sino también para ser una extensión de la naturalidad de la propia directora, una comunión reflejada a lo largo de toda la cinta. En esta adaptación, y a diferencia de todas las otras versiones desde principios del siglo pasado, aquí si se hace sentir la muerte de Beth.

 

Los Amantes del Círculo Polar (Julio Medem, 1998)

POR URIEL SALVADOR

A partir de establecer el romance como una casualidad, Julio Medem narra una historia sobre retroceder y avanzar, ir y venir, mezclando ensoñación y realidad que muestran el amor como algo normalmente transitorio, pero existente. Fele Martínez y Najwa Nimri encarnan a 2 amantes hermanados, con puntos de vista subjetivos, pero igual de complejos y que dejan ver a la vida, el destino, la suerte y la muerte como un ciclo que se abre y cierra en el mismo lugar. Un drama complejo donde las metáforas e imágenes crean momentos poéticos que quedan incrustados en la perpetuidad en la memoria, ejemplificado en su bifurcado y trágico final.

 

Los Hermanos Del Hierro (Rodríguez, 1961)

POR EL FETT

Los hermanos del hierro (póster) - Ismael RodríguezEl pináculo del western mexicano: salvaje, revolucionario, musical, ranchero; Antonio Aguilar lucha contra su hermano por el amor de la joven Jacinta, y una hermandad que fue forjada a raíz de la violencia, de un silbido y del asesinato de su padre, posteriormente es alimentada por la sed de venganza de su madre, la enseñanza de un pistolero y la conducta sanguinaria desatada por el menor de los Hierro. Un western complejo, sádico y romántico, que puede equipararse sin problema a las piezas europeas o estadounidenses y que en su innovación hacía con la idiosincrasia mexicana, trasgrede a la figura de la madre para situarla como villana, haciendo que esta ágil y desembocada cacería termine en una previsible pero genial y metafórica tragedia.

 

Los Tres Huastecos (Rodríguez, 1948) 

POR CAT MOVIE LEE

En una cinta por demás innovadora para su tiempo, Pedro se reinventa haciendo 3 papeles diferentes como los hermanos Andrade: Juan de Dios, el sacerdote potosino, Víctor, el soldado veracruzano y Lorenzo, el tamaulipeco ateo y macho. Siendo precisamente este último, el personaje que más atrapa, que enternece y más termina gustando gracias a que, sin importar la época en la que nos toque vivir, no hay nada más extraño y fascinante que ver a un padre dedicado en cuerpo y alma a su hijo, y mayormente en un entorno mexicano y en el contexto en el que se grabó esta obra. Si Pedro, la mismísima representación del hombre prototipo de toda una generación, pudo ser el mejor de los padres  ¿por qué los demás no habrían de poder?

 

Melancholia (Von Trier, 2011)

POR EL MARKOVICH

Melancholia (poster) - Lars Von TrierPor más que intenté evitar hablar sobre filmes del fin del mundo, me resulta imposible descartar esta pieza ya que no es el bodrio cliché catastrófico hollywoodense. Demandante como siempre, von Trier plantea la llegada de un elusivo planeta a nuestra órbita, que poco a poco toma el curso de colisión inminente contra la Tierra. Por más espectacular que suene, ese no es el tema principal de la obra. El verdadero foco son las emociones y conflictos de una familia y la manera en qué cada uno de sus miembros lidia con la cercana aniquilación. Quizá te lleve a preguntarte cuál de ellos serás tú si este lío se agrava aún más. Las veces que la he visto el final me pone muy de buenas…decidan si tengo pedos o no cuando la vean (o si el que tiene pedos es von Trier)

 

Memoir of a Snail (Adam Elliot, 2024)

POR URIEL SALVADOR

La principal virtud de esta historia es mezclar bastante bien los elementos cómicos con los más dramáticos, con un ritmo ágil que aprovecha cada momento de convivencia entre un par de hermanos, una chica aficionada con los caracoles y un pirómano muy carismático. Esto viene de la mano con uno de los acercamientos más introspectivos sobre el estancamiento que provoca la depresión, así como el apoyo requerido para animarse a vivir (simbolizado en la figura de Pinky). Es cierto que peca de ser muy manipuladora y sermonera, pero el trasfondo que propone la hace fácil de ver e identificarse, porque en esta vida llena de desgracias, hay que reír para evitar ahogarse en lágrimas.

 

Malcolm in the Middle (2000 – 2006) 

POR EL FETT

A pesar de su obvia influencia de la gente amarilla, Malcolm in the Middle prevaleció precisamente y gracias al carisma y talento cómico de sus inmiscuidos, tanto principales como secundarios y/o invitados de esta familia, parte primordial de su éxito fueron aquellos excelentes cameos o apariciones sorpresas que, como en toda sitcom, se situaban en actores veteranos y/o leyendas. Por otro lado, y aunque mucho se le atribuye a Hal, la química entre los 4 hermanos siempre fue el motor de la genialidad y del humor de esta serie, dando una rica paleta de travesuras, dudas adolescentes y aventuras en la interacción entre estos y/o con sus padres. Aunque se fue apagando, sus dos primeras temporada son ORO PURO

 

Millions (Danny Boyle, 2004)

POR URIEL SALVADOR

Danny Boyle sale de su zona de confort con la película navideña perfecta para el mundo moderno, intercambiando la nieve y las postales por una pastorela de bajo presupuesto y un robo con música de Muse. Lo que la eleva es que, si bien llega a la conclusión de que el dinero a veces causa más problemas de los que vale y que las buenas acciones triunfan sobre el consumismo, también está de acuerdo en que comprar cosas es muy divertido, todo sin parecer contradictorio o sermoneador. Un cautivador cuento injustamente mandado al olvido que, en medio del realismo, se las arregla para ser total y absolutamente mágico.

 

Tonari no Totoro (Mi Vecino Totoro, Miyazaki, 1988)

 La imagen oficial del estudio, y película donde nos muestra que no es necesario tener una gran historia con grandes giros de tuerca para impresionar al público. Más que historia ‘Mi vecino Totoro’ es una anécdota corta en la que dos hermanas se encuentran con el protector de la naturaleza, un ser gigante y peludo que tiene por gusto tomar grandes siestas. Lo sencillo de su narrativa y los personajes infantiles (de las hermanas) hacen que sea una película ligera de llevar, donde vemos el día a día de estas niñas donde juegan y exploran la naturaleza, pero a la vez aprender de la soledad y la pérdida. Es imposible no salir con una sonrisa de oreja a oreja una vez terminada la película, sobre todo con el pegadizo tema de los créditos finales.

 

Nadie sabe (Koreeda, 2004)

POR EL CINE ACTUARIO

A través de la historia del abandono de una madre a sus cuatro hijos, Koreeda hace una crítica social profunda sobre la protección del infante en un mundo hostil y cruel. Hirokazu plantea una metáfora dónde estos niños no solamente serán abandonados a su suerte por su madre, sino que el resto de la sociedad les dará la espalda al punto en que tendrán que abandonar rápido su infancia para poder sobrevivir en la “jungla de concretó”. Dura, fuerte, pero necesaria para reflejar que aunque se diga de dientes para afuera que “los niños son primero “ muchas veces en la escala social terminan siendo lo último.

