Las 20 Mejores Películas de Robert De Niro

De ascendencia italiana, Robert Anthony De Niro Jr. nació un 17 de agosto de 1943 en Nueva York. Un niño tímido de tes blanca y de fuertes raíces artísticas gracias a que sus padres eran pintores y artistas plásticos, el apodado “Bobby Milk” encontró muy temprano en la actuación su verdadera vocación, cuando a sus 16 años comenzara su estudio actoral y teatral.

Para mediados de los 60 encontraría a primer socio directivo, un también naciente Brian De Palma que de igual forma fungiría como su principal promotor, presumiendo entre sus colegas cineastas que había encontrado un chico prodigio en la actuación. No paso mucho tiempo para que De Niro sacara provecho de esta asociación, convirtiéndose de la noche a la mañana en la extensión perfecta de otro joven director llamado Martin Scorsese, con el cual crearía una de las mancuernas fílmicas más legendarias y reverenciadas de la historia

Con más de 120 títulos y 60 galardones (de entre los que destacan dos Oscar, dos Globos y un León de Oro a su trayectoria), forjaría su leyenda principalmente durante de las décadas de los 70,80 y 90, 30 años donde de la mano principalmente de Ford Coppola, De Palma y Scorsese alcanzaría el clímax de su talento, siendo también uno de los rostros iconicos del relato criminal y gansteril a través de la historia.

Cumpliendo 79 años y aunque su carrera en los últimos tiempos se ha visto disminuida por su selección de roles cómicos (registro que le cuesta mucho esfuerzo y donde siempre ha lucido forzado), siempre será momento de recordar y reivindicar a uno de los grandes de la actuación con un TOP 20

 

20 – Angel Heart (Alan Parker, 1987)

POR EDGAR DEL VALLE

Conocida también como “Corazón satánico”, esta es una película difícil de catalogar, siendo una cinta de cine negro, suspenso y toques sobrenaturales, cuando un detective privado sea contratado por un misterioso personaje para que encuentre a un hombre desaparecido, investigación que acarrea a la larga extrañas muertes que parecen estar relacionadas con la magia negra. Con giros de tuerca permanentes y un final verdaderamente inesperado, a actuación de Mickey Rourke es quizá la mejor de su carrera, y la participación de De Niro, aun cuando esporádica, trascendental para la trama, siendo también quizá el papel mas curioso de su carrera

 

19 – Analyze This (Harold Ramis, 1999)

POR EL FETT

De Niro ha demostrado en variadas ocasiones que su registro cómico raya casi en lo nefasto, y digo “casi” por qué existe esto. Una comedia y auto parodia de su propio arquetipo ganstéril, el guion y dirección de Harold Ramis hacen justicia y homenaje no solo a la carrera del actor, sino que también exprime ese “talento” humorístico que el propio Robert se ha esforzado (y forzado) en relucir sin buenos resultados. Mucho de los buenoss momentos de esta comedia también derivan de la excelente química entre sus protagonistas, y es que Crystal más que analizarlo, le otorga un soporte creíble y natural para llevar la credibilidad de la comedia hacía un buen puerto. Una cinta que debe revalorarse.

 

18 – Awakenings (Penny Marshall, 1990)

POR EL FETT

Con el permiso y con todo respeto hacía el difunto Robin Williams, en Awakenings se obvia el porqué hay distintas categorías entre los actores. Mientras a Williams lo vemos en su mismo papel y sin denotar mucha credibilidad hacía el mismo, a De Niro le creemos todo ¡Todo! Desde su estado catatónico hasta su “despertar” y caída, el espectador se vuelve testigo y parte trágica de este fugaz renacimiento del que todos conocemos, no será permanente. La actuación de De Niro es tan trágica como conmovedora, haciéndonos por momentos partícipes de su dolor emocional en el desarrollo de esa reconexión social. La naturalidad de su papel le daría una nueva nominación al Oscar.

 

17 – Mean Streets (1973)

POR EDGAR DEL VALLE

El anunció de la llegada de un gran director (Scorsese) y de un grupo de nuevos actores como De Niro y Keitel. En las calles de Nueva York en los años 70, un joven italiano que trata de ascender en la mafia se tiene que enfrentar al dilema de apoyar a un imprudente amigo que puede obstaculizar su meta. La obligación en ver este filme radica en que esta cinta inicia la dupla De Niro – Scorsese, donde el actor vendría a sustituir de manera abrupta al primer “muso” del director: Keitel.  Como el joven imprudente y causante de la deconstrucción y caída del protagonista y aspirante de Keitel, De Niro denota una naturalidad impresionante como este paria, en lo que sería una de las historias ftaernales más tóxicas y trágicas del cine.