 

Nos amábamos tanto (Scola, 1974)

Por El Fett

“The Best Years of Our Lives” tiene el mismo significado fílmico cultural para Estados Unidos que “Nos amábamos tanto” lo tiene para Italia. Ettore Scola se daba a conocer con un drama de posguerra donde tres soldados que combatieron y forjaron una amistad en la Segunda Guerra Mundial, regresan a su devastada nación solo para encontrarse con un peor conflicto, el de la adaptación a un mundo que ya no conocen, y en donde sus ideologías serán resquebrajadas ante el nuevo orden político de un país en plena reestructura. Vittorio Gassman lograría algunos reconocimientos por su magnífica actuación, pero no hay que perder de vista a un reparto que incluye los nombres de Nino Manfredi y Aldo Fabrizi.

 

Nuestra pequeña hermana (Koreeda, 2015)

POR EL FETT

Quizá su película más contemplativa en lo visual, pero que respeta dentro de ese estilismo, su sentido de transfiguración emocional – familiar frente a una tragedia pasada que aquí si se torna un poco más esperanzadora y redentora. Sensible pero sin llegar a lo manipulador (línea que si ha cruzado en algunas ocasiones con Broker o La Verdad), Koreeda narra a través de la llegada de una hermana menor, la compostura psicológica que dicho reencuentro hace tener a tres hermanas que, no solo tendrán que lidiar con el duelo de un padre ausente, sino con la representación de este en una nueva hermanastra que tienen que cuidar y conocer. Muy bello retrato de la sociedad japonesa, de su feminidad y de la aceptación.

 

Nueve Reinas (Fabián Bielinsky,2000)

POR EL CINE ACTUARIO

Dos estafadores que tienen menos de 24 horas para realizar el atraco de sus vidas, termina convirtiéndose en una mezcla de thriller y comedia sumamente ágil que envuelve al espectador conforme transcurre la trama. A pesar de los giros, este vehículo no da vuelta únicamente porque puede, sino que cada vez que jala la tuerca va exponiendo más información y contenido importante para el desarrollo de la trama. La dirección crea esta atmósfera inquietante y entretenida, sobre todo al resaltar las vueltas de la trama. En una época donde las historias gustan de impactar, pero la elaboración termina siendo superficial, Nueve Reinas es una clase de cómo mantener entretenida a la audiencia con calidad

 

Onward (Dan Scanlon, 2020)

POR EL FETT

Lo hecho por Scanlon en Onward no es malo, pero sí muy mediocre. Aunque es de tomarse en cuenta que es la primera película de Pixar donde la productora se mete de lleno al mundo de la fantasía, con hadas, elfos, duendes, dragones y demás lore fantástico, es la historia que cuenta la que atrapa por completo al espectador con la vieja confiable de los “daddy issues”, en una típica road movie que tiene sus buenos momentos, pero que le falta ese toque emocional solo Pixar sabía hacer (mejor) y que incluso en el mismo año se vio rebasada por otra mediocre, pero al menos mejor dirigida, Soul. Como todo lo hecho por Scanlon, Onward pasa a ser otro producto olvidable.

 

La Palabra (Ordet, Dreyer, 1955)

POR EL FETT

Nunca ha habido un film tan teológico y a la vez tan crudo y crítico sobre la fe y la toxicidad del dogma religioso como el de Carl Theodor Dreyer. Su tensión, resultado del pique de ideologías y del elemento surreal en la presencia del “Jesucristo”, es tan placentero como estremecedor. Lo imponente de este film no solo radica en una teatralidad lírica e hipnótica, resultado de la naturalidad de sus actuaciones y de ese cast “de voces” tenues que por sí solas agregan personalidad a sus “encantadores” personajes, sino principalmente en el poder de esa “palabra”, y del poder de esa verdadera fe por sobre las corrientes y los dogmas preestablecidos por instituciones y por el cinismo de la sociedad. La figura femenina se alza, tierna y cautivadora, para un gran e imponente final.

 

Paisaje en la Niebla (Angelopoulos, 1988)

POR URIEL SALVADOR

Serena, pero inestable, a veces dubitativa, pero de avance rígido, a veces hermosa y otras fría y distante. Los tonos grisáceos advierten de un futuro poco prometedor para los hermanos protagonistas, logrando un equilibrio entre belleza emotiva a través de la bruma y la crueldad inevitable por parte de los adultos. Repleta de simbolismos, Theo Angelopoulos crea algunas de las escenas evocadoras más inimaginables, que invita a enamorarse de esta introspectiva reflexión sobre la condición humana a pesar de su miseria, que permea en un final intenso y esperanzador.

 

Pather Panchali (Ray, 1955)

POR URIEL SALVADOR

La primera película de una India recién liberada del yugo británico, el debut de Satyajit Ray aprovecha el poderío visual y retrata los problemas cotidianos de una familia bengalí tradicional. A través de los ojos del pequeño Apu, los gestos y las miradas dicen más que las palabras y revelan una niñez destruida por la pobreza desde cada miembro de su familia: una madre endeudada que cuida a sus hijos sola, una tía anciana con graves problemas seniles, un padre y esposo irresponsable y una hermana que oculta su templanza en sus mañas. El duro clímax deja en claro que el camino de la vida es áspero, pero que no hay mejor empujón que el amor familiar, y por más cursi que suene, es cierto.

 

Pretty Village, Pretty Flame (Srdan Dragojevi?, 1996)

POR URIEL SALVADOR

Después de Underground, ésta es la película más conocida sobre la Guerra de los Balcanes, sólo que opta por un realismo crudo que examina las tensiones que llevaron a la disolución de Yugoslavia. El culposo humor negro del que se vale Srdan Dragojevi? sólo acentúa e intensifica la oscuridad del conflicto y el odio generado por las luchas étnicas. Un doloroso recordatorio de lo rápido que la felicidad y la paz pueden degenerar en caos y violencia, pero también de una conexión entre bandos rivales que les permite ver la luz al final del túnel, de una amistad que intentó mantenerse unida mientras veía a su patria consumirse en el fuego de la guerra.

 

Orgullo y Prejuicio (Joe Wright, 2005)

POR JOSE ROBERTO ORTEGA

La obra más adaptada de Jane Austen, es esta versión la que mejor captura la esencia romántica, intrigante y desafiante de la novela. La historia de las hermanas Bennet, cuyo único afán parece ser el encontrar un marido aristócrata, y de Elizabeth, la más inteligente y perspicaz de ellas, quien busca casarse sólo con un pretendiente con quien el amor sea mutuo y no sólo conveniente. El interés amoroso es Mr. Darcy, que en un principio parece soberbio y orgulloso, pero que se va ganando de a poco el corazón de Lizzy (y de toda la audiencia femenina, suspiros de por medio, gracias a una de las escenas bajo la lluvia más recordadas). Con un diseño de producción que raya en la perfección y una fotografía preciosista, Wright entrega una adaptación muy adecuada del libro, recargado en una actuación portentosa de Knightley, quien se sobrepone incluso a un insulso Macfadyen en el papel de Mr. Darcy

 

Rachel Getting Married (Demme, 2008)

POR EL FETT

Un drama muy infravalorado, que detrás de su complejo estudio psicológico sobre el personaje protagonista, se esconde una tensión progresiva y creciente basada en la condición cambiante de la misma, una bipolaridad que hace que el espectador se compenetre con la lástima y la amenaza que representa esta frente al evento que engalana el título del film, la boda de su hermana Rachel. Hatthaway  en su primera nominación al Oscar como Mejor Actriz, como la inestable “Kim”, entregaría una magistral actuación llena de emotividad y locura interior, acorde al tono que su director imprime para incrustar su característico suspenso en este loco e inestable (para bien) drama.

 

Ran (Kurosawa, 1985)

POR EL FETT

Ran - Akira Kurosawa

Su última joya quizá sea las más preciada, precisa y preciosa, una fábula bélica armoniosa de principio fin que denota la experiencia narrativa adquirida por todos los años y donde se despliega una cátedra de equilibrio entre el contexto, ritmo y apartado visual. Akira Kurosawa no tiene piedad, la traición a la sangre es bárbara y se encargará de mostrarlo. Su técnica visual, su Shakespeare, su Ford, su samurái, su honor, su linaje, su mujer como demonio y el amor a su adaptación, estilo y nación se funden en conjunto en una consecución simbólica que funciona como auto homenaje a toda su obra. Lo mejor de su cine se traduce en la secuencia de la invasión a la última fortaleza, una secuencia maestra y categóricamente dirigida digna de ver una y otra vez y resguardarse en los anales más elementales del séptimo arte ¡Larga vida Kurosawa!

 

Rain Man (Levinson, 1988)

POR EL FETT

Una película que siempre ha sido más de lo parece y/o aparenta, como por ejemplo, ser la única ganadora del Oscar y del Oso de Oro en la historia. A nivel general como film palidece ante varios ganadores de ambos, pero a nivel actoral Hoffman está ¡MOUNSTRUOSO!, desarrollando quizá una de las mejores interpretaciones sobre un personaje de estas condiciones y por ende desatando una química que convierte a este film en un testimonio dramático muy natural, sin emociones desbordadas y un final lejos de las convencionalidades “alegres” de Hollywood. También una de las mejores películas fraternales, hay varias secuencias ya icónicas  muy emotivas dentro de la cultura pop

 

Rocco y sus Hermanos (Visconti, 1960)

POR EDGAR DEL VALLE

Dirigida por Luchino Visconti con Alain Delon, Renato Salvatori, Annie Girardot y Katina Paxinou.  Rosaria y sus cuatro hijos (entre ellos Rocco) abandonan su tierra natal, para emigrar a Milán en busca de trabajo y oportunidades que les permitan mejorar sus condiciones de vida. Allí encuentran al hermano mayor, que trabaja de albañil pero que está relacionado con el mundo del boxeo.  Con tintes de tragedia griega que contribuye al neorrealismo del cine italiano, esta sería una de sus obras más referenciadas y que serviría como uno de los últimos testigos de la pureza de aquella corriente. En 1961 es nominada a los premios BAFTA como Mejor película y actriz extranjera (Girardot).

 

RRR (S.S. Rajamouli, 2022)

Por Dastan

La fortaleza de esta historia es el acierto de presentar a sus dos personajes principales enfrentado obstáculos y objetivos diferentes, determinando adecuadamente sus líneas historiales. Los puntos de conflicto en la narrativa están bien ejecutados, y a pesar que el relato resulta predecible, no disminuye ese clímax emocionante antes de esos giros argumentales bien locos, siendo una explosión de entusiasmo cuando los caminos de los dos convergen. Esta película alcanza todo lo que Hollywood con sus superhéroes no consigue entender, porque aquí todo funciona y sorprende que lo logra en un ambiente exagerado, lleno de adrenalina y proyectando una verdadera amistad entre los héroes.

 

Sinners (Ryan Coogler, 2025) 

POR EL FETT

No es solo una analogía tremenda a la masacre del KKK y a la segregación racial del “no blanco” en todas sus formas (negra, irlandesa, asiática, india), sino también un himno de amor a los orígenes del blues y de aquel “bluesista” clásico y la lucha de este en contra de las propias condiciones socio raciales. También es un “Del Crepúsculo al Amanecer” 100 veces mejorada, con un eficaz trasfondo y desarrollo de personajes, un violento entretenimiento, pero sobre todo una construcción reflexiva sobre el folclor del sur. Ryan Coogler hace su película más arriesgada y entretenida a la fecha, una combinación de géneros (suspenso, horror, vampirismo y hasta musical) muy en el tono de la corriente “grindhouse”. Es sucia, improvisada, pasional y profunda, como cualquier buen blues.

 

Song of the Sea (Tomm Moore, 2014)

POR ARQUICRUZ

Para muchos la mejor película de Cartoon Saloon, en esta historia nos narran las aventuras de Saoirse y Ben, quienes viven en un faro con su padre, pero luego tienen que mudarse al descubrir que la niña al igual que su madre es una criatura mágica conocida como Selkie (criaturas que pueden transformarse en sirenas o focas, según la región o interpretación), y una bruja busca apoderarse de su poder. Basada en leyendas típicas del Norte de Europa, Song of the Sea ofrece algo diferente a los típicos daddy´s issues y problemas de falta de identidad que vemos en las cintas gringas. Visualmente es una delicia, pero es narrativamente que alcanza picos muy altos de emotividad y fantasía. Joyita escondida de la animación

 

Spy Kids (Rodríguez, 2001)

POR URIEL SALVADOR

Cursi, simplona, exagerada, predecible y con unos efectos especiales que hasta para la época eran tan anticuados como falsos. Y por todo eso dejó marca al ser una parodia al cine de espías que, con una historia y un tratamiento de lo más simple, funciona porque no se toma en serio. La readaptación de los elementos de Robert Rodriguez a un público infantil tiene una identidad tan marcada que sería elegida para su preservación, pues la hermandad entre Carmen y Juni acierta en su mensaje: “Salvar al mundo es sencillo, mantener a la familia unida es difícil”. De sus 4 secuelas sólo la segunda parte conservaría parte de la frescura inicial.

 

Stand by me (Reiner, 1986)

POR EL FETT

Además de Darabont, Reiner ha sido e otro director que más ha comprendido la obra de King, ajustando ciertos elementos de las fuentes originales para que funcionen en pro de lenguaje fílmico ¿Han notado que muchos o la mayoría de los escritos de Stephen King contienen en menor o mayor grado una naturaleza “coming of age”? It, The Shining, Pet Sematary, Carrie, The Green Mile, Children of the Corn, The Dark Tower y por supuesto esta, una de los relatos fílmicos por antonomasia de dicho tópico, donde gracias a Reiner, la narrativa de King es tan respetada como perfectamente nutrida por el excelente trasfondo y lazos juveniles entre sus entrañables protagonistas. Quizá sea verdad, pero para el cine King vale más como dramaturgo juvenil.