 

16 – Silver Linings Playbook (David 0’Russell, 2012)

POR EL FETT

Fue en su momento un regoficjo tenerlo de vuelta en una calidad interpretativa digna de su figura y carrera, pues ya empezábamos a preguntarnos si ya había olvidado el cómo actuar con tanto bodrio y auto parodia encima. Un papel de mucha fuerza emocional y de gran relevancia para el conflicto y resolución de la cinta, que no busca resaltar, pero si compaginar con todo su reparto en una magistral química. Inteprretando a un exquisito padre supersticioso y compulsivo que intenta ser de ayuda para sobrellevar el trastorno bipolar de su hijo en un panorama familiar bastante jodido, cómico y disfuncional, De Niro se encuentra entrañable y en su mejor forma.

 

15 – Heat (Michael Mann, 1995)

POR EL FETT

Un imperativo del cine criminal, 24 años antes que Scorsese, Mann juntaría a Pacino y De Niro para ejecutar una de las mejores cintas de acción y thrillers policíacos por excelencia. Si bien el trepidante ritmo y suspenso impreso por Mann es equiparable a la ráfaga de balazos incesantes en aquella legendaria secuencia del robo al banco (considerada por la crítica como la mejor secuencia de acción de los 90), es también gracias a la madurez y química actoral que la película pudo sobresalir como uno de los pilares del subgénero. Todo se puede discutir con un cafecito (en otra de las escenas tan aplaudidas como cuestionadas del film).

 

14 – Once Upon a Time in America (1984)

POR EL FETT

Tal vez no haya film más beneficiado por su “Director’s Cut” que este, y es que a la epopeya de judíos gánsteres le fueron recortados 135 minutos de sus 4 horas y media originales, las cuales fueron presentadas en Cannes para después sufrir este corte caótico. Así pues, el literal cuento de hadas mafioso de Sergio Leone, se ve en su versión original beneficiado de manera abrumadora gracias a un mejor entendimiento de sus personajes y odiseas, siendo Robert De Niro el vehículo para un “tour de force” absorvente y entrañable, repleto de fraternidad, traición y deseo. Tal vez no haya mejor momento para enmarcar el tono de esta película y del registro de De Niro, que su última y primera escena.

 

13 – New York, New York (1977)

POR EDGAR DEL VALLE

Con un trabajo muy diferente al que nos tiene acostumbrado Scorsese, dirige un drama romántico en donde rinde un homenaje al cine musical clásicos de los años 40 y 50, muy al estilo de “Nace una estrella”. La cinta narra la difícil historia de amor entre los protagonistas (Robert de Niro y Liza Minelli) y el triunfo de ambos tras la ruptura.  Destaca el marcado contraste que se da entre el realismo, la sobriedad y la sinceridad casi documental de la historia central, elaborada por el director. Así mismo y desde el año de su estreno, esta cinta sería “institución” para otras que abordarían el tema de las relaciones tóxicas y/o autodestructivas dentro del mundo de la farándula y/o el espectáculo. Sin duda alguna, De Niro contó con uno de sus mejores oportunidades para salir de su encasillamiento mafioso, cumpliendo con creces.

 

12 – Casino (Martin Scorsese, 1995)

POR EL FETT

El vertiginoso encuentro amistoso y posterior destrucción de dos mafiosos motivados por los excesos del poder y el deseo carnal (encarnado en una aún muy sensual Sharon Stone), permiten un lucimiento actoral de De Niro en la que quizá sea su actuación más cómoda, pero no por eso menos eficiente. Dominando al arquetipo de mafioso, quizá lo que resalta en el desempeño del actor (y director) en Casino, sea el notorio apego a su realidad, con diálogos y monólogos largos y siempre interesantes donde Scorsese provee del diferenciador a su fetiche para que este se desempeñe de una manera que raya en lo documental. De Niro repitió y repetirá muchos de los matices de este personaje, pero de una manera más compleja, como por ejemplo la siguiente en este top

 