 

Star Wars, The Empire Strikes Back y The Return of the Jedi (George Lucas, Irvine Kershner y Richard Marquand, 1977, 1980, 1983)

POR EL FETT

¿Por qué Star Wars sigue siendo la trilogía del género fantástico por excelencia? Muy sencillo, y es la apropiación y abarcamiento de distintos elementos culturales, fílmicos, folclóricos, políticos y familiares en una adaptación visual y narrativamente equilibrada, impresionante y muy emocional. Uno de esos elementos familiares, y quizá el principal, sea el del padre con el hijo, muy propio de la mitología griega y que se ve su pináculo en el Episodio V, sin embargo será el desarrollo entre los hermanos Skywalker el concepto principal en la narración del VI, de donde se desprende incluso la culpa final de Vader y su redención con el mensaje final hacía Luke. Puro amor.

 

Submarino (Vinterberg, 2010)

POR EL FETT

La palabra “Submarino” hace referencia a un sistema de tortura del que el director se sirve de aplicar “fílmicamente”, llevando a la audiencia a un estado de desesperación máxima ante una progresión de situaciones que nos hacen incluso caer en una depresión empática por los personajes. Pero no todo es sufrimiento en las joyas de Thomas Vinterberg, siendo esta quizá también la más redentora, planteando un reinicio vivencial perfectamente comulgado entre un desgarrad acto inicial y una hermosa y cautivadora escena final. La vida de dos hermanos, tocados por un suceso trágico vivido de niños a causa del alcoholismo de su madre, se ve de nuevo sacudido por tragedias diferentes que de manera espiritual y física los llevarán a unirse de nuevo, destaca la imponente y entrañable actuación de Jakob Cedergren, mismo de la también sublime The Guilty

 

Sweetie (Campion, 1989)

POR URIEL SALVADOR

La exageración con la que Jane Campion explora los sentimientos humanos de forma intimista y muestra la retorcida y satírica mirada a la dinámica familiar con la relación entre 2 hermanas claramente afectadas. Pone a cuestionar las nociones éticas mediante la aparición de Genevieve Lemon como una inestable narcisista con severos delirios de grandeza (increíble que hoy en día hay muchas personas iguales, convencidos de su propia brillantez). Aunque es incomprensible cómo puede calificar como comedia (los supuestos chistes son pobres o se tornan desesperantes rápidamente) es audaz en entender lo agotador que es lidiar con un potencial psicópata.

 

Taegukgi (Kang Je-gyu, 2004)

POR URIEL SALVADOR

Kang Je-gyu expone la brutalidad de la Guerra de Corea con la historia de un par de hermanos obligados a participar en ella, y mientras el mayor aceptará las misiones más peligrosas para proteger y sacar a su hermano de ahí, el menor atestiguará cómo el conflicto despoja de su humanidad a la gente por puro patriotismo. A medida que avanza el conflicto, también lo hace la degradación moral al mostrar las mayores atrocidades que cometen tanto el sur como el norte contra la población. Si bien se siente demasiado hollywoodense para su realización (por la obvia manipulación sentimental) y claramente se notan los efectos por computadora, sobresale por un final emotivo y sus explosivas escenas de acción.

 

The Blues Brothers (Landis, 1980)

Por FLACO CACHUBI

John Belushi y Dan Aykroyd, talentosos actores surgidos del Saturday  Night Live, lograron con The Blues brothers la mejor comedia de sus carreras y uno de los mejores y más divertidos compendios y homenajes al  soul, jazz y rythm n´ blues con Aretha Franklin, James Brown, Cab Calloway, Ray Charles, entre otros, cuyas interpretaciones como “Think”, Shake a tail feather” y “Minnie the Moocher” resultan un verdadero agasajo para los amantes de la buena música. La escena final es espectacular, una efectiva parodia de los desenlaces artificiosos del cine hollywoodense, pero en general es difícil no emocionarse en cada uno de sus números musicales, cortesía de un John Landis en su apogeo directivo.

 

The Boss Baby (Tom McGrath, 2017)

POR EL FETT

La animación sorpresa del 2017 tocó el tema de la tendencia comercial del “Pet Friendly” de manera tan hilarante como fresca, dejando en claro que la información es poder, pero más importante, que el marketing se alimenta de los gustos, preferencias y tendencias del mismo consumidor y no al revés, como muchos ignorantes piensan. Lógicamente y aunque los animalitos siguen en el gusto, podrán notar en el lenguaje publicitario actual que esto ha evolucionado a un mensaje de empoderamiento femenino e inclusión social como principales tendencias ¿coincidencia? ¿magia? No. Pura mercadotecnia, y por supuesto la voz del Bebé Jefazo, que encontró su tono y personalidad perfectas de la voz de Baldwin

 

The Brothers Karamazov (Kirill Lavrov, Ivan Pyryev y Mikhail Ulyanov, 1969)

POR URIEL SALVADOR

No es tarea fácil llevar a Dostoyevsky al cine, y en este caso fueron necesarios 3 directores y 3 horas y media de duración para hacer realidad ese milagro. Lo más destacado que tiene esta versión es la creciente profundización en el conflicto interior de cada personaje, de manera que ahonda en las cuestiones de Dios, el libre albedrío y la moral, así como la reconstrucción de los detalles de época en la escenografía y los vestuarios. Un drama teológico que aborda problemas de fe, duda y razón, y aunque Ivan Pyryev (principal responsable de adaptar la novela) deja fuera partes clave, es una joya especializada en el estudio de las emociones humanas, donde destaca la actuación de Kirill Lavrov como Iván Karamazov.

 

 The Brothers Karamazov (Richard Brooks, 1958)

POR EL FETT

Tan solo un par de años después de que compareciera ante el Senador McCarthy y su lista comunista negra, Lee J. Cobb lograría uno de sus mejores papeles como Fyodor Karamazov, por lo que la Academia no pudo hacerse de la vista gorda ante tan impactante desempeño, otorgándole su segunda y última nominación al Oscar. Un clásico épico, dramático, la adaptación de la novela de Fiódor Dostoyevski resultó ser una excelsa recreación histórica donde su director, Richard Brooks, mostró un peculiar respeto por el argumento y narrativa de una familia rusa y sus complejos problemas socio-relacionales en el Siglo XIX. A pesar de su duración, la cinta logra ser muy tensa y entretenida.

 

The Darjeeling Limited (Wes Anderson, 2007)

POR EL FETT

Desde que su padre falleció, tres hermanos (Owen Wilson , Brody y Schwartzman) no habían tenido algún contacto entre ellos, hasta que deciden emprender un viaje en tren a través de la India. Sin conocimiento del punto final de llegada, este viaje es para zanjar y reavivar viejas rencillas entre el trío de hermanos, y realizar extraños rituales para sanarse espiritualmente. Mientras que Wes hace lo mejor que sabe hacer, escribir sobre familias disfuncionales, vemos cómo la cámara viaje por todo el tren. Adornado de grandes secuencias cómicas y muy bien logradas, Anderson logra sacar una buena dosis de humor hilarante gracias a la química y comedia física de sus tres fetiches.

 

The Day the Earth Blew Up: A Looney Tunes Movie (Peter Browngardt, 2025) 

Por Leo Idair

Porky y Lucas nos hacen recordar esos días noventeros en los que volvíamos de la escuela y nos perdíamos durante horas con las peripecias de estos personajes liderados por un queridísimo Bugs Bunny. Repleta de referencias a muchas películas, siendo más directas aquellas sci-fi de los 50s, Invasion of the Body Snatchers (1956), The Day the Earth Stood Still (1951), The Blob (1958) pero también a cosas más pop de las últimas décadas, hace ce que se sienta más como una parodia al puro estilo Looney Tunes, sin que eso sea algo necesariamente negativo, cumpliendo con su principal objetivo, que es divertir, tocar la nostalgia de los millennials y hacer que éstos hagan perdurar la imagen de los Looney Tunes en su descendencia.

 

The Dreamers (Bertolucci, 2003)

POR EL FETT

Soñadores” está realizada con una técnica impecable: El manejo de los escenarios, las inserciones de escenas de películas clásicas (un deleite para los ojos de los verdaderos cinéfilos), la música magistralmente elegida, e incluso, las escenas de desnudos integrales, primeros planos de órganos sexuales, masturbación y coito, parecen tan naturales que uno ni siquiera nota en qué momento pasaron del diálogo a la acción. Más polémica que crítica, Eva Green sobreviviría a esta arriesgada primera incursión como actriz bajo el mando del siempre extravagante y criticado Bernardo Bertolucci, entregando lo que quizá siga siendo su mejor y más recordada actuación que irónicamente viene acompañada del deleite visual de su belleza en el máximo esplendor

 

The Fighter (David O’Russell, 2010)

POR EL FETT

La esperada y merecida gloria llegaría por el lado de un ex boxeador adicto al crack que hace todo para que su pequeño hermano sea mejor que él, comenzando así también su doble y mejor asociación directiva que ha tenido en su carrera. Globo de Oro, Oscar y todos los círculos de crítica rendidos a sus pies, exactamente a 10 años de su comienzo al estrellato Christian Bale reafirmaría su posición empática en personajes totalmente ajenos a la misma, sello que lo acompañaría durante otros 10 años. Quizá este sea también el ejemplo más evidente de su poderío metodista por sobre los demás compañeros de reparto, notándose de manera abismal su muy adelantado talento por encima de Walhberg

 

The Godfather (Coppola, 1971)

POR EL FETT

La historia de un inocente y ajeno vástago que se ve obligado a convertirse en un ruin y frio capo siempre leal a su familia y al recuerdo de su progenitor, es en si la esencia narrativa de su autor. Nótese de nuevo como Coppola además de ser un exquisito narrador, su verdadera habilidad recae en el poder de adaptarse a la fuente original, resultando en secuencias que son diseñadas con alto grado de precisión y maestría. Así pues, a través del poder, Francis lleva a su arquetipo a la degradación emocional incluso contrariando al padre (el “breaking bad” por excelencia del cine). Poesía pura hecha imagen, Francis Ford Coppola en su final ofrece un retrato salvaje de dicha transformación con la magnífica y escalofriante escena de una puerta cerrándose ante los ojos y el destino de Kay. Puro arte.

 

The Godfather Part. II (Coppola, 1974)

POR EL FETT

Ya en este punto uno podría poner el lugar tres en el uno, el dos en el tres o el dos en el primero ¡no importa! El nivel desplegado es sencillamente catedrático. Tomemos por ahora el ejemplo del segundo episodio de su epopeya mafiosa (cinta que será la de mayor influencia en el género por encima de su primera parte), donde Francis Ford Coppola sabe de nuevo impactar al dividir su relato en dos líneas temporales para que la del pasado cumpla dos objetivos: el primero, auto ensalzar el primer episodio a través de la estructuración de su Vito Corleone; el segundo, estructurar a sus hijos, con un clímax y escena final tan devastadoras como emotivas. Pacino logra consolidarse como el villano de los villanos, mientras Coppola firma desde aquí su entrada a las ligas mayores.

 

 The Incredibles (Brad Bird, 2004)

POR EL FETT

Dos valores distinguen a una de las mejores películas sobre superhéroes: la primera, un manejo excepcional del prólogo, conflicto y clímax que aborda con habilidad todos los estereotipos sociales – familiares y hasta educacionales de los suburbios americanos gracias al ritmo y asentamiento del elemento fantástico en un contexto real; la segunda, su compleja pero a la vez ligera temática adulta, la cual disfrutable y comprensible para niños , jóvenes y adultos, marca una tendencia en todo el film que servirá para dejar al plano “súper”  en segundo lugar, dando mayor  relevancia al divertido y complejo drama familiar con una sorpresiva libertad creativa. El plus, un villano sobresaliente y su siniestro plan

 

The Iron Claw (Sean Durkin, 2023) 

POR EL FETT

Durkin entra al mundo profesional del cine y la lucha libre con un relato biopic que brilla por su honesta y natural crueldad, respetando, pero también de cierta manera elogiando el oscuro relato de esta familia de luchadores. Enfundado en un intenso drama de corte paternalista, el también guionista emprende una estructura equilibrada de sus elementos, cuatro hermanos que verán en el ring su gloria y su fin introyectando sus propios traumas y el concepto surreal de su “maldición”, la cual es abordada desde un término más emocional y psicológico sin dejar un cabo suelto o fortuito. Mención aparte para Zac Efron, que logra aquí confirmar aquel talento actoral que había dado a relucir con Ted Bundy.

 

 The Lion King (Roger Allers, Rob Minkoff, 1994)

Por el Cine Actuario

Estamos hablando de quizás, la película de Disney más completa post Walt Disney; desde sus personajes carismáticos y bien diseñados, sus números musicales épicos (que incluye a Elton John), su temáticas sombrías y maduras alrededor de la muerte (siendo el acercamiento más fuerte en una cinta de Disney), los conflictos internos referentes a la personalidad (ser o no ser, recuerda quien eres) pero sobretodo sus enseñanzas acerca de entender el significado de la vida y el rol que jugamos cada uno en este delicado ecosistema. Está adaptación de Hamlet se ganó merecidamente un lugar en el corazón de los espectadores y consolidó a Disney en los 90’s como el león en la selva de la animación y sin preocuparse ¡Hakuna Matata!