11. The Irishman (Martin Scorsese, 2019)

POR EL FETT

The Irishman es vida, obra y testamento de Scorsese – Pacino – De Niro, enmarcado en cine de otro nivel. Aunque no es ni el mejor film de su mentor, ni el del actor, si es el compendio fílmico más completo sobre su registro dramático y ciertamente de su arquetipo más famoso, en esta ocasión cargando con un frío y tétrico protágonico, carente de emociones pero rico en su compleja y malévola naturaleza. Es en dicha frialdad donde De Niro encaja a la perfección, dando muestras de brillantez ya en su madurez y en completo dominio y equilibrio con su director, narrativa y desarrollo de personaje. Su papel, así como la película, va creciendo y ganando conforme se acerca su final

 

10. Sleepers (Barry Levinson, 1996)

POR EL FETT

Un fuerte drama sobre el abuso infantil combinado con un toque de thriller y fábula gansteril ambientado en plena cocina del infierno, Levinson supo diluir esto en una inteligente mezcla de investigación y poder actoral donde De Niro fungía en un clave rol secundario, el de un peculiar sacerdote al que le importa más el bienestar de su colonia y la justicia que la santidad. En el que quizá sea uno de sus últimos papeles destacables en su carrera de los 90, De Niro imparte y comparte créditos con un cast demasiado variante, otorgando una buena química tanto hacia con los infantes protagonistas como a sus maduras evoluciones conforme avanza la trama y su cronología.

 

9. The Mission (Roland Joffé, 1986)

POR EL FETT

Repite el contexto espiritual y el rol secundario (a pesar de ser la imagen principal para poder vender el film), pero no así la historia, situada durante en los mediados de los años 1700 bajo el telón del Tratado de Madrid y la disputa entre Portugal y España de las colonias. Aquí un ex cazador de indígenas, ahora exiliado y protector del bosque abandona las armas para buscar el perdón de aquellos a los que dio muerte y convertirse a la religión bajo la insistencia de un sacerdote jesuita en plena labor misionera y de transformación espiritual. Un relato crudo donde De Niro ofrece dolor y carisma a cargo del capitán Mendoza, un hombre seriamente alterado por el pasado.

 

8. The Untouchables (Brian De Palma, 1987)

POR EL FETT

Su faceta común en la pantalla sería la de un villano, el tipo duro o bien de connotaciones duales entre su vida personal y su trabajo criminal. Sin embargo para este relato de De Palma es interesante verlo sin medianidades, y en donde con gran solvencia e interpretación física da un entrañable y tenebroso retrato de Al Capone. Muy aproximado a lo que quizá pudo ser, este Capone puede ser socialmente adorable o bien un verdadero monstruo sádico en el objetivo por hacerse del control de una Chicago en efervescencia criminal. La primera secuencia en contraparte con la del bat y/o lo de la opera muestran el perfecto manejo de la “dualidad” de este pintoresco hijo de puta.

 

7. The Deer Hunter (Michael Cimino, 1978)

POR EL FETT

Una gran muestra de su potencial dramático, este relato anti bélico exprime de manera brutal y honesta los sentimientos, miedos y emociones más íntimas de un grupo de amigos tras haber incursionado en la Guerra de Vietnam. Centrado en su personaje y solo usando de base la actividad de la cacería para ser desarrollada como una metáfora compleja en la historia relacional entre estos , De Niro regala una de sus interpretaciones más emotivas y veraces donde también funge como guía actoral para sus compañeros de reparto, algunos aún novatos y que incluso gracias a la interacción con este, acabaron por llevarse el Oscar y varios reconocimientos como es el caso de Christopher Walken y esa poderosa y desgarradora secuencia final

 

6. The King of Comedy (Martin Scorsese, 1982)

POR EL FETT

Salvo una imperativa excepción, de aquí en delante De Niro puede ver la construcción de su estatus a través de la mancuerna artística con Scorsese, siendo la primera de esta lista este atípico thriller donde un obsesivo, fracasado y ciertamente dañado aspirante a comediante rapta a una de las estrellas humorísticas más famosas de la televisión con el afán de conseguir solo una oportunidad a nivel nacional para mostrar su acto y ser juzgado por el público. Si bien es divertida y una inteligente sátira a ese sueño americano y a los medios de entretenimiento dictadores, una de las menos comerciales cintas de Scorsese no puede ser catalogada como una comedia, sino como un drama y crimen incisivo y muy crítico donde el actor sorprende por su versatilidad y talento al salir de su zona de confort. Por cierto, Joker le debe su existencia a esta película

 