 

The Meyerowitz Stories (Noah Baumbach, 2017)

POR EL FETT

La dosis de humor e histeria interpretativa es en definitiva el principal baluarte del film. En un primer plano tenemos a un Adam Sandler que para ese tiempo ya se movía como pez en el agua en este tipo de relatos, proveyendo un personaje tan desesperanzador como humano, y que en mucha parte recuerda a ese arquetipo de “Woody Allen”, influenciado obviamente por el mismo Allen hacía con uno de los sus alumnos menos brillantes: Noah Baumbach (que está por debajo de su compañera de clase Greta Gerwig). Así mismo y teniendo a otro cómico – dramático como Ben Stiller, ambos logran la química más asequible del film, formalizando una triada patriarcal por un Dustin Hoffman coherente y cautivador que sirve como el perfecto balance del film

 

The Others (Amenabar, 2001)

POR EL FETT

Dudo que a estas alturas la magnífica actuación de Nicole y la elocuencia narrativa de Alejandro Amenábar hayan pasado desapercibidas, pero por si acaso mantendré en secreto el refrescante y sobre todo perfectamente estructurado giro de esta cinta que al punto de vista de su servidor, cuenta con uno de los mejores bagajes histriónicos – dramáticos del género, en mucha parte (en casi de toda) gracias al avasallante protagónico de una Kidman en pleno apogeo. Basta decir que The Others no solo representa un rico ejercicio de suspenso de principio a fin, sino que su influencia sutilmente se ha expandido “a la mala”  por distintas bazofias a lo largo de los años que buscan la frescura de su argumento y giro de tuerca ¿Sexto Sentido? Pfff ¡Por favor! Pónganse serios

 

The Parent Trap (Nancy Meyers, 1998)

POR URIEL SALVADOR

A primera vista puede parecer una comedia familiar más del montón con sus momentos cursis, más un último acto que se arrastra mucho, pero más allá del valor nostálgico que todavía tiene, la travesía de unas hermanas separadas por reunir a sus padres es muy humorística y emocional gracias a la dirección de Nancy Meyers. Hay un balance bien conseguido entre un guion bien desarrollado, una sencilla ambientación y la conmovedora banda sonora de Alan Silvestri. Aunque Lindsay es tierna en su doble interpretación de las gemelas Annie y Hallie, y Hendrix tiene los mejores chistes, es Dennis Quaid quien brinda el aspecto emocional con el afecto y cariño que da a cada fémina en su vida.

 

The Prince of Egypt (Brenda Chapman, Steve Hickner y Simon Wells, 1998) 

POR URIEL SALVADOR

La mayoría de las cintas religiosas terminan dejando de lado la calidad de la narración para centrarse en el mensaje devoto, como si fuera una propaganda. Pero esta compleja adaptación del libro del Éxodo prefiere centrarse en la relación entre Moisés y Ramsés, y cómo por las acciones y valores de cada uno pueden convertir a un par de hermanos en enemigos. Antes de mandar un mensaje sobre hacerte creer en Dios, quiere contar un cuento bíblico muy conocido de la mejor manera posible, y más importante aún, le dio la fama a Dreamworks de ser un estudio revisionista que innovaba en sus producciones, permitiéndole alcanzar una cima a la que no regresaría por 12 años.

 

The Proposition (John Hillcoat, 2005)

POR EL FETT

Un terreno que el western ha adoptado debido a su oferta de frescura y salvajismo, el desértico paraje australiano sirve para encausar esta sublime metáfora y transformación musical de la obra de Nick Cave a la pantalla, en una exquisita experiencia basada en el dilema de un pistolero, el cual se resume en rescatar la vida de su hermano menor al buscar, traicionar y cazar a su demente hermano mayor. La cinta funciona gracias a la química narrativa de Hillcoat – Cave, los cuales ponen de relieve la poesía del músico para explorar la disyuntiva del trágico pistolero. Estamos ante el “Apocalypse Now” del western, o mejor dicho ante una libre adaptación de “El Corazón de las Tinieblas” de Joseph Conrad.

 

The Royal Tenenbaums (Anderson, 2001)

POR EL FETT

The Royal Tenenbaums (póster) - Wes AndersonLa primera gloria de su filmografía, The Royal Tenembaums es antes de una crítica a todo el sistema de valores familiares americanos, una sátira divertidísima donde un grupo de inadaptados convergen de manera instintiva hacía con su forzada familia y allegados; una cinta 100% “comunicativa” sobre los problemas de comunicación, enriquecida con un ritmo y unos diálogos maravillosos que convierten a todas sus partes actorales en una máquina de engranajes cuasi perfecta, donde la química se da por espontaneidad y donde Anderson es capaz de embalar a todos bajo el mismo nivel histriónico en función del relato y no viceversa. Su estilo visual – narrativo ve su primera explosión en esta agraciada cinta. Así, tanto los colores como la propositiva rigidez de su entorno y actuaciones comienzan a resaltar por persona, psique o trauma

 

The Savages (Tamara Jenkins, 2007)

POR EL FETT

Un deleite ver compenetrados a dos de los mejores actores de su generación, y es que a través de la química entre el finado Philip Seymour Hoffman y Laura Linney, se edifica una de las más nobles y entrañables tragicomedias alrededor del duelo, los “daddy isues” y la redención familiar. Dos hermanos que deben reunirse para cuidar a su enfermo padre, con el cual no se hablan durante años, una situación más recurrente de lo que parece y de donde se desprende una armoniosa sensibilidad por parte de ambos histriones. Mientras la infravalorada Laura Linney recibía su nominación al Oscar, Philip Seymour Hoffman seguiría probando que tan solo su presencia servía para ensalzar direcciones y otras actuaciones.

 

The Sisters Brothers (Audiard, 2018)

POR EL FETT

El mejor western de lo que va del nuevo milenio. Dentro de la cotidianidad del rubro, el guion aporta un equilibrio revolucionario entre lo salvaje y la inevitable modernización, cada uno con su par de protagónicos, cazadores y presas, con sus propios demonios, traumas y porvenires, y que en su unión verán la desgraciada incompatibilidad de sus dos mundos. Una odisea verdaderamente salvaje que desembocará en un choque de culturas trágico y brutal, The Sisters Brothers encuentra hacia su conclusión una pincelada de maestría narrativa que no dejará tibio a nadie, dejando ver a Jacques Audiard como otro extranjero capaz de entender a la perfección la belleza interna de su narrativa y la externa de sus parajes salvajes. El final es hermoso.

 

The Spiderwick Chronicles (Mark Waters, 2008)

POR URIEL SALVADOR

Pese a su tono demasiado infantil, que tarda mucho en iniciar y de tener varios momentos empalagosos, da pauta a mucha creatividad en el diseño de producción que, junto a la banda sonora de James Horner, aviva un mundo fantástico que pocos conocen. Freddie Highmore muestra su crecimiento y valía como actor al interpretar al par de gemelos protagonistas, cada uno con una personalidad diferente, ideando la forma de resolver las dificultades y que representan el preludio a la madurez. Quizás los efectos especiales no han envejecido bien, pero es una historia que se decanta por revivir esos instantes de la infancia, de invitar a disfrutar la magia, prestar el alma a la aventura por muchos meses.