5. Taxi Driver (Martin Scorsese, 1976)

POR EL FETT

Anarquía, es lo que el actor dicta en cada uno de los cuadros en escena en la carne de un taxista que no tolera más a la hipócrita sociedad y decide hacer frente a la escoria convirtiéndose en un vengador anónimo. Lo maravilloso de Taxi Driver no es solamente la interpretación de un muy joven De Niro y/o la exposición oscura, sucia y única que Scorsese reflejó en esa vida nocturna y de excesos accidentales, sino que a través del libreto y el desempeño del actor el espectador puede hacer empatía con el ser menos probable: un solitario e ingenuo sociópata harto del mundo que lo rodea (el real y el imaginario) y en búsqueda de una excusa para su expiación demencial ¡Magnífica! Tal y como su actuación

 

4. Cape Fear (Martin Scorsese, 1991)

POR EL FETT

Aunque creo que esta interpretación debe tener una cabida en todo TOP 10 sobre el actor, debo aceptar que la posición 4 puede estar sometida a ciertos gustos personales, y es que no podría usar otro calificativo más que el de “encantado” para comunicar el papel de Max Cady, uno de los mejores villanos cinematográficos dentro de uno de los mejores remakes de la historia. De Niro es un vehículo de momentos clásicos de suspenso y elementos eróticos a la orden de una estética lúgubre dentro este tenso resquebrajamiento familiar. Propositiva y en algunas ocasiones caricaturizada, la actuación de De Niro como este brutal y calculador criminal es solo el inicio de dicha debacle en esta sobre exposición de familia disfuncional que ve su terapia en el Cabo de miedo

 

3. The Godfather Part II (Francis Ford Coppola, 1974)

POR EL FETT

El segundo capítulo de la obra de Puzo y Ford Coppola basa su maestría narrativa no en la evolución y en la construcción de un “segundo” padrino, sino en el recordación y peso emocional de “El Padrino” en la memoria y las acciones de su hijo… Michael. Papel que le brindó su primer Oscar, De Niro interpreta al mismo Vito en sus inicios no venciendo, pero si equiparando a la leyenda Brando en una proyección más joven y enérgica del entrañable capo de la mafia. Así, el comienzo del padre sirve de eje del relato al combinarse gracias a un majestuoso montaje con las acciones cuestionables y sangrientas del hijo, contraponiendo no solo ideologías, sino los más básicos valores de la familia; dos líneas temporales que narran un mismo rumbo pero que lucen a la vez tan distintas en una historia sobre traición a la sangre, historia que comenzará a gestionarse hacia la conclusión del mismo film, en ese inolvidable nexo cronológico que sirve de secuencia final ¡Grandiosa sin lugar a dudas!

 

2. Raging Bull (Martin Scorsese, 1980)

POR EL FETT

El retrato intimista de la vida y obra del polémico boxeador Jake LaMotta no pudo ser concebido actoralmente por otra persona que no fuera De Niro. Bellamente fotografiada, Scorsese guía a su fetiche por una estructura narrativa compleja y demasiado personal, este último aspecto incluso sintiéndose en variados pasajes incómodo debido al exceso en la naturalidad de su tratamiento y desempeños histriónicos. Aquí podremos también apreciar al mejor socio del actor, un Joe Pesci grandioso que en aquellos tiempos exigía ensalzar las cualidades de cualquiera que actuara a su lado. Para muchos el clímax del actor, sin embargo faltaría la obra culminante de la dupla artística.

 

1. Goodfellas (Martin Scorsese, 1990)

POR EL FETT

Un cuento de hadas gansteril y definitivamente la mejor exposición del subgénero solo después del par de Ford Coppola. Ustedes se preguntarán ¿Porqué poner de número 1 una actuación secundaria de De Niro? La respuesta es sencilla, el actor en su tope de maduración se convierte precisamente en la piedra donde se edifica toda la aventura de 3 individuos – amigos adeptos a la mafia italo americana entregando una interpretación memorable que es aderezada por los elementos típicos “Scorsese” para formar no más que una serie constante y ágil de momentos inolvidables. La química actoral es fastuosa, el trío De Niro – Liotta – Pesci proyectan pura magia solo equiparable al manejo de guión y la inclusión de un legendario soundtrack para catapultar todas y cada una de sus escenas como clásicas.

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Acerca del autor

El Fett   @El_Fett   cinescopia.com

El más realista y cabrón crítico de cine que pueda existir. Ente sin misericordia que tiene el halago de transmitir a los mortales su sentir y sabiduría en el mejor recinto sobre el séptimo arte. Cinéfilo de corazón y crítico crudo por vocación. Alter ego del Licenciado en mercadotecnia y RRPP Oscar M Rodríguez (FB) Sigueme en twitter @El_Fett


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