 

The Straight Story (Lynch, 1999)

POR EL FETT

Irónico, pero cuando David Lynch juega a ser “simple”, es cuando encuentra la mayor profundidad e intimidad no solo con sus personajes, sino con su entorno. Ya lo había hecho desde la parte más dramática con El Hombre Elefante, y antes de que acabara el milenio lo haría de nuevo, entregando una de las mejores y más conmovedoras cintas de los 90, donde a bordo de un tractor para cortar césped y 500 kilómetros que recorrer, tanto Farnsworth (tremenda actuación del veterano actor) como Lynch logran transmitir una tremenda y ágil sensación de paz y redención fraternal, coronados con una secuencia final que surte un efecto tan catártico como onírico en la fracturada relación de aquellos dos hermanos. Fabulosa y elegante road movie

 

The Super Mario Bros. Movie (Aaron Horvath y Michael Jelenic, 2023)

POR URIEL SALVADOR

Con muchos altibajos en su ejecución, el compromiso que ha hecho la alianza entre Nintendo e Illumination crea una adaptación respetuosa del mundo de Mario (sostenida en el carisma de los personajes, en especial Bowser y el nuevo ícono de la cultura pop: una estrellita azul con tendencias suicidas), pero también denota un ritmo acelerado y un guion poco cohesivo más preocupado por meter referencias. Una divertida carta de amor a los fans y una digna representante del universo de Nintendo, pero teniendo tanto potencial para ser un parteaguas, prefiere no aprovecharlo y conformarse con ser una más del montón. Pese a todos sus problemas, su falta de pretensión le alcanza para estar entre las mejores obras del estudio

 

The Ugly Stepsister (Emilie Blichfeldt, 2025)

Por Ale Vega

Reimaginar un cuento clásico, robándole la perspectiva a la protagonista para otorgárselo a la desfavorecida: esa que no es tan bonita, tiene pocos modales y es constantemente descartada. La directora Emilie Blichfeldt nos presenta a Elvira (Lea Myren), una joven poco agraciada que se ve confrontada por su hermanastra, ya que ambas se encuentran interesadas por el amor del príncipe. Esta ópera prima utiliza de magnífica manera el body horror para incomodarnos, orillándonos a cuestionar cuánto más estamos dispuestos a caer en las interminables trampas de los cánones de belleza, y cuánta sangre querríamos derramar si eso nos garantiza convertirnos en los elegidos

 

The Virgin Suicides (Sofia Coppola, 1999)

POR EL FETT

El debut de Coppola encontraría en Kirsten Dunst la perfecta extensión emotiva y psicológica que requería esta adaptación, regalando una fuerza dramática que permitió a la joven directora encarar una historia sobre la adolescencia pérdida a través de una tragedia familiar. El crecimiento se ve trastocado por la aniquilación, un freno que cuatro hermanas tendrán que afrontar mientras también van conociendo el mundo exterior, el romance, el sexo y su propio ser. La presencia de  Turner, Glenn y sobre todo James Woods, apadrinan a un cast muy joven que lidera la propia Kirsten, y que Coppola va desarrollando con una especie de incertidumbre visual, como simbolismo de esta misma y machucada adolescencia.

 

The Squid and the Whale (Noah Baumbach, 2005)

POR EL FETT

En su transmutación para convertirse en una copia barata de Woody Allen, Noah Baumbach dio muestras de su poca originalidad directiva en uno de sus primeros films, y definitivamente su mejor. Aunque toma algunos aspectos en cuanto al tono de los diálogos y la progresión de eventos del cine de Allen, el alumno logra que el relato se sienta intimistamente honesto al centrar el conflicto principal desde la perspectiva adolescente, un divorcio – duelo con el que tendrán que lidiar los protagonistas, y que permite una excelente construcción de su entorno, incluidos sus padres, unos increíbles Jeff Daniels y Laura Linney. Sin manipulación o melodrama, Baumbach logra una crítica tan desgarradora como ácida sobre la mala crianza de los hijos.

 

The Young Girls of Rochefort (Jacques Demy, 1967)

POR KIM TOBIAS

Una de las experiencias visuales más coloridas y armónicas de los musicales, en la que cada fotograma es testigo del ensamble preciso entre fotografía y coreografía. Este musical nos transporta a Francia de los 60’s, incitándonos a ser conquistados por el esplendor de sus calles y el romanticismo de sus bellos acordes mientras nos relata la historia de dos gemelas que viven en Rochefort: dos maestras de música y baile que sueñan con encontrar a su pareja ideal y planean viajar a París a buscarlo. Jacques Demy forma un equilibrio entre un cuento meloso y melodías encantadoras, mientras los excepcionales números de baile se roban cada momento en un clásico francés instantáneo

 

Thor: Ragnarok (Waititi, 2017)

POR EL FETT

Para salvar al Dios del Trueno había que pasarlo a cirugía y curarlo con risas. El médico en turno sería uno de los mejores cómicos hoy en día, con un humor espontaneo, sarcástico y adicto a la improvisación, elementos que lograrían la que sin duda es la cinta más divertida del MCU (y de todo el ranking) en cuanto a su absurda naturaleza se refiere. Rompiendo el molde y gracias a su cobertura humorística, Waititi también logra que por fin la proliferación de personajes aporte a este juego de diálogos improvisados, incluso realzando la vena cómica de varios de los inmiscuidos con resultados favorables (Taika Waititi aceptó dirigir la cinta por qué sabia de la capacidad de improvisación humorística de Hemsworth). Por lo tanto esto es 100% comedia, y lo de Avengers son payasadas.

 

To Kill a Mockingbird (Mulligan, 1962)

POR EL FETT

Gregory Peck en To Kill a Mockingbird (poster)

Doble injerencia histórica como una de las piezas “coming of age” más representativas tanto de la literatura como del cine. Interpretada de manera sublime por un Gregory Peck, la mayor virtud en el relato de Harper Lee es esa entrañable estructura narrativa, tan espontánea como emotiva, en donde la historia se desarrolla a través del sentir y percepción de su protagonista, una niña que ve a su padre como el símbolo social ideal en el entorno de la depresión estadounidense. Dicha visión es recalcada con la narración off de su adulta versión, pues esta se somete al recuerdo infantil, haciendo a ese flashback no solo visual, sino también puro e inocente desde la voz de su pasado. Legendaria fábula social.

 

Toy Story (John Lasseter, 1995)

POR EL FETT

No solo por respeto, sino porque en realidad es uno de los mejores guiones en la historia de la animación; la genialidad de Lasseter hizo que coincidiera tanto su factor revolucionario como su innovadora y divertida historia para que se forjara el primer clásico animado fuera de la industria de Ghibli, del canon Disney y con una propia esencia independiente a su propia subsidiaria. Con Toy Story el gigante nació siéndolo, creando una aventura de un solo acto formidable, en el que una serie de personalidades y químicas literalmente cobrarán vida de la nada, recreando un conflicto tan hilarante como entrañable y que a pesar de sus 27 años aún sigue igual de interesante, divertida y vigente.

 

Transformers One (Josh Cooley, 2024)

POR EL FETT

Transformers One es una cinta enfocada hacía el infante, pero sin que esto signifique que el adulto no lo podrá disfrutar. Este será el principal valor de Josh Cooley, que mantiene el interés sobre su cliché y predecible desarrollo gracias a la construcción y desarrollo de la amistad, personalidades y consecuentes caminos de sus dos protagonistas, destinados a convertirse en los legendarios Optimus y Megatrón. El otro acierto es llevar dicho desarrollo amistoso hacía el forjamiento de una hermandad, libertad creativa que permite hacía el final un mejor impacto en su clímax emocional cuando estos dos luchen por sus distintos ideales y al final tomen los distintos partidos como héroe y villano

 

Twinless (James Sweeney, 2025)

Por Uriel Salvador

James Sweeney explora en este proyecto personal la soledad y la depresión por duelo desde 2 perspectivas diferentes que encuentran un apoyo emocional para apoyarse en un caso difícil. La química entre los actores y la excelente estructuración de personajes dan pauta a muchas situaciones hilarantes que funcionan por la naturalidad y empatía hacia ellos. Quizás le hubiera venido mejor recortar un poco del último tercio porque se alarga mucho, pero es una entretenida comedia negra tan emocionante como original que muestra una amistad transitada a hermandad por compartir un dolor en común. Destaca la actuación de Dylan O’Brian en un rol doble bien diferenciado como los gemelos principales.

 

Vozvrashchenie (El Regreso, Andrey Zvyagintsev, 2003)

Por Manuel Esteban Gaytan

“El Regreso” es la opera prima de Zvyagintsev, pero las innegables condiciones de este cineasta claramente influido por Tarkovsky, hace que tal detalle no se note. La historia trata sobre dos hermanos que repentinamente reciben la visita de un hombre que dice ser su padre, tras mucho tiempo desaparecido, y que no aclara el motivo de su ausencia, ni mucho menos de su regreso; por el contrario, les ofrece realizar un viaje. Pese al rechazo de uno de los hijos, ambos se embarcan en esta experiencia. Excelente debut en la dirección de uno de los grandes realizadores de nuestros días, con un espléndido desarrollo de personajes, especialmente de los dos adolescentes y una historia cruda, pero conmovedora a la vez, excelsamente desarrollada.

 

Warrior (Gavin O’Connor, 2011)

POR ARQUICRUZ

La simpleza de su argumento quizás los haga dudar de su genialidad, pero el cómo se desarrollan las pequeñas historias secundarias, revelando poco a poco la vida, pasado y circunstancias de los protagonistas, es el principal diferenciador para dar forma a uno de los mejores dramas deportivos de los últimos tiempos. Sin olvidar que la madurez de Nick Nolte acaba por arrasar de manera catártica y compleja el rubro actoral, es la injerencia narrativa imprescindible de este sobre los personajes de Hardy y Edgerton, lo que detona una alta dosis emocional dentro de un relato sobre la fraternidad, los daddy issues y la redención familiar.  Como cereza en el pastel, tenemos unas escenas de combate bastante reales y geniales.

 

What Ever Happened to Baby Jane? (Aldrich, 1962)

Por EL FETT

Una mezcla de terror psicológico con el más alto poder dramático que dos grandes divas de Hollywood pudieran encausar, era sabido que esta competencia y tortura actoral no solo se daba gracias al preciso guion y la constante tensión creada por Robert Aldrich, sino también al hecho bien sabido en el que Davis y Crawford se detestaban en la vida real. Aunque el cineasta reportó que la profesionalidad prevaleció en el set y las dos leyendas se comportaron, sin duda alguna este odio se trasladó a la confrontación en pantalla, y de donde Aldrich pudo transmutarlo en un relato de odio y venganza tan fino como cruenta, tan emotivo como terrorífico, y tan trágico como meritorio. Una joya del suspenso

 

What’s Eating Gilbert Grape (Hallstrom, 1993)

POR EL FETT

Alabado por la crítica, dos años después de su debut en Critters 3, Leonardo DiCaprio ganaría un casting al literalmente impresionar a su director y productores con su interpretación de un joven con retraso intelectual. Su compromiso hacía con el personaje fue tan profesional, que muchos de sus compañeros de reparto refieren que era complicado separar a Leonardo a Arnie, convirtiéndose este último en un integrante también fuera de la pantalla para muchos. Muy joven y con estas tablas en “el método” y más allá de referir a este como un culebrón de “Hallmark” de alto nivel, este film siempre me ha gustado para ejemplificar el origen de un buen y comprometido histrión (Leo), y el de un sobrevalorado, sobrado y perezoso actor… Johnny Depp

 

Whisky (Juan Pablo Rebella y Pablo Stoll, 2004)

Un dueño de una modesta fábrica de calcetines le pedirá a su empleada (con quién únicamente tiene una relación laboral fría) que finja ser su esposa para impresionar a su hermano. Aunque parece ser una historia convencional, la película da un vuelco de 180° mostrando un retrato áspero y negro de la soledad en la que viven estos individuos, y que incluso aunque este pequeño enredo sea una oportunidad para enfrentarse a sus demonios, sus relaciones terminan siendo marcadas por la frialdad y el silencio. Minimalista, sí, pero el estilo está justificado gracias a la pasividad de los personajes. Una película que termina dejando la misma sensación de que cuando uno bebe whisky: añejo, seco, pero con ganas de repetir otro trago.

 

X-Men: First Class (Matthew Vaughn, 2011)

POR EL FETT

Uno de los pocos ejemplos donde los “teenagers” lucen decentes. Desde la selección del director hasta la de su reparto, estos aciertos se reflejan en una historia si bien convencional y sin ninguna sorpresa, también compleja y un poco realista al ser situada en variados pasajes bélicos – históricos. James McAvoy y Michael Fassbender sostienen el nivel de Stewart – McKellen, y el villano de Kevin Bacon, digan lo que digan, es mejor, más imponente, odioso y/o carismático que el de todas las cintas anteriores descritas en este ranking juntas. Un tenso y excelentemente encausado clímax en su final coronan lo que fue una digna sorpresa para originar la segunda línea temporal de la saga.

 

You Can Count On Me (Kenneth Lonergan, 2000)

POR EL FETT

Ganadora del Festival de Sundance, esta sería la cinta que catapultaría los talentos de Laura Linney del teatro al cine de una manera definitiva, convirtiéndola después en un elemento requerido constantemente por los directores del nuevo milenio. Para muchos críticos, este encantador drama fue nombrado la “mejor película del 2000”, gracias a la sensibilidad con que Lonergan desarrolla una simple pero catártica historia, centrada en el regreso de un hermano y el cómo afecta este la supuesta normal vida de una mujer, madre y soltera. Linney por supuesto es la joya de la corona, desplegando una entereza y credibilidad enormes, haciéndose de su primera nominación al Oscar y varios reconocimientos internacionales

 

Zathura (Jon Favreau, 2005)

Por Uriel Salvador

Esta especie de secuela espiritual de Jumanji supera a su hermana mayor en todos los aspectos (después de todo pertenecen al mismo autor). Primero, Jon Favreau demuestra ser un director competente al dotar una vivacidad y un ritmo ágil a la aventura, balanceando los momentos relajados con los emocionantes. Esto le da a la historia mucha imaginación junto a unos efectos especiales que han envejecido bien, y hace fácil de intuir su mensaje sobre la importancia de la convivencia fraternal y la toma de decisiones. Usa los mismos ingredientes, pero los varía lo suficiente como para tener una identidad propia y más importante: ser divertida.

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Equipo editorial de Cinescopia.


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